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Piel y órganos de los sentidos

Rubén Bermejo Pérez

Tema 4. Anatomía del equilibrio. Laberinto posterior 1. Introducción -

Tanto el oído interno como el oído medio se encuentran en el peñasco del temporal. El laberinto posterior, respecto al anterior, es mucho más profundo y más duro. El laberinto óseo es el oso más duro de todo el cuerpo. Dentro tiene una estructura parecida a la externa pero es mucho más blanda (laberinto membranoso)

2. Laberinto posterior óseo

2.1. Vestíbulo Presenta una forma cuboidea: - En la cara externa están las ventanas ovales y redondas, que lo comunican con el oído medio. - En la parte baja encontramos el inicio de la lámina espiral del caracol. - La cara interna es la que presenta más detalles. Se destacan dos fosas: la fosa oval (utrículo) y la hemisférica (sáculo). - En la cara superior y posterior desembocan los conductos semicirculares. 2.2. Conductos semicirculares El laberinto posterior está formado por 3 conductos semicirculares (forma de conducto orientadas en los 3 planos del espacio y que se amplían en su parte final – extremo ampular). y una bola llamada vestíbulo. La extremidad no ampular es común en los 3 conductos. Cada uno de ellos describe 2/3 de círculo, y su medida es de 1mm de diámetro interior. Ocupan los tres ejes del espacio. Tienen un extremo plano, llamado ampular donde está el órgano sensorial. Uno de ellos se encuentra en un plano sensiblemente horizontal (externo), mientras que los otros 2 son verticales (superior y posterior).

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La extremidad no ampular de estos dos conductos vesticales es común, con desembocadura en el vestíbulo.

3. Laberinto posterior membranoso

El utrículo y el sáculo quedan al lugar del vestíbulo, pero todas las otras estructuras quedan con la misma estructura, pero en vez de ser hueso es blando. La mácula del utrículo, la mácula del sáculo y las crestas ampulares de los conductos semicirculares equivalen al órgano de Corti, ya que son el alma del equilibrio (de la información de la posición del cerebro). Son el órgano sensitivo fundamental para el equilibrio. -

Laberinto membranoso: endolinfa, rica en potasio y pobre en sodio. Entre el laberinto óseo y el membranoso: perilinfa, rica en sodio y pobre en potasio. Al saco endolinfático. Se reabsorbe la endolinfa y se segrega en la estria vascular.

Todo el sistema lo podríamos esquematizar en un conducto repleto de líquido limfático que se genera en la estría vascular (situada en el caracol) y a través del canal utricular va al saco endolinfático (donde se reabsorbe la endolinfa y hay un reciclaje continuo de líquido. -

Líquido perilinfático: Externo, es decir, situado entre el laberinto óseo y el membranoso. Domina el sodio sobre el potasio (Nemotécnia. líq. Perilimfático,

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como el nombre tiene ya una P tiene más sodio que potasio – si no serían demasiadas P) Líquido endolinfático. Interno, es decir, situado dentro del laberinto membranoso. domina El postasio sobre el sodio. (Nemotécnia. líq. eNdolinfático, como el nombre tiene ya una N tiene más K+ que Na+ – si no serían demasiadas N)

4. Órganos sensoriales

Las máculas y las crestas son los elementos sensoriales del laberinto posterior. Las máculas se estimulan con los movimientos lineales, mientras que las crestas ampulares se estimulan con los movimientos angulares (circulares). 4.1. Máculas Las máculas están formadas por un engrosamiento del epitelio del laberinto membranoso y forman el órgano sensorial del vestíbulo. La mácula del utrículo se encuentra en el plano horizontal, mientras que la del sáculo es vertical. La mácula se mueve dependiendo del movimiento que hagamos. Es decir, si nos movemos solo en horizontal activaremos solo la mácula del utrículo. Una mácula está constituida por unas células de sostén y las células sensoriales. Estas células son ciliadas. En íntima conexión con los cilios se encuentra la membrana otolítica, formada por una sustancia de aspecto gelatinoso, que contiene partículas de carbonato de calcio cristalizado (otolitos u otoconias). Reciben las terminaciones nerviosas de los nervios utriculares y saculares. 4.2. Crestas ampulares

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Forman, a nivel de cada ampolla, un relieve en su luz, perpendicular al eje del canal. Reciben las terminaciones nerviosas del nervio ampular correspondiente. La cresta está constituida por unas células de sostén y unas ciliadas, de manera parecida a las máculas. Cada cresta está cubierta por una mása gelatinosa, la cúpula, donde penetran los cilios de las células sensoriales. -

Se sitúan en el nivel de las ampollas. Células ciliadas cubiertas de masa gelatinosa o cúpula.

El movimiento se da porque son más densos que el líquido, por eso se desplazan más o menos según su peso (densidad). La fuerza angular es mucho más intensa que la lineal, por eso las crestas giran solo con la fuerza angular. El SNC sabrá cuantos grados y hacia qué lado ha girado. Con la misma intensidad, pero son imágenes especulares, es decir, contrarias.

5. Nervio vestibular El nervio vestibular tiene dos ramas: - Rama superior. Utrículo y conductos externo y superior - Rama inferior. Sáculo y conducto posterior. Se unen ambas ramas para formar el nervio vestibular que junto con el coclear forman el VIII par craneal....