Title | Solos en la noche. PerdóN |
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Author | MAITE AGURTO GONZALE . |
Course | Prensa Escrita I: Noticias |
Institution | Universidad Diego Portales |
Pages | 79 |
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Libro sobre el caso de Daniel´Zamudio...
RodrigoFluxá
SOLOSENLANOCHE ZAMUDIOYSUSASESINOS
Ayudantedeinvestigación:JoséJoaquínSuzuki Colaborador:ÓscarDelbene PrólogodeÓscarContardo
Fluxá,Rodrigo Solosenlanoche.Zamudioysusasesinos/RodrigoFluxá SantiagodeChile:Catalonia,2017 ISBN:978-956-324-283-6 ISBNDigital:978-956-324-290-4 PERIODISMODEINVESTIGACIÓN 070.40.72 Este libro forma parte de la colección de periodismo de investigación y rescate patrimonia desarrollada al alero del Centro de Investigación y Publicaciones (CIP) de la Facultad de ComunicaciónyLetrasUDP. Diseñoydiagramación:SebastiánValdebenitoM. Diseñodeportada:Cortés|Justiniano Fotografíadeportada:ArchivodelafamiliaZamudioVera Retratodelautor:JoséAlvújar Edición:AndreaPalet Coordinacióneditorial:JavierOrtega Direccióneditorial:ArturoInfanteReñasco Todoslosderechosreservados.Estapublicaciónnopuedeserreproducida,entodooenparte, ni registrada o transmitida por sistema alguno de recuperación de información, en ninguna forma o medio, sea mecánico, fotoquímico, electrónico, magnético, electroóptico, por fotocopiaocualquierotro,sinpermisoprevio,porescrito,delaeditorial. Primeraedición:abrilde2014 ISBN:978-956-324-283-6 ISBNDigital:978-956-324-290-4 RegistrodepropiedadintelectualNº240.793 ©RodrigoFluxá,2017 ©CataloniaLtda.,2017 SantaIsabel1235,Providencia SantiagodeChile www.catalonia.cl–@catalonialibros www.comunicacionyletras.udp.cl-@PeriodismoUDP-@cip_udp
Índicedecontenido Portada Créditos Índice SOLOSENLANOCHE.ZAMUDIOYSUSASESINOS PRÓLOGOElimperiodeladerrota Presentación Notadeloseditores I II III IV V VI VII VIII IX X Epílogo Agradecimientos Listadeentrevistados Notas
ELIMPERIODELADERROTA ÓscarContardo LahistoriadelavidaymuertedeDanielZamudio,aqueljovenasesinadoagolpesenmarzo de2012,cobraenSolosenlanocheunsentidonuevo,másanchoyásperoquelosresúmenes que la prensa hizo, aquellos artículos profusamente difundidos durante su agonía. El autor, RodrigoFluxá,alumbralosmuros deunsótanoolvidado porlaurgencia,despejalas grietas que no querríamos que existieran, indica el molesto ruido de las filtraciones royendo los pilaresdeunahabitaciónmenesterosaydesamparada.Unaceldaenlaqueseapiñanvíctima y victimarios como si fueran parte de una misma casta unida por el parentesco de una violenciasordaqueseimpregnaenloscuerposcomolosmalosolores. Este libro podría ser descrito como una historia policial o una historia de terror, como un relato detallado de la violencia con mayúscula, como un cuento pormenorizado sobre la manera en que el destino puede llegar a ensañarse con una biografía o con una familia. La idea de libertad parece aquí una fantasía rota desde un principio, y la esperanza, una caricaturaquenadiesepodríatomarenserio. ElasesinatodeDanielZamudiocambiónuestropaís.Uncambioquecomenzóenlaspalabras. Por primera vez la golpiza a una persona homosexual se consideró casi sin excepción un asuntorepudiablequedebíasercondenadopúblicamente.Lapalabra«discriminación»cobró unsentido crudoy brutal queexigía repudio.Así lohicieron agrupacionessociales, partidos políticos,autoridadesdegobiernoeinclusoelmismoPresidentedelaRepública.Nuncaantes enChilehabíaocurridotalcosa.LohabitualeraqueloscrímenescomoeldeZamudioapenas ocuparanalapolicíayquizásdespertaranalgúninterésburlónenlacrónicaroja.Paravarias