Morfología - Lecture notes 1 PDF

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Morfología española...

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BLOQUE 3 Sustantivo, Adjetivo, Adverbio, Interjección, Conjunción y Preposición Sustantivo La palabra sustantivo deriva de “sustancia”. Por tanto, se le llama sustantivo a aquello que puede pensarse aisladamente. Se opone al adjetivo, ya que éste indica accidente. Distinguimos estos tipos: -Concreto / Abstracto: llamamos concreto al que puede percibirse por los sentidos externos (pizarra), y abstracto al que tiene como significado una representación mental (tristeza). Los sustantivos abstractos suelen ser palabras derivadas de adjetivos o verbos y terminan en – dad / –tad (bondad), –ancia (abundancia), –ura (hermosura), –ez (vejez), –iento (aburrimiento). -Común / Propio. Común es aquel que en singular designa una clase, sin especificar. El propio tiene significado individual, no admite plural, ni adjetivo, ni determinantes. El “Hipocorístico” es la deformación del propio, que se emplea en entornos familiares (Pepe, Paco, Lola). -Individual / Colectivo. Se refiere a los concretos. Individual es el sustantivo que en singular significa uno: lobo. El que en singular designa a un grupo se llama colectivo: manada. Morfología del sustantivo. El sustantivo es una palabra que tiene dos morfemas, el de género y número. Ambos son propios y sirven para marcar la concordancia con sus modificadores (adjetivos). -Género: en la mayoría de los sustantivos el género no es motivado, es decir, no supone variación del sexo. Al sustantivo le viene impuesto por su origen. Según su comportamiento respecto al género, distinguimos: A) La mayoría de sustantivos sólo tiene un género: techo, autopista, animal… B) Los hay que presentan dos formas distintas. B1) Heterónimos: Presentan una raíz para el femenino y otra para masculino. Siempre implica cambio de sexo: vaca / toro. B2) Cambio de Morfema. Varía sólo el morfema constitutivo. Distinguimos: -Informa sobre cambio de sexo. Son tres oposiciones: -o/-a (niño/niña), -e/-a (monje/monja) y consonante/-a (profesor/profesora). Deben añadirse los llamados femeninos cultos, que se obtienen añadiendo –iz, -isa, -esa, -ina (actriz, sacerdotisa, condesa, zarina). -Otras informaciones: el cambio de morfema acarrea otra oposición distinta al género. Oficio/instrumento (cartero/ cartera), cambio de tamaño (puerta/ puerto, farol/farola), árbol/fruto (naranjo/ naranja). C) Cambio sólo del Artículo. Puede informar sobre el sexo (el/la estudiante), puede oponer instrumento/músico (el/la trompeta, el/la batería) o puede acarrear un cambio de significado (el/la frente, el/la pendiente). Hay palabras que se emplean indistintamente en masculino y en femenino, se les llama palabras de género ambiguo: mar, reuma, calor. -Número: salvo para algunos sustantivos, que no varían de significado al cambiarse al plural (gentes, matemáticas), la mayoría admite este morfema, que implica aumento en cantidad. El número se forma ateniéndose a estas reglas: -Se añade -s cuando la palabra acaba en vocal: niños. -Si acaba en vocal tónica, añadiremos –s: sofás, tabús. -Si acaba en -í tónica puede formarse añadiendo -s o –es: jabalís o jabalíes. -Si acaba en consonante se añade –es: árboles.

2 -Si en singular acaba en -s, no varía (el lunes/los lunes). Salvo si la palabra es aguda, en tal caso se añade –es: feligrés/ feligreses, compás/compases. -En las palabras compuestas sólo se varía el último elemento: hispano-germanos. Hay palabras que se emplean indistintamente en singular y en plural y sus significado no varía; es así porque se duda de su valor: pantalón(-es), tripa(-s), escalera(s). Sintaxis del Sustantivo. Es el núcleo del Sintagma Nominal. Raramente un sustantivo puede variar a otro: Mi hermano Rafael.

