Biomas Terrestres - Nota: 8 PDF

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Informe tipo ensayo de los biomas terrestres....

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BIOMAS TERRESTRES Presentado por: Miguel Ángel Calderón Moreno Código: 1726552

Las escalas naturales definen las relaciones, procesos ecológicos y de transformación de energía que experimentan las distintas entidades que las componen. Una de las escalas más grandes en ecología es el bioma, un conjunto de ecosistemas caracterizado por las especies de fauna y flora presentes, además de condiciones geográficas y climatológicas distintivas. Asimismo, los biomas presentan uniformidad en el tipo de vegetación, lo que permite más fácilmente su clasificación e identificación. La distribución de los biomas en la tierra no es uniforme y de igual forma no existen límites exactos definidos entre un bioma y otro, sino más bien una gran zona de transición donde se produce el traslape entre estos. En el presente texto se tratarán algunos de los biomas terrestres más representativos, así como la descripción de los elementos característicos que los definen. Uno de los biomas más complejos y ampliamente distribuidos en África, Asia, Centro y Sur América en particular es el bosque tropical lluvioso o simplemente bosque tropical, localizado principalmente en las zonas de baja altitud con climas tropicales húmedos y en algunos casos con periodos de sequía pronunciados distribuidos en una o más estaciones. La distribución del bosque tropical en distintas regiones biogeográficas produce diferencias entre las especies presentes, sin embargo, la estructura de la selva y la ecología de la misma es semejante en todos los puntos. En términos generales, los bosques tropicales tienen una estructura de varias capas; una de árboles emergentes sumamente altos y dispersos que se proyectan de 50 a 60 metros por encima del nivel general; la capa del dosel que forma una alfombra siempre verde continua de 25 a 35 metros de alto; el estrato inferior al dosel de árboles más bajos de 15 a 24 metros de alto, que sólo se hace densa cuando hay alguna interrupción en el dosel; arbustos y árboles mal desarrollados y árboles jóvenes en la sombra profunda; y finalmente, una capa del suelo compuesta de hierbas altas y helechos. Climatológicamente, este bioma se caracteriza por presentar altas temperaturas durante todo el año, con estaciones húmedas y secas usualmente asociadas con el movimiento del ecuador térmico alrededor del ecuador geográfico. Usualmente hay dos estaciones de lluvia por año cerca del ecuador, a medida que el sol pasa sobre cada uno de los equinoccios, pero solamente una en latitudes alejadas del ecuador. Los vientos fuertes están asociados con las tormentas o con la estación seca. Uno de los factores en los que se sabe que influyen las condiciones de precipitación es en las etapas reproductivas y otras actividades de algunas plantas y animales.

La diversidad de fauna y flora es muy amplia, pudiendo en el caso de la flora encontrar más diversidad por unidad de área que la existente en lugares mucho más grandes del mundo. La mayoría de la fauna se concentra

en las capas superiores de vegetación en las selvas tropicales, encontrándose mamíferos arbóreos, reptiles, anfibios, aves y una gran variedad de artrópodos. De acuerdo con estudios realizados en estas zonas, es posible que la tasa de cambio evolutivo y especiación sea particularmente alta en las regiones del bosque tropical, lo que ha producido el origen de diversas especies que posteriormente han migrado e invadido comunidades localizadas más al norte. Dejando de lado los inmensos y calurosos bosques tropicales, encontramos uno de los biomas terrestres más alterados del planeta, los bosques templados. Al observar un mapa que muestre la densidad poblacional del mundo, se evidenciará que esta corresponde con la distribución de los bosques templados. Esta ocupación y aprovechamiento ha conducido a la disminución abrupta o pérdida de este bioma en varias partes del planeta. La importancia mundial del bosque templado como región biótica radica precisamente en el hecho de que la civilización occidental ha alcanzado un desarrollo intenso en estas áreas. La composición del bosque templado es muy variable, presentándose distintos tipos de flora y fauna en cada uno de ellos, soliéndose presentar emigraciones o hibernaciones en los animales durante el frío del invierno. La ocupación de estos bosques generalmente se da en lugares con precipitación abundante y uniformemente distribuida, además de temperaturas moderadas con un marcado patrón estacional. Este contraste estacional, produce que los árboles y arbustos carezcan de hojas durante gran parte del año. La presencia de una densa cobertura vegetal y el clima cálido y húmedo permite el máximo desarrollo de materia orgánica en el suelo, formando una capa de humus que sirve de hogar y alimento a numerosos especímenes. La gran diversidad de especies vegetales provee recursos alimenticios y de espacio a una gran diversidad de animales, los cuales pueden varíar de acuerdo con la zona geográfica en la que se encuentre el bosque. La taiga o bosque boreal circumpolar nórdico, son bosques extendidos en las montañas de las regiones nórdicas de Norteamérica y Eurasia, y en algunos casos también en los trópicos. Las formas de vida más comunes en este bioma son especies de árboles con hojas en forma de aguja como la pícea, el abeto, el pino y el alerce. La sombra densa producida por estos árboles durante todo el año provoca un mal desarrollo de las capas de hierba y arbustos más abajo en el suelo. A pesar de esto, la tasa de producción fotosintética es muy alta durante todo el año. Los líquenes y musgos son otros de los componentes importantes de este bosque. En toda la región se encuentran pantanos donde puede encontrarse Sphagnum, juncias, orquídeas y brezos. La ubicación de estos biomas en altas latitudes produce veranos muy frescos e inviernos muy fríos, con precipitaciones que tienden a distribuirse por todo el año, con una gran acumulación de nieve durante el invierno. Estas bajas temperaturas inhiben la acción bacteriana y fúngica, por lo que la tasa de descomposición es lenta, lo que provoca un aumento en la altura de la capa de hojarasca. La diversidad de flora de estos sitios es pobre con respecto a otros tipos de biomas, pudiéndose encontrar apenas de 1 a 3 especies de árboles dominantes incluso en los sitios más desarrollados y productivos. Los mamíferos en este bosque son moderadamente diversos, sostenidos probablemente por la abundancia (más no diversidad) de especies de roedores presentes.