generaciones de personas gay, incluyendo la mía, el menosprecio frente a una persona homosexualvíctimadeunainjusticiaeralohabitual.Los«asesinatosdehombressolos»eran algosimilaraungénerodelperiodismopolicialyteníanunrangoparaleloaldelasprostitutas asesinadas por sus clientes o las mujeres muertas a golpes por su pareja: la policía apenas indagabaenesoscasosylasinvestigacionessolíanapuntaraquelavíctimahabíasido,deuna extrañamanera,responsabledesupropiomuerte.Era,porasídecirlo,unaculturaenlaque existíanciertosciudadanos conreparos.Ejemplos haymuchos, desdeel asesinatodelpintor JorgeMadgeen1947alllamadocrimen«delanestesista»en1975,pasandoporlamuertede «la loca de hot-pants», baleado por un policía sin mediar más agresión que un reclamo por maltratoydescritoconsornaporlosdiariosen1971.Laprensasehacíaecoentoncesdeun esquemaconocidohastael aburrimiento.ConZamudiomuchode esocambió.Lamaneraen quelaprensa informósobre losacontecimientosque terminaroncon élen comaenla Posta Central fue la evidencia de esa transformación: hubo vigilias, visitas de autoridades, expectaciónpúblicayabatimientogeneralcuandofinalmentemurió. Unadelasdesventajasdelperiodismoeslapremuradelostiempos.Lashistoriassevuelven esquemáticas, esbozos de una realidad que exige simplificación en una colección de arquetipos que puede terminar aplanando la historia, exponiéndola a los focos que inevitablementefundenlosdetalles,elfondoylospequeñosrelatosquesostienenlatragedia. El crimen de Daniel Zamudio rápidamente se transformó en el de un joven homosexual atacadoporneonazis.Doscarátulascontrapuestassinnadaenmedio:homosexualyneonazis. Su vida y la de sus victimarios parecían pender de un par de etiquetas que resumían los acontecimientosymasticabansusbiografíashastahacerlasdigeriblescontansolounvistazo. Bastabaleer«neonazi»paraquetodocobraraunorden:laviolencia,aquellosquellamamosel mal,loqueacabóconlavidadeDanielZamudio,habitabaenunlugardelimitadoajenoalde los lectores, un sitio con fronteras claras distinto al nuestro, el de los ciudadanos decentes. Losvictimariosteníancreenciastorcidasyabrazabanunaideologíaabsurda,eranmonstruos fácilmentereconocibles.Lasetiquetassintetizanytranquilizan. El primer artículo que escribió Rodrigo Fluxá sobre el crimen de Zamudio en la revista «Sábado»de ElMercuriopusoendudaesasetiquetas.Enaquellanotadabacuentadecómo doshermanasdecidierondenunciaralosasesinosdeZamudio.Ellasconocíanalosatacantes y los habían escuchado jactarse de la golpiza que le habían dado a un desconocido. Luego vieron las noticias sobre el joven encontrado agónico en el parque, ataron cabos, reunieron pruebasy,conelapoyodesuspadres,fueronaprestardeclaración.LanotadeFluxáponíaen evidenciaalmenosdoscosas:quelapolicíanoteníaningunapistahastaelmomentoenque
lasmuchachasacudieronalaPDIadarsutestimonio,yquelosresponsablesdeldelito—uno deellospololodeunadelasdenunciantes—noeranpartede ungruponeonaziarticuladoy militante. Incluso más, uno de los denunciados tenía entre sus amistades a personas gay Aquel artículo de Fluxá y otro que publicó semanas más tarde sobre el mismo caso eran el umbral de una puerta que se abría hacia un terreno pantanoso, sin las fronteras bien delimitadas de las etiquetas. Un territorio que por lo trivial se hacía más siniestro. Era el imperiodeloshechos. EnestelibrohayunecodeJeanGenet,otropocodeElríodeAlfredoGómezMorelyalgode SerniñohuachoenlahistoriadeChile,aquelpequeñorelatodelhistoriadorGabrielSalazar. La amoralidad transformada en una estética vagabunda del Diario del ladrón de Genet, la