1. Cormófitos PDF

Title 1. Cormófitos
Course Botànica
Institution Universidad Complutense de Madrid
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Apuntes de la segunda parte de la asignatura de botánica. Muy útiles para poder enterarse de algo y a la vez poder aprobar el examen de Tomás Gallardo. Son apuntes de sus clases completados con información de otros profesores que ayudan a entender lo que él da. La clasificación taxonómica utilizada ...


Description

BOTÁNICA 1. LOS CORMÓFITOS Los Cormófitos son las plantas con semilla y los helechos. Se oponen a los talófitos (algas, hongos y briofitos) y a protófitos (protistas y algunas algas y hongos). Son los vegetales diferenciados en raíz, tallo, y hojas que poseen fibras y vasos y que han sido capaces de colonizar el medio terrestre, donde viven en su totalidad (salvo las Zosteras, que han vuelto a la vida marina de alta concentración de sales). “Cormo” es el nombre del aparato vegetativo constituido por raíz, tallo y hojas. La raíz se encarga de absorber el agua y las sales minerales que distribuirá el tallo conformado por vasos vasculares y tejidos de sostén, hasta las hojas que están recubiertas de cutícula. Los cormófitos han desarrollado cutícula como defensa contra la evotranspiración. Esta cutícula puede llegar a ser pluriestratificada y puede ausentarse en organismos acuáticos. Para mantener el intercambio gaseoso y de agua la cutícula posee estomas distribuidos por toda la superficie. Dentro de los cormófitos encontramos: Pteridófitos, Gimnospermas (semilla) y Angiospermas (fruto recubriendo a la semilla). No son catalogaciones taxonómicas, pero es la clasificación típica de las plantas terrestres, solo las angiospermas se engloban en una única subclase, la subclase magnoliidae. El término fanerógama se refiere a los cormófitos con semilla o espermatófitos: las plantas con órganos reproductores visibles (angiospermas y gimnospermas) y también carece de carácter taxonómico.

1.1 Tejidos de los cormófitos Epidermis: es la capa más externa formada por células vivas aplanadas y fuertemente unidas; que está recubierta por cutícula: capa dura lipídica y acelular que posee estomas y tricomas. En tallos y raíces con crecimiento secundario, es reemplazada por la peridermis, formada fundamentalmente por felodermis (células vivas parenquimáticas) y súber o corcho de células muertas.

Tejidos fundamentales: Parénquima, Colénquima esclerénquima Parénquima: Tejido fundamental de células vivas, poco especializadas y morfología variable. Puede ser Clorofílico, ergo fotosintético, o de reserva (de almidón y otras sustancias o de agua [en este caso recibe el nombre de acuífero, plantas de medios áridos]).

Colénquima: tejido de sostén de plantas jóvenes y herbáceas formado por células vivas y situado generalmente bajo la epidermis. Esclerénquima: Tejidos fundamentales de sostén, células muertas, de paredes gruesas y endurecidas. Mantienen la estructura de la planta. Compuesto por fibras y esclereidas.

Tejidos de crecimiento: Meristemos Meristemos: Tejidos de crecimiento, tanto en longitud como en grosor. Se clasifican según su origen, posición en la planta y tejidos que originan. Los meristemos primarios derivan del embrión directamente. Se denominan según su posición en la planta. A partir del meristemo apical se genera un promeristemo y de este los meristemos apicales: la protodermis, que genera la corteza y la epidermis; el procambium, que da origen a los tejidos conductores; y el meristemo fundamental, que dará origen a los tejidos fundamentales: parénquima colénquima y esclerénquima. El meristemo apical junto con los meristemos intercalares son los responsables del crecimiento en longitud de la planta. Los secundarios se originan a partir de tejidos adultos, presentes en plantas de más de un año. Originan el crecimiento tanto en grosor como en longitud. También se les denomina meristemos laterales ya que generan el crecimiento en grosor de la planta. Provienen en parte del periciclo (tejido radicular que rodea los haces conductores) y son el cambium, que sustituye al procambium en la formación de haces vasculares; y el felógeno, que crea la felodermis y el súber.

