ONCE Minutos - resumen de libro PDF

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ONCE MINUTOS - PAULO COELHO ONCE MINUTOS “Cuando conocemos a alguien y nos enamoramos, tenemos la impresión de que todo el universo esta de acuerdo; hoy sucedió en la puesta de sol. ¡Sin embargo, aunque algo salga mal, no sobra nada! Ni las garzas, ni la música a lo lejos, ni el sabor de sus labios. ¿cómo puede desaparecer tan de prisa la belleza que allí había hace unos pocos minutos? La vida es muy rápida; hace que la gente pase del cielo al infierno en cuestión de segundos.” [CITATION Pau031 \p 24 \t \l 3082 ]

DEL

DIARIO

DE

MARÍA,

CUATRO

SEMANAS

DESPUÉS

DE

DESEMBARCAR EN GENEVE/GINEBRA: “Hace una eternidad que estoy aquí, no hablo la lengua, me paso el día escuchando música en la radio, mirando el cuarto, pensando en Brasil, deseando que llegue la hora de trabajar, y cuando estoy trabajando, deseando que llegue la hora de volver a la pensión. O sea, vivo el futuro en vez del presente. Un día, en un futuro lejano, tendré mi pasaje, podre volver a Brasil, casarme con el dueño de la tienda de tejidos y escuchar los comentarios maliciosos de mis amigas que nunca se han arriesgado y por eso lo único que ven es la derrota de las demás. No, no puedo volver así; prefiero tirarme del avión cuando este cruzando el océano. Como las ventanas del avión no se abren (por cierto, nunca lo habría imaginado; ¡que pena no poder sentir el aire puro!), me muero aquí mismo. Pero antes de morir, quiero luchar por la vida. Si consigo andar sola, llegare hasta donde quiera.” [CITATION Pau032 \p 55 \t \l 3082 ]

RALF HART “Ralf Hart miraba a una mujer de cabellos negros, y ropa igual que el cabello, sentada en el suelo de su sala de estar, llena de deseos absurdos, como tener una chimenea encendida en pleno verano. Si, quería imaginar lo que aquella ropa escondía, podía ver el tamaño de sus senos, sabia que el sostén que ella usaba era innecesario, aunque tal vez fuese una obligación del oficio. Sus senos no eran grandes, no eran pequeños, eran jóvenes. Su mirada no mostraba nada; ¿Qué estaba ella haciendo allí? ¿Por qué el alimentaba esa relación peligrosa, absurda, si no tenía ningún problema en conseguir a

una mujer? Era rico, joven, famoso de bueno apariencia. Le encantaba su trabajo, había amado a mujeres con las que se había casado, había sido amado. En fin, era una persona que, dadas las circunstancias, debería decir. ¨Soy feliz¨.” [CITATION Pau033 \p 166 \t \l 3082 ]

FICHA RESUMEN Relata la historia de María, una joven muchacha de Brasil, ella vivía con sus padres y no tenía hermanos. Un día cuando iba de camino a su escuela, conoció a un chico muy atractivo, del cual ella empezó a enloquecer perdidamente de amor. Ella estaba dispuesta a hablarle, pero no se atrevió y al chico nunca más lo volvió a ver ya que no fue más al colegio. Estaba muy dolida y decepcionada, tanto que quería ir a buscarlo, pero ya era tarde, él se había ido a Río de Janeiro. A los 13, conoció a otro chico del cual, también quedo locamente enamorada, y esta vez sí le hablo, luego el chico la invito a salir, y así dio su primer beso, ella muy emocionada por este logro. Empezó a crecer con el pasar de los años, y tuvo sus primeras relaciones sexuales, la cual no le llamaba mucho la atención. María decidió buscar nuevas experiencias y aventuras y así viaja a Río de Janeiro, lugar en que conoce a un suizo, quien le ofreció mucho dinero y fama, y ella dijo que sí. La muchacha llega a Suiza y se dio cuenta de que tiene que trabajar como bailarina en un cabaret, y ganaba muy poco dinero. La despidieron del trabajo, y consiguió empleo en La Rue Berne, un barrio donde se ejerce la prostitución. Empezó a trabajar como prostituta en Copacabana la discoteca más conocida en este barrio, y se volvió muy cotizada entre los clientes por su buen desarrollo en este empleo. Milán que era el dueño de esta discoteca, empezó a proteger a María de los hombres aprovechadores y desesperados. Comenzó a reunir dinero, tenía pensado trabajar un año más para luego volver a Brasil y disfrutar con sus padres, mientras tanto conoció a una bibliotecaria, llamada Heidi que se convirtió en su mejor amiga durante su estadía en ese país. Pasa el tiempo y María conoce a Ralf Hart, un pintor, con el que hubo química al instante. María quien ya no creía en el amor, se enamoró de Ralf y empezaron una relación amorosa, de la cual iba más allá de lo que soñaba María. Él le enseñó muchas cosas, conoció la verdad que existe en los hombres. Conoció los Once Minutos, que era

lo que duraban sus relaciones sexuales en un acto de desesperación ya que era lo que más deseaban los hombres. También conoció el dolor y el placer, que gracias a Ralf aprendió sobre el dolor del castigo físico, el que lleva a conseguirlo todo, a ponerse sus propias metas y la paz interior. Con él consiguió hacer sus orgasmos, que la torturaban ya que jamás podía hacer uno. María aprendió muchas cosas sobre la vida, no solo el conocimiento íntimo del cuerpo de su pareja, sino también sobre su alma y su mente. Llegó el día decisivo, en que María dejó Suiza y se marchó a Brasil, sola sin Ralf. Mientras esperaba un transbordo en París, de pronto escucha una voz que le dice "Siempre nos quedará París", comenzó a temblar cuando oyó la voz, aquella frase era de una película que le encantaba, y le dice al hombre ¿Te gustaría ver la Torre Eiffel?, y el hombre responde que sí. María se volteó y se dio cuenta de que aquel hombre era Ralf, él muy romántico estaba con un ramo de rosas y sus ojos brillantes de emoción. Se besaron sin curiosidad alguna de que podría pasar más adelante. BIBLIOGRAFÍA Coelho, P. (2003). Once minutos. Barcelona: Planeta. Coelho, P. (2003). Once minutos. En P. Coelho, Once minutos (pág. 24). Barcelona: Planeta. Coelho, P. (2003). Once minutos. En P. Coelho, Once minutos (pág. 55). Barcelona: Planeta. Coelho, P. (2003). Once minutos. En P. Coelho, Once minutos (pág. 166). Barcelona: Planeta....