violenciacallejerasantiaguinacargadadeunasexualidadsiniestrarecreadaporGómezMorel ylasraícesamputadasdelafamiliapopulardescritaporSalazar.Unpaisajequeenocasiones puederimarconLosolvidadosdeBuñueloenotrasconlaesperpéntica Lamujerdelpuerto, deArturoRipstein.Fluxáespulcroenlasdescripciones,apegadoaloshechos,disciplinadoen el oficio y talentoso en los detalles. Captura las voces de los personajes en pequeñas frases comoquiengiraconeleganciaunallaveparaabriruncofreimaginariodelquesaldráapenas untrozodelamelodíacompleta.Conesoaliña,apuntalayrecrea.Elautorconstruyeeneste librounasólidacolumnaconlosdespojosdelcaos. En Solosenlanocheestásiemprepresentelaculturadelabandonodelpadreyelhábitatde laviolenciadoméstica.Larabiaquesetraspasaporgeneracionesyquevatiñendolaformade ver el mundo, de tratar a los más cercanos, de responder frente a la necesidad de afecto Aquel monstruo de la brutalidad atávica que alguna vez se encarnó en El chacal de Nahueltororeapareceenestelibrodeotramanera,enunpaísdistinto.Yanosonlaschozas miserables del campo chileno empobrecido de los años sesenta, sino los suburbios de Santiago, las calles del centro, los boliches de diversión y los tránsitos entre una ciudad prósperayotraquevivemirandoeldespeñaderodeunmiseriadiferente:aquínohayhambre, no hay niños descalzos, ni pandilleros fríos en su furia. Aquí hay una pobreza que carcome desprevenidamente,comoelóxidoroyendoelmetal,avecesapenasperceptible.Eslasombra delChacalquesepaseaporunageneraciónnueva,alfabetizadayenaparienciaeducadapara lamodernidad,perollenadefracturasyenfrentadaalascontradiccionesquesurgencuando sevivetancercadelapobrezayconlafrustraciónconstantecomounhechodelacausa. LatragediadeDanielZamudiocobraenlainvestigacióndeRodrigoFluxáunsentidoquese disparamásalládelacrónicapolicial.Hayalgohondamentetriste,inclusoaterrador,notan soloenelhechomismodelcrimensinoenlasbiografíasdetodoslosinvolucrados.Esasvidas, pormomentos,parecenseryaporsímismasunacondena.Fluxásesumergeenlasraícesde una derrota que parece contagiosa, inevitable, y que, como el mismo Daniel Zamudio solía decir, vaempujandolos hechoscomoen unefectodominó enelque nadiesalebien parado. Solosenlanocheeslahistoriadeunfracasodemasiadocercanoparaconsiderarlocomoalgo ajeno,tenueyferozcomolamiradadelladrónalacecho,melancólicamentedolorosocomoun amornocorrespondido,crudamenterealcomounanotaenlacrónicaroja.
PRESENTACIÓN Cuando este libro terminó de escribirse el asesinato de Daniel Zamudio estaba resuelto. El qué,elquién,elcómo,elcuándoyeldóndeseesclarecieron,másalládeladudarazonable, enunprocesoquedurócasidosañosyqueterminóconunalecturadesentenciaasalallena. Era entendible: su muerte remeció el país e inició una nueva etapa en la lucha por los derechosdelasminoríassexualesenChile. Durante ese periodo, la figura de Daniel Zamudio experimentó una suerte de sacralización. Fue utilizadacon propósitos nobles, como la aprobación de una ley antidiscriminación,pero tambiénparafinespolíticosy personalistas.Selotransformóen unpóster, selosituóen un pedestalqueél,segúnlagentequeloconociódeverdad,posiblementenohubieseaprobado. Eseprocesoentregórespuestasrápidas,sesgadas,inocentesydemasiadosimplesparalasdos preguntas más relevantes acerca del violento asesinato del 2 de marzo de 2012: ¿por qué murió realmente Daniel Zamudio? ¿Pudo ese crimen haberse evitado? Reconstruir de la maneramásfidedignaellargocamino,laseriededecisionesquellevaronaDanielZamudioy asusasesinoshaciaelParqueSanBorjaesanochedeverano,paraasírespondermejoresas