Otro bioma con distribución limitada es la tundra, ubicada circumpolarmente en el hemisferio norte, pero que en el hemisferio sur solamente se encuentra en la península antártica e islas adyacentes. La distribución en zonas tan extremas hace de este bioma una zona tan fría que los árboles no pueden sobrevivir, por lo que la vida vegetal tiende a ser de bajo crecimiento, y durante el corto verano, llegan aves en grandes cantidades a alimentarse de los insectos que nacen en este periodo. En esta zona existen además diversos mamíferos y aves de presa adaptadas al clima. Unas regiones ecológicamente similares, pero de distribución y tamaño más reducidas es la tundra alpina, ubicada por encima del límite superior de los bosques en las montañas elevadas. El clima de la tundra varía a lo largo del año, pasando por veranos frescos hasta inviernos muy fríos. En las zonas de baja precipitación la evapotranspiración es mínima, debido a las bajas temperaturas y el suelo congelado, lo que permite al bioma la retención de agua y de esta forma el bioma se ha desarrollado como tundra y no como desierto. Otro de los factores que influye de manera importante en la biota es la variación de la longitud del día con la estación; mientras que en verano todo el tiempo es iluminado, en invierno solamente hay oscuridad. El congelamiento permanente de los suelos causa pobre drenado y suelos alternadamente húmedos y secos, que produce mezclas de óxido ferroso gris y óxido férrico rojizo. Frecuentemente se encuentran suelos recién formados y rocas desnudas, consecuencia de los glaciares que se retiran y, a raíz de esto, es normal encontrar áreas con muy bajo contenido en nutrientes. En lo que respecta a la diversidad de fauna y flora esta es baja, esto debido a que es un ambiente riguroso y estructuralmente simple. La diversidad disminuye desde el norte hasta la zona polar, que es una zona principalmente sin vida. Muchos grupos taxonómicos importantes, tanto de plantas como de animales están pobremente representados o ausentes. Los únicos mamíferos presentes son los activos durante el invierno, ya sea encima o debajo de la cubierta de nieve. Unas pocas aves son activas durante el invierno, pero la gran mayoría migran hacia el sur luego de una breve estación de apareamiento. La diversidad de algunos grupos de aves, particularmente gallinetas, es alta durante la estación de reproducción. Están ausentes, básicamente, los animales ectotérmicos, mientras que las arañas y algunos grupos de insectos están moderadamente bien representados. Otro de los biomas, junto con la taiga y el bosque tropical, más ampliamente distribuido y de mayor cobertura en el mundo es la sábana tropical o simplemente sábana. Este se encuentra en regiones cálidas con temporadas de precipitación y una o dos temporadas largas de sequía, en las que se producen incendios que afectan de manera importante el ambiente. Esto implica que la vegetación presente en este bioma, árboles y pasto, deben ser resistentes a sequías e incendios, por lo que la cantidad de especies no es muy amplia. Su distribución es mayor en el centro y este de África, además de Sudamérica y Australia. Los suelos de las sábanas son generalmente ácidos y rojizos, aunque también puede haber suelos calcáreos grises a rojizos, especialmente en las áreas más secas. Como consecuencia de esto, algunos de los árboles de la sábana se encuentran muy dispersos, mezcla por la cual se le da el nombre de sábana.