Tejidos conductores: Xilema y Floema Xilema: Tejido conductor formado por células muertas que transporta el agua y las sales minerales. Absorbe el H2O de la raíz y lo lleva al resto de la planta. Se le conoce además como Leño o Hadroma. El XIlema se genera desde el meristemo (cambium o procambium) hasta el interior del eje, y sus células maduran hasta tener la pared secundaria lignificada. Puede formar haces o cordones o un cilindro de gran tamaño. En gimnospermas primitivas y pteridófitos, el xilema está formado solo por traqueidas: células alargadas que se estrechan en los extremos, se disponen alineadas entre sí y contactan entre ellas por perforaciones en la pared denominadas punteaduras areoladas a nivel horizontal por las que el agua y las sales pasan en un flujo lateral. En angiospermas y gimnospermas evolucionadas, además de las traqueidas existen las tráqueas, grandes células más cortas pero de mayor diámetro, que forman vasos y que aumentan la capacidad de distribución debido a su mayor tamaño y a que presenta aparte de las punteaduras, unas placas de perforación de comunicación vertical que generan un flujo transversal que aumenta la eficacia en la conducción de la savia bruta. Floema: Tejido conductor formado por células vivas que reciben el nombre de elementos del tubo criboso y que se encargan de distribuir los tejidos de síntesis de la planta, las sustancias

elaboradas. En los extremos los elementos del tubo tienen poros formando una placa cribosa por donde difunden las sustancias en un flujo transversal. Cada año se genera un floema nuevo, que es lo que va dejando anillos en los troncos. También recibe el nombre de Liber o Leptoma. Las células floemáticas se forman hacia el exterior del meristemo en relativamente poca cantidad ya que se renuevan cada estación de crecimiento, siendo las causantes de los anillos en los troncos.

Agrupación de tejidos vasculares: la Estela El conjunto de los tejidos vasculares independientemente de su organización se denomina Estela. Dicha estela puede estar separada de la corteza por una delgada capa meristemática denominada periciclo, que se aprecia mejor en las raíces y que puede limitar hacia el exterior con la endodermis (capa más externa de la corteza). Tipos de Estela Se diferencian cuatro tipos de estelas según la distribución de sus haces vasculares: protostela, sifonostela, eustela y atactostela. Protostela: Son las más antiguas y se caracterizan por la ausencia de médula (macizas). Constan de un cilindro vascular con el xilema en posición central y el floema rodeándole. Rodeando todo, córtex. La forma más sencilla, la haptostela no se encuentra apenas en la naturaleza, solo en plantas muy primitivas como Rhynia. Al cilindro de esa haptostela comenzaron a salirle entrantes y salientes y se formó la actinostela, en géneros de Pteridófitos como Psilotum. Y de esta derivó la plectostela, típica de helechos más evolucionados como Lycopodium y donde el floema atraviesa en bandas el cilindro del xilema. Sifonostela: Deriva de una haptostela que empezó a desarrollar tejido vegetativo en el interior del cilindro xilemático que se denominó médula. Hay dos tipos de sifonostelas, la ectofloemática, que solo tiene el floema por el exterior y la anfifloemática, que tiene también un anillo interior de floema que rodea la medula y es rodeado a su vez por el xilema. Las sifonostelas anfifloemáticas se pueden fragmentar una vez (solenostela) o varias (dictiostela). Estas estructuras anfifloemáticas son todas tiipicas de helechos, mientras que de las ectofloemáticas derivarán las eustelas, propias de espermatófitos. Eustela: los anillos de tejido conductor se fragmentan en muchos grupos de haces conductores distribuidos en un anillo. Es el más abundante ya que se da en gimnospermas y dicotiledóneas. Atactostela: deriva de la eustela y en ella los haces vasculares no describen un círculo sino que se encuentran dispersos por toda la superficie interna. Se da en las monocotiledóneas, uno de los dos grandes grupos de las angiospermas. Cada haz conectivo da lugar a una hoja. Es el de Palmeras, con tronco columnar.

