D02-Aspectos semánticos de los términos PDF

Title D02-Aspectos semánticos de los términos
Course Terminología
Institution Universidad Complutense de Madrid
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TERMINOLOGÍA Manuel Sevilla Muñoz

Elena Macías Otón

Módulo II Aspectos semánticos de los términos

Tema 4: Monosemia, polisemia, homonimia, sinonimia 4.1. Monosemia 4.2. Polisemia, homonimia y paronimia 4.3. Sinonimia 4.4 Antonimia 4.5 Heteronimia 4.6. Dimensión comunicativa y significación terminológica Tema 5: Hiperonimia-hiponimia, holonimia-meronimia 5.1. Hiperonimia-hiponimia 5.2. Holonimia-meronimia 5.3. Clasificación y descripción Tema 6: Campos terminológicos 6.1. Definición de campo 6.2. Tipos de campos Tema 7: Árbol semántico

Módulo II: Aspectos semánticos de los términos

Tema 4: Monosemia, polisemia, homonimia, sinonimia 4.1. Monosemia En principio, y dadas las pretendidas características de un término (precisión, objetividad, universalidad y estabilidad), todos los términos deberían ser monosémicos, pero esto ocurre sólo en términos de reciente formación (todavía no contaminados por otros significados o por connotaciones), que no han recurrido a palabras ya existentes en la lengua, ya sea en ámbitos especializados o en el registro estándar, o en términos utilizados en círculos muy restringidos.

4.2. Polisemia, homonimia y paronimia Un término es polisémico cuando tiene más de un significado. Dos términos son homónimos cuando su etimología es diferente, aunque coinciden en la forma; ambos términos homónimos representan conceptos diferentes. Dos términos son parónimos cuando son parecidos (pero diferentes) por su forma o sonido. Los homónimos pueden ser homófonos (si se pronuncian igual independientemente de cómo se escriban) u homógrafos (si se escriben igual). Algunos ejemplos de ambos casos son los siguientes: 



Homónimos homófonos: o haya (del verbo haber) / aya (criada) o tuvo (del verbo tener) y tubo (pieza hueca de forma cilíndrica abierta por los extremos) o hasta (del árabe hispánico, influido por el latín, preposición) / asta (del latín hasta, cuerno o palo de una bandera, pica, etc.) o vaca (del latín vacca, hembra del toro) / baca (del francés bâche y este del galo bascanda, portaequipajes) Homónimos homógrafos: o haya (del verbo haber) / haya (árbol) o don (del latín donum, regalo) / don (del latín dominum, señor) o corte (del verbo cortar) / corte (población donde reside el rey, grupo de personas que acompañan al rey, tribunal de justicia) o coma (del latín comma, signo ortográfico) / coma (del latín coma y este del griego, sopor, estado patológico que se caracteriza por la pérdida de la conciencia, la sensibilidad y la capacidad motora voluntaria) o delfín (del latín delphin y este del griego, un grupo de cetáceos) / delfín (del francés dauphin, primogénito del rey de Francia, sucesor, designado o probable de una personalidad)

En un uso correcto de la lengua, los parónimos no representarían ningún problema, aunque pueden dar lugar a confusión si no se pronuncian bien o si

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no se reconocen. Por ejemplo podrían confundirse eminente/inminente, arrollo (del verbo arrollar)/arroyo, haya (del verbo haber)/halla (del verbo hallar). La polisemia es un fenómeno muy frecuente, se produce como consecuencia de la extensión o ampliación de significado de una palabra ya existente para designar nuevas realidades, es decir, a una palabra que ya cuenta con uno (monosémica) o varios significados (polisémica) se le asigna uno más. De este modo, la polisemia permite ampliar el número de conceptos nombrados sin aumentar el léxico o la terminología. Una palabra puede tener varios significados en el registro estándar, en ese registro y en el ámbito de una o varias disciplinas, incluso puede tener varios significados dentro de una misma materia. Sólo los significados especializados serán considerados por la terminología, y en este sentido se da un tratamiento diferente entre la terminología y la lexicografía a términos polisémicos y homónimos. En una obra lexicográfica (un diccionario general) se incluyen todos los significados de una palabra, mientras que en una terminología (un diccionario especializado en el léxico de una disciplina) sólo se incluye el significado o significados que tiene el término en ese ámbito de especialización, omitiendo el resto de significados. 