dospreguntas,fueelmotorqueimpulsóestainvestigación. ¿Pudohaberseevitadoestamuerte?Ciertamente,peronoconmásguardiasomáscámarasde seguridadenlosparques,ytampococonunalegislacióncomolaquesepromulgóen2012y se conoce como ley Zamudio. Los cinco involucrados son una muestra representativa de un tejido social complejo, lleno de carencias en todos los niveles: familias fragmentadas, problemas de identidad y pertenencia, empleos precarios, abuso de alcohol y drogas y nulo soportedelEstado.Sontantaslassimilitudesentrelasvidasdelavíctimaydesusvictimarios queentenderloscomopartedeuntodoesunaprimeralección,difícildetragarconociendolos detallesdelcrimen. ¿PorquémurióDanielZamudio?Noporsergay.Nadiequeconozcamedianamenteelcaso— policías, abogados, fiscales, psicólogos, todos consultados para la investigación— cree que hayasidouncrimendeodio,enelsentidoclásicoyprecisodelconcepto.LahistoriadeDaniel Zamudio es la de muchos en Chile, pero no por su condición sexual sino social. Un joven heterosexualdeunapoblaciónperiféricadeSantiagotienemuchomásencomúncon élque cualquierhomosexualconunamínimareddeapoyo. DanielZamudioesyaunsímbolo,unabandera,unaestatua,yestábienqueasísea:loquele ocurriónodebeserolvidado.Peroparaabrazarlocomotalesnecesarioconocerlorealmente, sentir sus dolores, experimentar sus angustias y contradicciones. Este libro es un intento sinceroporcontarunahistoriaentodassusdimensiones,pordotardecarnealmonumento. R.F.
NOTADELOSEDITORES Estainvestigaciónperiodísticapartióenmarzode2012yseextendiópordosaños.Elautor consultó los expedientes judiciales del caso y de otros procesos asociados, y leyó peritajes sicológicos e informes médicos de los protagonistas. Además, visitó varios de los lugares donde ocurrieron algunos de los hechos principales, como el hogar en que creció Daniel ZamudioenSanBernardoylossitiosquesusvictimariosfrecuentaban.Elgruesodelrelatose basaenmásdeochentaentrevistas,lagranmayoríagrabadasyrespaldadas,incluidaslargas sesiones con la familia inmediata de Daniel Zamudio —padres, hermanos y abuela—, la que estuvo dispuesta a revivir historias dolorosas, heridas abiertas, pensando en que su tragediapodríaayudaraalguienmásenelfuturo.Buenapartedellibroseráunarevelación tambiénparaellos:suhijo,hermanoynietoeraunhombredemuchossecretos. Unapartedequienesprestaronsutestimonioparaellibro—42personas—prefirióhacerlode manera anónima. Se trata de amigos, funcionarios judiciales, profesionales de la salud y testigosquehablaronconlacondicióndemantenersuidentidadbajoreserva.Atodosseles respetaron sus peticiones. La información entregada por ellos fue contrastada con otras fuentesocuentaconrespaldodocumental.EnelcasodequienfueparejadeDanielZamudio portresaños,enelrelatonoaparececonsunombreverdadero,envirtuddelderechobásico de no dar a conocer públicamente la opción sexual de quien no lo haya hecho de forma voluntariaenelpasado.Elmismoprincipioseaplicóenotroscasos. Ningunodeloscondenadosquiso participardeestainvestigación,a pesardequese intentó contar con su testimonio. Familiares, amigos y conocidos suyos sí, esperando que la reconstrucción metódica de sus vidas les ayude a entender la magnitud del error que cometieron. AndreaInsunzayJavierOrtega CentrodeInvestigaciónyPublicaciones UniversidadDiegoPortales
elsiglonuevotambiénmeasesina yunapiscinadeketaminaymimandíbulaestádormida enlasonrisasincorazón,lapenaapenascontenida
ÁlexAnwandter,«Casalatina» [lacanciónfavoritadeDanielZamudio]