1.2 Partes de los cormófitos: La raíz La raíz es el órgano vegetal que posee geotropismo positivo y que generalmente se encuentra bajo tierra. En su ápice aparece una vaina llamada cofia o caliptra o pilorriza, que protege el meristemo apical de la raíz, que forma en la zona denominada meristemática la protodermis, el procambium y el meristemo fundamental. Estos meristemos darán respectivamente la rizodermis, los tejidos vasculares y el córtex. Existe entre la cofia y los meristemos una zona llamada centro quiescente, un reservorio de células genéticamente seguras debido a su bajo ritmo de división y que se utilizan para regenerar las partes que les rodean si resultan dañadas. Tras la zona meristemática se da una zona de alargamiento o elongación continuada por la zona de maduración, donde los tejidos están ya claramente definidos. Esta última presentará los pelos radicales en la epidermis de la raíz. La epidermis de la raíz o rizodermis es habitualmente monoestratificada, formada por celulas alargadas apretadas y sin cutícula. Pueden presentar unas prolongaciones que duran unos pocos días de carácter celular que se denominan pelos radicales y que aumentan la superficie de absorción de la raíz. El córtex es la zona situada entre la exodermis y la endodermis y esta formado por tejidos fundamentales. La endodermis está presente en todas las raíces y se trata de una capa parenquimática que presenta habitualmente la banda de Caspary. Consiste en un engrosamiento que impermeabiliza los espacios intercelulares impidiendo la difusión libre de iones hacia el sistema vascular, controlando por tanto el paso de sustancias a travér de la membrana plasmática de las células de la endodermis. La raíz fija la planta al suelo y absorbe agua y nutrientes. Puede engrosarse y almacenar sustancias nutritivas y también puede sintetizar hormonas en sus meristemos que transporta por el xilema al resto de la planta. Hay generalmente dos tipos de raíces, las heterogéneas, donde las raíces son de diferente rango (sistema alorrizo) y las homogéneas, donde la raíz primaria tras desarrollarse desaparece dejando múltiples raíces del mismo rango que no profundizan pero se encuentran muy disperas (sistema homorrizo) típico de monocotiledóneas.

1.3 Partes de los cormófitos: El tallo Hay dos tipos de tallos con hoja: Macroblastos y Braquiblastos. Macroblastos: Tallo con crecimiento ilimitado, continuo. Nudos alejados unos de otros. Braquiblastos: Tienen un crecimiento limitado. Sus nudos están muy próximos unos a otros. Se sitúan sobre macroblastos.

Se pueden dar a la vez en la misma planta (cerezo, enebro)

Modificaciones del tallo: •

Subterráneos: 1. Rizoma: tallo horizontal subterráneo presente en la mayoría de pteridofitos y en algunas angiospermas como el jengibre. 2. Tubérculos: tallos muy engrosados debido al almacén de reservas como el almidón. Patata y chufa (horchata valenciana). 3. Bulbo: tallo corto de muchas hojas carnosas y engrosadas. Almacenan nutrientes. Cebolla. Ajo. Puerro.



Rastreros: En contacto con la tierra. Estolones. Llega un momento en que enraízan y dan lugar a una nueva planta. Fresa. Gramíneas.



Tallo trepador: Delgados y flexibles. Se adhieren por zarcillos (La vid, la Bugambilla) o discos de fijación. (Discos adhesivos en la flor de la pasión genero passiflora).



Suculentos: verdes, fotosintéticos. Engrosados por el almacén de agua. Cactus (cactáceas) Originarias de América del Norte.