Palabra con significados en el registro estándar y en uno especializado: reactivo. o En el registro estándar: (adjetivo) que produce reacción. o En el ámbito de la Química: (sustantivo) sustancia empleada para descubrir y valorar la presencia de otra, con la que reacciona de forma peculiar. * Sólo si la palabra se utiliza con el segundo significado, se considera término, y se incluirá en la terminología química. Palabra con significados en varios ámbitos especializados: radio. o En Geometría: segmento lineal que une el centro del círculo con la circunferencia. o En Anatomía: hueso contiguo al cúbito, un poco más corto y situado en posición inferior a él, y con el cual forma el antebrazo. o En Zoología: Cada una de las piezas a modo de varillas más o menos duras que sostienen la parte membranosa de las aletas de los peces. o En Química: elemento químico radiactivo de número atómico 88. Palabra con varios significados en un ámbito especializado: arco. o En Geometría, rama de las Matemáticas: porción continua de una curva. o En Trigonometría, rama de las Matemáticas: función trigonométrica inversa (arco seno, arco coseno, arco tangente). * En un diccionario de Matemáticas se deben incluir las dos definiciones; en un diccionario de Geometría o de Trigonometría sólo el significado correspondiente.

4.3. Sinonimia Dos términos son sinónimos cuando su significado es el mismo o parecido, aunque algunos autores distinguen entre “sinónimos”, cuando la coincidencia es exacta y de “cuasi -sinónimos” cuando es aproximada. En e ste sentido los 3

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sinónimos se pueden intercambiar en un mismo texto, mientras que los cuasisinónimos sólo lo pueden hacer en ciertos contextos. Por ejemplo, aeronave (vehículo capaz de navegar por el aire) se utiliza como sinónimo de avión en algunos casos, pero no siempre: El helicóptero se estrelló sobre las 11.30 horas de la mañana de ayer, en un campo de labor, ubicado en el paraje denominado La Caseta del Zaragozano. El cuerpo de bomberos acudió inmediatamente a la zona del suceso al recibir el aviso de un pastor que comunicó haber visto caer una aeronave (CREA).

El hecho de que dos términos tengan un significado igual o parecido también es contrario, como en el caso de la polisemia, a la supuesta precisión de los términos y puede dar lugar a la ambigüedad en el discurso especializado. Los sinónimos surgen a través de varios mecanismos: 

Cuando se comienza una investigación o se producen importantes progresos en un ámbito del conocimiento es necesario dar nombre a nuevos referentes (objetos, ideas). Es posible que en distintos lugares se desarrolle de forma simultánea esa labor de formación de una nueva terminología, de modo que se genera un conjunto de sinónimos. Con el tiempo, se van utilizando con más frecuencia algunas formas mientras que las demás caen en desuso. Una vez que se dan a conocer los descubrimientos, es posible la coordinación en la formación de nuevos términos para evitar que surjan más sinónimos.



Es posible que haya diversas escuelas que designan los mismos conceptos con diferentes términos con el objeto de diferenciarse de las demás en cuanto a lo que se investiga o al proceso de investigación.



La preocupación por la estandarización de términos hace que se revisen las terminologías y que convivan diccionarios con términos actuales y términos en desuso para representar los mismos conceptos. Por ejemplo, después de la última revisión de la nomenclatura química surge una nueva que convive durante un tiempo con la anterior, y encontramos pares de términos, como “dióxido de carbono” y “anhídrido carbónico”, para designar al mismo referente (CO2), pero no pueden utilizarse indistintamente, pues sólo uno de ellos se considera correcto después de la revisión.



En ocasiones, una lengua se contamina con préstamos y calcos innecesarios procedentes de otras lenguas, cuyas sociedades tienen gran influencia tecnológica y o cultural (actualmente el inglés estadounidense). Así, en castellano se utiliza el término “aerogenerador”, que convive con el calco “aeroturbina”, de la expresión inglesa wind turbine, aunque este último se utiliza con mucha menos frecuencia.

4.4. Antonimia Dos términos son antónimos cuando el sentido de cada uno de los dos es opuesto al del otro. Se pueden distinguir tres tipos de antónimos derivados de

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tres tipos de oposiciones a los que distintos autores denominan de diferente manera, aunque aquí utilizaremos solo una para cada tipo: 

Antónimos graduales: los dos términos antónimos representan el máximo grado de oposición en una escala con diferentes grados de oposición. Por ejemplo, entre “blanco” y “negro” (antónimos) se sitúa “gris”, que representa la misma cualidad, pero en distinto grado (una mezcla de blanco y negro o, visto desde otro punto de vista, blanco y negro a la vez). En este tipo de antónimos, la negación de uno de ellos, no implica la afirmación del antónimo; por ejemplo, si algo no está “caliente”, no está necesariamente “frío”, puede estar “templado” o “tibio”.



Antónimos complementarios: en este caso, los conceptos y las realidades representadas por los dos antónimos son incompatibles, no pueden darse a la vez, de manera que la negación de uno de los antónimos implica necesariamente la afirmación del contrario. Por ejemplo, o se está “vivo” o se está “muerto”, no se puede estar vivo y muerto a la vez o medio vivo y medio muerto.