El Adjetivo Calificativo Hay dos clases de adjetivos: determinativo (o determinante) y el calificativo, que normalmente se conoce sólo como adjetivo. Semánticamente, expresa una cualidad del sustantivo. Distinguimos tres usos: Especificativo: expresa valor objetivo, y su finalidad es distinguir el sustantivo entre otros: La cartera negra no tiene dueño. Habitualmente aparece detrás del sustantivo. Explicativo: es un uso más subjetivo; su finalidad no es distinguir el sustantivo de otro, sino subrayar una cualidad. Se suele emplear delante del sustantivo: La desolada viuda contemplaba con tristeza a sus tres pobres hijos. Epíteto: expresa una cualidad que necesariamente posee el sustantivo, por tanto, no añade significación ninguna: Noche oscura / nieve blanca / dulce azúcar. Morfología: es una palabra variable que posee tres morfemas: género, número y grado. El género y número se consideran dependientes, pues vienen impuestos por el sustantivo al que acompaña. En cuanto a su formación, sigue normas muy parecidas a las des sustantivo. El Grado indica la cantidad que posee el sustantivo de la cualidad que expresa el adjetivo. Hay tres grados: -Positivo: indica la presencia de la cualidad sin ninguna valoración (El niño bueno). -Superlativo: señala que el sustantivo posee el grado máximo de la cualidad del adjetivo. Hay dos tipos: Absoluto, que se puede expresar de dos formas; mediante los sufijos -ísimo o -érrimo (antiquísimo, acérrimo, paupérrimo), y mediante el adverbio muy, o cualquier otro que indique máxima cantidad: muy bueno / completamente loco. Relativo: indica que el sustantivo posee el grado máximo dentro de un grupo que le sirve como término de relación. Se expresa con el más ... de, o el menos ... de: Juan es el más alto de la clase. -Comparativo: señala la cantidad de cualidad que posee el sustantivo en relación con otro distinto a él. Se haba de tres grados: Igualdad (tan/tal ... como), Superioridad (más ... que) e Inferioridad (menos ... que). El adjetivo, como el sustantivo, admite otros morfemas constitutivos además del género y número: diminutivos (-ito, -illo), afectivos (-ote), aumentativos (-azo, -on) y despectivos (ucho). Sintaxis del Adjetivo: Si no se emplea sustantivado (Lo útil), necesariamente modifica a un sustantivo. Puede hacerlo de dos formas: directamente, como Modificador Directo del SN, es decir, como Adyacente (La casa grande ha sido arrasada). O formando un Sintagma Adjetival, que modificará al sustantivo a través de un verbo; según sea éste, su función será de Atributo (Iván está muy triste) o de Complemento Predicativo (Iván llegó muy cansado).

3 Repaso del Sustantivo y el Adjetivo: Analiza las palabras subrayadas en las siguientes oraciones (son sustantivos o adjetivos). -Hay posibilidades de que tengamos un encuentro agradable. Esa mujer que va ahí me ha dicho que las gradas están repletas de un público muy apasionado. Posibilidades: Sustantivo, común, abstracto, femenino y plural. Es una palabra derivada, formada por la raíz posibil- (“posible”), a la que se une el morfema derivativo sufijo –idad; el morfema –es es gramatical, significa plural.

-Los almendros florecen muy temprano, y su nutritivo fruto se recolecta en verano, en días aún muy agobiantes: es un trabajo agotador.

-La ternura se nos despierta cuando vemos seres tan indefensos. Nos ponemos bastante nerviosos si nos piden que los tomemos en nuestros brazos.

-La convivencia resulta dificilísima si algún componente del grupo actúa con prepotencia. Empresas multinacionales han quebrado por ello.

-Fue tan alta la abstención, que el parlamento decidió convocar nuevas elecciones. Los nuevos congresistas sabrían hallar salida oportuna a esta sinrazón.

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Adverbios Son palabras invariables (a veces admiten diminutivo: cerquita), que modifican a un verbo (vive lejos), a un adjetivo (demasiado pesado) o a otro adverbio (muy lejos). Se clasifican según su significado en adverbios de lugar (aquí, allí, cerca…), de tiempo (pronto, tarde, ahora…), de modo (así, bien, tranquilamente…), de cantidad (más, menos, bastante…), de afirmación (sí, también, claro…), de negación (no, nunca, jamás…), de duda (quizá, acaso, posiblemente…).

Interjecciones Es una palabra (a veces una onomatopeya) con que expresamos de manera intuitiva nuestro estado de ánimo. No forman parte de la oración, sino que constituyen enunciados independientes. Se suelen clasificar en primarias (ah, ajá, ajajá, ay, bah, ea, uy, hola, olé…), onomatopéyicas (cataplum, pum, plaf, rin-rin, zas…) y secundarias, (en realidad, son verbos, sustantivos…: demonios, anda, Cristo, Dios, vamos…; a este grupo pertenecerían todos los tacos).

Preposiciones y Conjunciones Ambos son elementos de relación, pues sirven para unir dos partes de la oración. La preposición enlaza palabras (casa de madera), y la conjunción, oraciones (vino, pero no se quedó). Sin embargo, pueden intercambiar sus papeles: Es bueno pero tonto / Se alegró de sacar buena nota. -Las preposiciones se clasifican en propias (a, ante, bajo, con, contra, de, desde, durante, en, entre, hacia, hasta, mediante, para, por, según, sin, sobre, tras) y locuciones prepositivas (delante de, junto a, conforme a, al lado de, detrás de…). -Las conjunciones admiten dos clasificaciones. En primer lugar, según su función sintáctica: coordinantes y subordinantes, con todas sus clases. En segundo lugar, según su forma, donde hallamos conjunciones propias (que, y, o, pero, mas, si…) y locuciones conjuntivas (por tanto, sin embargo, es decir, por consiguiente, para que…). La función propia de la conjunción es la de nexo oracional, donde también encontraremos adverbios conjuntivos (cuando, como, donde, mientras), pronombres (que, qué, quien, quiénes, cual) y, como se ha dicho, incluso preposiciones (de, sin, por…)....