Kusch - Hombre Bebiendo Luz PDF

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Resúmen del video "Hombre bebiendo luz" + info adicional sobre Kusch...

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Hombre bebiendo luz Rodolfo Kusch, en procura de un pensamiento continental autónomo Como su título lo indica, este documental nos cuenta sobre Rodolfo Kusch (1922-1979), un reconocido antropólogo y filósofo argentino del siglo XX, quien muere a sus 57 años luego de exiliarse en la quebrada de Humahuaca debido a la censura que sufre por la dictadura militar de 1976. Kusch propone, y se destaca por esto, un pensar desde lo autóctono, desde las raíces de Latinoamérica, un pensar propio, que no sea un eco de un pensamiento eurocentrista violentamente impuesto, sino más bien una producto culturalmente nuestro. Él habla de participar y de entregarse a lo popular, y descarta aquella mirada fría y distante desde una otredad que se presupone superior. En el documental Florencia Kusch, hija del filósofo, habla sobre lo que él llamaba El hedor de América. Lo Americano, lo autóctono, huele, tiene mal olor. Lo europeo, lo civilizado, por el contrario, es pulcro, es limpio. Florencia explica que esto no implica una literalidad, sino que el hedor hace referencia al otro marginado, al explotado, aquel que no vive en la pulcritud, disfrazándose de limpio, de europeo. Aquel otro marginado exige una salida política, porque es parte de la realidad política. El hedor tiene un modo de ser y tiene que imponerlo. Se tratan en el fondo, de argumentos infundamentados (Son hediondos, desorganizados, vagos, etc.) que imposibilitan el acercamiento al otro, que funcionan de barrera o mural ante el posible encuentro. Para comprender al otro hay que sobrepasar aquellas limitaciones, y proponerse un encuentro honesto. Jorge Rulli, un histórico militante del peronismo, relata como en el ´55 estaba claro que el peronismo era el hedor del país, era con quienes no había que juntarse, con quienes no había que debatir. Otro aspecto importante aportado por Kusch tiene que ver con la diferenciación entre ser y estar que proponía. Mariano J. Garreta, antropólogo y profesor, explica cómo Kush reivindicaba el estar. El estar es dejarse ser uno y vivir. El ser tiene que ver con la proyección, con construir una modificación constante, un camino de supuesto progreso. Se entiende entonces un estar que se contrapone a un ser europeo ligado a esa ansiedad occidental de “ser alguien”, de estar en continuo movimiento, en sucesiva ambición de una ilusoria evolución. Kusch reconoce que en nuestro continente latinoamericano se hacen presentes contradicciones culturales y politicas que tienen lugar entre aquellas concepciones del ser y el estar. Propone entonces el estar siendo, como una expresión que sea una muestra de nuestra autenticidad. Jorge Ruilli afirma que el estar siendo, de forma práctica, tiene que ver con el decrecimiento. Con cuestionar la idea que los gobernantes y los economistas tienen del crecimiento. El estar tiene que ver con la ecología, con la naturaleza, con acercarnos a lo natural, cuestionar el consumo¸ y preservar la tierra que es finita. Osvaldo Maidana, por su parte, habla del mero estar como ese estar

implica que nuestras fuerzas internas (mentales, emocionales, viscerales) estén en funcionamiento sin escindirse del medio fisiográfico. Propone que hay q mantener esa identidad con el medio ambiente, ya que cuando se produce esa escisión, es cuando se lo destruye. Se lo porque no hemos asumido nuestro estar como nos corresponde estar. Florencia, su hija, destaca que estar implica otra visión del tiempo y del espacio, una visión más cíclica y mítica. Recuperar el estar es entonces recuperar el mito como explicación, como historia, y no como creencia o religión, así supuesto por el conocimiento occidental. Por último, me parece importante destacar el aporte de Kusch sobre lo que podemos definir como la barbarie de la civilización, haciendo referencia a la incapacidad europea de percibir y comprender al otro. La civilización, lo occidental, solo sabe mirarse a sí misma....