Ensayo filosofia, Suicidio PDF

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Resumen de algunos autores sobre la visión del suicidio, enfocándonos en el concepto voluntario y moral de este como Durkheim, Camus y Améry...

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Suicidio ¿Voluntario? Albert Camus afirma “No hay más que un problema filosófico verdaderamente serio: el suicidio. Juzgar si la vida vale o no vale la pena de vivirla es responder a la pregunta fundamental de la filosofía” [CITATION Camus \p 2 \l 2058 ]. En este ensayo intentaremos adentrarnos en esta cuestión filosófica, enfocándonos en si es o no ético el suicidio, si este es un deseo personal o una presión y si este significa algo mucho más que solo la muerte del individuo. ¿A quién pertenece nuestra vida? ¿Hasta que punto el suicidio es un acto voluntario? ¿Podemos siempre llamarlo voluntario? Frente a estas preguntas aparece el autor Jean Améry, que en Levantar la mano sobre uno mismo [ CITATION Jea05 \l 2058 ] define el suicidio como un acto de derecho propio, afirmando que el suicida es quien atrae la muerte a si, por lo tanto, es voluntario, también diciendo que quien se enfrenta a la muerte natural, se ve en la situación de tener miedo o ser valiente, ya que, no sabe cómo será lo que viene, como morirá, en cambio quien opta por el suicidio es quien decide, quien tiene la postura principal frente a la muerte que eligió. Desde el punto de vista de Schopenhauer, en El mundo como voluntad y representación[ CITATION Art16 \l 2058 ] toma al suicidio como el fenómeno más fuerte de la afirmación de la voluntad del ser. Se puede ver que el suicida, incluso sobrepasa los límites de la voluntad al matarse, pues, no desea vivir en sufrimiento, estar así va en contra de su voluntad, así que, pasa ese límite, llevándolo a la muerte. También afirma que el suicida se ve enfrascado en una oscuridad al no poder consumar la vida como deseaba, declarándose la guerra así mismo por querer morir. Concluyendo que el individuo llega a la muerte por vivir en desgracia, por no querer vivir en un cuerpo limitado prefiere morir para dejar de sufrir. Si lo vemos de la mano del libertarismo, corriente que afirma que el individuo es dueño de su vida, el suicidio es decisión propia y ningún otro puede tomar decisiones sobre la vida de este. Volvemos a Améry el cual en Sobre el suicidio: un discurso sobre la muerte voluntaria afirma que el suicidio es la expresión máxima de la libertad del ser humano, que el ser humano se encuentra a si mismo realmente cuando puede elegir su muerte. Améry confía tanto en su posición que se suicida en 1978. Los estoicos afirman que la muerte deber ser en mano propia, por la dignidad del hombre, no se debe vivir mal, no envejecer decrépitamente. Terminamos con los argumentos a favor con Confunsio que decía preferiría la muerte antes que la deshora y la falta de moral, por tanto, estos autores ven la muerte voluntaria como propia y algo más que un ultimo recurso, llegando a postularlo como un acto necesario para la liberación del ser, la expresión máxima de la voluntad. Enfocándonos en estos puntos, la gran cantidad de suicidios en la época de las guerras mundiales se ven justificadas. La muerte de miles de alemanes frente la perdida de la guerra o posteriormente el suicidio de los judíos tras el holocausto prefiriendo terminar con su

sufrimiento y el terror vivido, viéndolos como una manera de mantener el honor o bien, morir para poder estar pacíficamente y escapar de todo sufrimiento. En 1929, durante la gran depresión, la tasa de suicidio tuvo un gran incremento, pues, como Durkheim llamaría el “Suicidio anómico”, el cambio tan brusco en las condiciones económicas de las personas, sobre todo después de “los locos años 20”, significó una depresión en la población, llevando a este incremento de número de suicidios. Siguiendo con Durkheim, en su obra “El suicidio” [CITATION Emi \l 2058 ] describe algunos d ellos factores que afectan a las personas suicidad, descartando el medio físico y la condición mental de estas, afirmando que la soltería y el ser hombre son algunos factores que hacen a la personas más propensa a cometer suicidio, ya que, la soledad y el poco compromiso con el entorno, crea una base poco solida en donde el sujeto pueda apoyarse. El suicidio usualmente es entendido como un acto voluntario del individuo, algo que la persona desea y analiza hacer. Al ver a estos autores, que, a pesar de defender esta postura, nos podemos dar cuenta de que no es voluntario o una decisión propia al 100%, sino, las personas se ven afectadas por su situación, la cual, posiblemente no haya estado en las manos del sujeto. Se ven afectadas por su entorno o incluso por la presión social que imponen sobre el individuo, como vimos en el ejemplo del honor. Ni siquiera la locura, la cual es un estado mental propio, afecta tan profundamente a la persona como el lugar en donde vive, la cultura, la sociedad. La soledad, el rechazo, el mantener una imagen fren a otros son los factores más disidentes frente a decisiones de estos indoles de una persona. El verse acompañado o estar sujeto a algo, técnicamente amarrado a alguna comunidad como la familia o la religión son cosas beneficiosas para las personas, manteniéndolas más ocupadas para no pensar en matarse, Entonces, alguien que trabaja todo el día, que al llegar a su hogar de debe preocuparse por su familia y que no tiene un poco de tiempo libre, dependiendo de la visión de estos autores debería ser los menos frágiles ante la muerte pero a personas como estas, abrumadas por el trabajo y acomplejados por la familia o sintiéndose apuntado por la religión son las personas que vemos en las noticias de los reciente suicidios. El estar ocupado te evita pensar en la muerte, pero te lleva más profundamente al pensamiento de querer morir. Quizás la ansiedad y el poco tiempo libre es una distracción que cala cada vez más en el querer morir, que cuando te das cuenta o te paras a pensar en ello, puedes pensar en que realmente llevas una vida vacía, sin sentido y que solo podrás lograr la felicidad quitándote todo de encima. Reflexionando podemos concluir que el suicidio no es del todo voluntario, es todo un proceso mental que afecta al sujeto porque se ve afectado por situaciones externas a el que repercuten tanto que lo llevan a tomar aquella decisión, una decisión que posiblemente no está tomando, que los demás toman por el de manera indirecta.

Bibliografía: Améry, J. (2005). Levantar la mano sobre uno mismo . Valencia: PRE-TEXTOS. Camus, A. (1985). El mito de Sísifo. Madrid: Alianza Editorial. Durkheim, É. (2016). El suicidio. Zaragoza: Titivillus. Schopenhauer, A. (2016). El mundo como voluntad y representacion. Madrid: Trotta....