Antónimos recíprocos: dos antónimos son recíprocos cuando para que exista la realidad representada por uno de ellos tiene que darse al mismo tiempo la realidad opuesta. Por ejemplo, para que haya un “vendedor”, tiene que haber también un “comprador”. Algunos autores llaman a este tipo de relación semántica “inversión” y no la consideran dentro de la antonimia, aunque sí se da una relación de oposición.

En ocasiones, los antónimos no se utilizan para representar valores contrarios sino relativos. Por ejemplo, si se dice que “un elefante es pequeño”, se está expresando su tamaño es menor que el de un elefante normal, pero seguirá siendo grande. Si en un mismo texto se incluyen dos términos antónimos, se pueden utilizar    

Para valorar rasgos cualitativos que se pueden graduar. Para describir, explicar o nombrar aparatos que pueden realizar acciones opuestas (válvula de apertura y cierre). Para expresar la simultaneidad de dos realidades contrarias (contrato de compra-venta). Etc.

4.5. Heteronimia Cuando una oposición gramatical (por ejemplo, la oposición de género masculino-femenino) se expresa con dos términos de origen etimológico diferente, se dice que esos dos términos son heterónimos. Así, tenemos, por ejemplo, toro-vaca, hombre-mujer, caballo-yegua, padre-madre, oveja-carnero, etc.

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En el caso de los heterónimos caballo-yegua, la palabra “caballo” procede del latín caballus, cuyo fenemino es caballa, mientras que “yegua” procede de la palabra latina eqŭa, cuya forma masculina es equus. Es decir, partiendo de dos sinónimos latinos, la evolución de la lengua ha fijado la forma masculina de uno de los sinónimos y la forma femenina del otro, dando lugar a un par de heterónimos.

4.6. Dimensión comunicativa y significación terminológica Los términos cobran plena significación cuando se insertan en un texto con el objetivo de establecer una comunicación. El autor de dicho texto utiliza cada término con un sentido concreto, un único sentido, de manera que la dimensión comunicativa del término contribuye a resolver las posibles ambigüedades debidas a los fenómenos semánticos descritos anteriormente. Aun así, puede darse cierto grado de imprecisión, pero un término dentro de un contexto es mucho más preciso que si se considera de forma aislada.

Bibliografía ARNTZ, R.; PICHT, H. (1995): Introducción a la terminología, Humanes, Fundación Germán Sánchez Ruipérez. CABRÉ, M.T. (1993): La terminología. Teoría, metodología, aplicaciones. Barcelona: Ed. Antártida. GUTIÉRREZ RODILLA, B.M. (1998): La ciencia empieza en la palabra. Capellades: Ediciones Península, S.A. LEWANDOWSKI, T. (1982): Diccionario de lingüística, Madrid, Cátedra. REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Banco de datos (CREA). Corpus de referencia del español actual. www.rae.es [consulta: 21 de febrero de 2010]. REAL ACADEMIA ESPAÑOLA (200122): Diccionario de la Lengua Española, www.rae.es [consulta: 21 de febrero de 2010].

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Tema 5: Hiperonimia-hiponimia, holonimia-meronimia 5.1. Hiperonimia-hiponimia Hiperonimia e hiponimia son relaciones semánticas entre unidades léxicas, reflejo de una ordenación jerárquica de los referentes que representan.  



Un hiperónimo es una palabra cuyo significado contiene el de otras palabras (hipónimos) o, dicho desde la dimensión ontológica, el hiperónimo representa un referente del que existen varios tipos. Un hipónimo es una palabra cuyo significado está contenido en el de otra palabra (el hiperónimo), es decir, un hipónimo representa un referente que es un tipo concreto de otro referente jerárquicamente superior en una ordenación de referentes. Un cohipónimo es una palabra cuyo significado está al mismo nivel que otra palabra en relación con un hiperónimo; dos cohipónimos representan referentes que son dos tipos distintos del mismo referente.

Si Y y Z son hipónimos de X



Si Y es hipónimo de X y Z es hipónimo de Y



Y y Z son tipos de X Y y Z son cohipónimos entre sí X es hiperónimo de Y y Z Z es hipónimo de X Y es hiperónimo de Z X es hiperónimo de Y y Z

Por ejemplo, si consideramos el conjunto de herramientas, martillo, llave inglesa y destornillador son tres tipos de herramientas, luego los términos martillo, llave inglesa y destornillador son hipónimos del hiperónimo herramienta y al mismo tiempo son cohipónimos entre sí. Hay dos tipos de destornilladores, el destornillador de estrella y el destornillador plano, por lo tanto, los términos destornillador de estrella y destornillador plano son cohipónimos entre sí, son hipónimos del término destornillador e hipónimos del hiperónimo herramienta. Teniendo en cuenta todas estas relaciones de hiperonimia-hiponimia, y añadiendo los nombres de algunas herramientas más, se puede establecer el siguiente esquema: martillo destornillador herramienta llave

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destornillador de estrella destornillador plano llave inglesa llave fija llave de estrella llave de tubo llave allen

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En un texto, encontraremos relaciones de hiperonimia-hiponimia cuando haya clasificaciones o cuando se hablen de tipos de referentes respecto a otros referentes.