I A las nueve y media de la noche del 2 de marzo de 2012, Daniel Zamudio dormía en una jardineradecemento.Eseseazarelquehorroriza.Nohubounplanmaestro,niunasucesión lógicadehechosdesencadenantes.Sisehubieseborradounashorasantes,unascuadrasmás allá, si no hubiese preferido estar en cualquier lugar del mundo que no fuera su casa, su barrio,DanielZamudiohabríavivido.Eseldesorden,loaleatorio,loque nodejadormirpor las noches, lo que hace ver bandas organizadas, ideologizadas, con un propósito, por esa tendencia humana a intentar racionalizar la barbarie para esquivar el terror al caos Cualquiera pudo estar en esa jardinera y ver de frente lo que él vio esa noche: el mal sin agenda.Elmalporelmal. A las nueve y media de la noche del 2 de marzo de 2012, Daniel Zamudio dormía en una jardinera de cemento en una plazoleta a las afueras del Parque San Borja, en la calle Carabineros de Chile, cerca de Alameda con Portugal, cuando un grupo de ocho jóvenes lo distinguió a veinte metros de distancia. Aunque había sido un día caluroso de un verano caluroso, y a excepción de unos calcetines a rayas, vestía enteramente de negro. Lo acompañaban dos mujeres que luego nadie pudo identificar. Ellas, al verlo así, imposible de tratar,hicieronloquemuchosamigoshabíanhechoantesensituacionessimilares:lodejaron solo. El grupo se acercó entre risas. No era poco común esa imagen un viernes: al San Borja, rodeadode universidades,repleto deescolares, seiba atomar. Loconocían devista, era un habitualdellugar.PatricioAhumadaGaray,queibaenelgrupo,lepegódoscachetadaspara quedespertara.Ledijoquemejorsefuera,quenoloqueríaverdesparramadoahí,enloque consideraba su territorio, porque lo podían asaltar. No había por qué sospechar que esas palabras,aesahora,noeransinceras. Le preguntaron dónde vivía.1 Daniel, sin pensar, casi por reflejo, balbuceó lo que nunca querríahaberdicho: —EnSanBernardo. Casi enseguida se corrigió, moviendo la cabeza. Dijo que no sabía bien dónde vivía. Lo levantaron y le mostraron la ruta hacia la Alameda. Daniel se paró y caminó en equilibrio precariohacialacallePortugal.Setropezótresvecesenlaprimeracuadra.Elgrupovolvióal lugardonde sehabía producidoel encuentro.CynthiaAnchil,la únicamujer, sefue pasadas las diez. Trabajaba temprano al día siguiente. Le insistió a Fabián Mora Mora que la acompañara,peroestesenegó.Otrostresjóvenesseretirarondespuésdeella,sinsaberque las fiestas, reuniones o compromisos que tenían más tarde esa noche terminarían por salvarlos, judicial y psicológicamente. Quedaron cuatro: Ahumada Garay, Mora Mora, AlejandroAnguloTapiayRaúlLópezFuentes. López Fuentes fue a comprar más cerveza a la botillería que está a un costado del supermercadoUnimarcdelacallePortugal.Llevabanyadoshorastomando.Mientrasvolvía, tropezó con Daniel: dormía nuevamente, pero en la calle, en el paso de cebra de Portugal LópezFuenteslolevantó;temióquelofuesenaatropellar.Lollevódevueltaalaplazoletay selopresentóasusamigoscomounchiste,comoquienencuentraunasllavesquedabapor perdidas. Lo sentaron en un banco a pocos metros. Ahí, minutos mástarde, dos extraños le trataronderobar.Entreloscuatroespantaronalosladrones,yluegodepositaronaZamudio aunmáscercadedondeestaban. LópezFuentesyMoraMorafueronacomprarunapromociónderonMitjansyCoca-Cola,la segunda de la jornada. Cuando regresaron, Daniel había reaccionado. Estaba contando que queríaestudiarteatro.Queteníaveinticuatroaños.AnguloTapia,queestabamuyanimado,le respondió: —Yotambiénsoyunartista.Estudiéballet. Hablaron un rato de música. Ahumada Garay se aburría. Llamó a su amiga Gema Lizana catorcevecesentrelas22:09ylas22:38.2JustodespuésmarcóelnúmerodeTamaraStoll,a quienllamaba«prima»peseanote...