Con actividad fotosintética: Sin engrosar porque no hay agua que acumular. Pteridofitos (equisetum). Genista.



Cladolios: Verdes fotosintéticos con forma de hoja. Chumbera.

Ramificaciones del tallo: 1. Dicotómicas: Poco frecuente en espermatofitos (angiospermas y gimnospermas). Solo la presentan algunas palmeras y cactáceas. Frecuente en pteridofitos. Del eje principal salen dos ramificaciones y de cada una de estas salen otros dos de igual longitud. 2. Monopódica: Eje principal que nunca pierde su actividad meristemática, crecimiento continuo. De él salen ramificaciones secundarias que no superan en altura al eje principal. Abetos. 3. Simpódica: El eje principal deja de crecer, las secundarias pueden superarle en altura. Platanos. Castaño. Arce. Olivo. En la hierba solo decimos si el tallo está o no ramificado (no hay tipos de ramificaciones). Cuanto más viejo más ramificados.

1.4 Partes de los cormófitos: Las hojas Las hojas son la parte laminar y verde de la planta, y son siempre aéreas. Nacen de los nudos de los tallos en forma de yema foliar, que se diferencia según localización en lateral y apical.

En la hoja se desarrollarán la fotosíntesis la respiración y la transpiración. Fotosíntesis: se obtienen hidratos de carbono a partir de anhídrido carbónico y H2O con la liberación de O2. Transforma la energía lumínica en química. La luz es absorbida gracias a la clorofila de los cloroplastos. Solo tiene lugar de día. Respiración: La planta consume oxígeno de la atmósfera y libera dióxido de carbono. Tiene lugar tanto de día como de noche. Transpiración: a la hoja le llega más cantidad de agua de la que va a utilizar para realizar la fotosíntesis. El agua sobrante lo libera a la atmósfera. La cantidad de agua que transpiran es variable. Un 10% de agua de la atmósfera viene de aquí. Hay dos tipos de hojas: Microfilas y Macrófilas o megáfilas. Micrófilas: Hoja sencilla de pequeño tamaño. Nervio simple (no ramificado) por el que van vasos conductores primitivos. El crecimiento se produce gracias a meristemos intercalares. Se da en teridofitos primitivos. No se produce un corte en el sistema vascular. Megáfilas: Grandes en tamaño. Nervación compleja, nervio principal y secundarios. Vasos conductores evolucionados. Espermatófitos y teridofitos más evolucionados. Crecimiento por meristemos apicales y laterales. Produce una ventana foliar, una interrupción del haz vascular. Morfología, partes de la hoja: Peciolo: Une la lámina al tallo. Hay hojas que carecen de peciolo, son las hojas sentadas o sésiles. Lámina o limbo: parte desarrollada, verde, dividida en dos caras, haz (superior) y envés (inferior). Según el limbo hay dos tipos de hojas, simples (donde no se diferencian foliolos, si hay entrantes nunca llegan al nervio principal) o compuestas (varios foliolos provenientes de un único peciolo. En la hoja compuesta el limbo se divide en fragmentos llamados foliolos. Son características de las leguminosas. Si hay más de tres foliolos se habla de hojas paripinnadas (nº par de foliolos) o imparipinnadas (nº impar) Se ve en el ápice, si hay una o dos hojas será impar o par respectivamente. Nervios centrales y nervaduras secundarias, base, borde, ápice. Según la forma reciben distintos nombres, ya que hay una enorme diversidad. En las gramíneas hay hojas envainadoras, con una vaina en la base que abraza o envuelve al tallo. La disposición de las hojas en el tallo se denomina filotaxis y puede ser alterna (haya), opuesta (ortiga), verticiladas (de un punto salen más de dos hojas, equisetum), decusadas (opuestas en dos planos distintos, madreselva), en roseta basal (diente de león), decusado imbricadas (tienen forma de espada y se solapan unas con otras, ciprés, sabina), y en fascículos (cedro, pino)....


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