5.2. Holonimia y meronimia Holonimia y meronimia son relaciones semánticas entre unidades léxicas que deriva de la descripción de un todo constituido por varios elementos (partes de una máquina, etapas de un proceso, etc.).   

Un holónimo es una palabra que representa un referente compuesto por varias partes, cada una de las cuales cuenta con una denominación, que es el merónimo. Un merónimo es una palabra que representa a un referente que constituye una parte de otro referente, cuya denominación es el holónimo. Un comerónimo es una palabra que representa un referente que, junto con otros, cuyas denominaciones son comerónimos entre sí, forman parte de otro referente, representado por un holónimo.

Y y Z son partes de X Y y Z son comerónimos entre sí X es holónimo de Y y Z Z es parte de Y Y es parte de X Y es holónimo de Z X es holónimo de Y y Z

Si Y y Z son merónimos de X →

Si Y es merónimo de X y Z es merónimo de Y



Por ejemplo, si consideramos el holónimo brazo, definido como extremidad superior que comprende desde el hombro hasta el extremo de los dedos, se pueden observar varias regiones, cuyas denominaciones son los merónimos brazo (desde el hombro hasta el codo, aquí brazo es un término polisémico), codo, antebrazo, muñeca y mano, todos ellos comerónimos entre sí. Cada uno de estos elementos están formados por músculos y huesos, entre otros componentes, por lo que los nombres de los huesos cúbito y radio son merónimos de antebrazo, que es holónimo de estos y, a su vez, merónimo de brazo. De esta manera, nombrando todos los merónimos, en distintos niveles, del holónimo brazo, obtendremos una descripción de brazo (holónimo), así como de todos y cada uno de sus componentes. Si consideramos únicamente las regiones del brazo y los huesos situados en ellas, se puede establecer la siguiente relación de holonimia-meronimia en varios niveles:

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brazo codo antebrazo

húmero cúbito radio carpiano escafoides semilunar piramidal pisiforme trapecio trapezoide hueso grande hueso ganchoso metacarpo

muñeca

carpo

mano

palma dedo pulgar falange índice falangina corazón falangeta anular meñique

brazo

metacarpiano

En esta tabla de holónimos y merónimos encontramos también dos relaciones de hiperonimi-hiponimia:  El carpo está formado por ocho carpianos, cada uno de ellos con un nombre. El nombre de cada carpiano es hipónimo del hiperónimo carpiano, pues cada uno de ellos es un tipo concreto de carpiano.  De forma análoga, el nombre de cada dedo es un hipónimo del término dedo; los nombres de los cinco dedos son cohipónimos entre sí. En un texto, observaremos relaciones de holonimia-meronimia cuando haya descripciones, pues en esos casos se nombraran los elementos que componen aquello que se describe.

5.3. Clasificación y descripción La idea clave para distinguir entre la holonimia y la hiperonimia es que en esta última hablamos de “tipos de“ o “clases de”, es decir, llave inglesa es un tipo de llave o de herramienta, mientras que en la meronimia hablamos de “partes de”, el dedo y la palma son partes de la mano, pero no son tipos de mano. Las operaciones de meronimia y de holonimia, son tan importantes en el sistema de la lengua como las operaciones de hiponimia y de hiperonimia. Si estas dos últimas operaciones nos permiten clasificar, las dos primeras nos permiten describir; ahora bien, sin descripción no hay clasificación posible, puesto que toda clasificación se hace sobre datos descriptivos. Por tanto, la presencia de hiperonimia en un discurso se debe a una clasificación y la holonimia deriva de una descripción. Dicho de otra manera, 9

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cuando en un texto se clasifique algo se podrán encontrar hiperónimos e hipónimos y cuando el autor describa un referente es probable que utilice holónimos y merónimos.

Bibliografía GARCÍA BARDÓN, S. (1990): Lexicología española: semántica sincrónica. Louvain la Nueve, Diffusion Universitaire Ciaco. GUTIÉRREZ RODILLA, B.M. (1998): La ciencia empieza en la palabra, Capellades, Ediciones Península, S.A. MOTT, B. (2009): Introductory Semantics and Pragmatics for Spanish Learners of English, Universitat de Barcelona. REAL ACADEMIA ESPAÑOLA (200122): Diccionario de la Lengua Española, www.rae.es [consulta: 21 de febrero de 2010].

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Tema 6: Campos terminológicos 6.1. Definición de campo No parece que exista un concepto de campo aceptado p...


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