El espectro de vegetación presente en la sábana es amplio, pasando desde gramíneas y otras herbáceas, hasta árboles y arbustos con densidades variables.

La presencia de árboles no es limitada únicamente por la

precipitación sino también por el tipo de suelo; grandes áreas de suelos con capas endurecidas (frecuentemente lateritas) no permiten la penetración de las raíces de los árboles excepto a través de rajaduras, y estas determinan la distribución de los árboles. Las palmas y las leguminosas son componentes importantes de las floras leñosas de sabanas en la mayoría de las regiones. El crecimiento de árboles también es controlado por la proximidad del nivel freático, con árboles siempre cerca de los cuerpos de agua, llegando a formar bosques de galerías las cuales, a su vez, puede compararse vegetativamente con los bosques secos o pluviales del área. La estacionalidad es muy pronunciada, con un crecimiento exuberante de las gramíneas al inicio de las lluvias junto con la aparición de muchas otras herbáceas. El último bioma a tratar en el presente texto es el desierto, regiones en las que la precipitación pluvial es inferior a 10 pulgadas. Esta escasez de lluvia puede deberse a; alta presión tropical; posición geográfica en las sombras de lluvia y alta elevación. La mayoría de los desiertos recibe algo de lluvia durante el año y tiene por lo menos una escasa vegetación, a menos que las condiciones edáficas sean muy desfavorables. En cuanto a las condiciones climáticas, las temperaturas en el día son generalmente altas con noches que pueden ser frías, asimismo, los desiertos de altas latitudes suelen ser muy fríos en invierno. La evapotranspiración siempre es alta, y la nieve es relativamente rara. Los desiertos se forman donde las masas de aire han perdido la mayor parte de su vapor de agua luego de viajar sobre tierra por largas distancias (Arabia, África del Norte, suroeste de América del Norte) o donde una masa terrestre caliente se encuentra próxima a un océano frío, evaporándose rápidamente la humedad sobre la tierra. La composición del suelo es usualmente calcárea y pueden ser altamente salino debido a la alta tasa de evaporación y ausencia de desagüe. A raíz de esto la vegetación de los desiertos consiste típicamente de arbustos abiertos y espaciados, espacios que pueden estar cubiertos por gramíneas u otras plantas herbáceas. Las plantas con mayor representación suelen ser las suculentas y las anuales, mientras que los arbustos y árboles pueden crecer bien en las orillas de los cursos de agua y en aluviones secos. En la diversidad de fauna ningún grupo principal de vertebrados está restringido a los desiertos, pero existen grupos bien representados y muchos géneros de amplia distribución tienen especies adaptadas al desierto. Los reptiles, tales como lagartos y serpientes, además de los roedores, están bien adaptados a los ambientes secos, donde estos son muy diversos en proporción a otros grupos. No hay animales acuáticos excepto en los casos en que persisten cuerpos de agua; algunos grupos de crustáceos viven en pozos efímeros. Los anfibios no son muy diversos, pero aún en desiertos muy secos se encuentran algunas especies siempre que las lluvias ocasionales sean adecuadas para la reproducción. En síntesis, el planeta tierra es una gran roca viva, que ha podido adaptar sus zonas para albergar todo tipo de flora y fauna. El conocimiento de la amenaza de algunos de estos biomas debe ser preocupación número uno para el ser humano, y el entendimiento de que, sin el equilibrio y las condiciones características que estos tienen,

la vida como es conocida en la tierra no hubiera sido posible. No es de extrañarnos el hecho de que la taiga, los bosques templados y los bosques tropicales hayan sido el hogar predilecto para el ser humano, pero sí es necesaria la reflexión de que somos un elemento más del paisaje, y que, como tal, otras especies que convivían en esos espectros junto a nosotros hayan sido desplazadas por el creciente aumento de nuestra población. Aún estamos a tiempo para proteger más otros biomas que alojan la vida del planeta, para entender su composición y la importancia de estos para nuestra propia existencia. El egoísmo y la avaricia del hombre no puede seguir conduciéndole en su desarrollo y paso por el mundo y solo hasta que este entienda que no es un ser todopoderoso e independiente de lo que le rodea, comprenderá que es más lo que nosotros necesitamos de la tierra, que lo que la tierra necesita de nosotros.

Referencias Hernández-Camacho, J., & Sánchez, H. (1992). Biomas terrestres de Colombia. Halffter G.(comp.), 153-173. Odum, E. P., Ortega, A., & Teresa, M. (2006). Fundamentos de ecología. Cengage Learning, México D.F....