Para qué sirve realmente la ética PDF

Title Para qué sirve realmente la ética
Author Taty Abigail
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'· r lPARAQUE SIRVE realmente. •••? , ADELA CORTINA ' 'Ninguna sociedad puede funcionar si sus miembros no man­ tienen una actitud ética. Ningún país puede salir de .la crisis si las conduc­ tas inmorales de sus ciu­ dadanos y políticos siguen proliferando con toda im­ punidad. Este 1 ib...


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lPARAQUE SIRVE realmente. •••? , ADELA CORTINA ' 'Ninguna sociedad puede funcionar si sus miembros no man­ tienen una actitud ética. Ningún país puede salir de .la crisis si las conduc­ tas inmorales de sus ciu­ dadanos y políticos siguen proliferando con toda im­ punidad. Este 1 ibro nos '1erda que ahora, más nunca, necesitamos la l."

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Por si faltara poco, y para escarnio de quienes están empeñados

siempre que de alguna manera podamos recibir. Este descubrimien­

en asegurar que la racionalidad humana consiste en maximizar el

to ha venido a explicar al menos en parte lo que se ha llamado el

beneficio, sin tener en cuenta valores ni sentimientos, resulta ser que

misterio del altruismo, que tiene distintas formas.

los que muestran ese tipo de racionalidad no son los seres humanos, sino los chimpancés. Ellos sí que son optimizadores racionales.

El más difícil de explicar es el altruismo biológico, que se muestra en la conducta de algunos animales y en la de los seres humanos. Un

Así lo han mostrado experimentos en los que los chimpancés ju­

individuo practica el altruismo biológico cuando invierte parte de

gaban al juego del ultimátum, adaptado para ellos. Se ponían frente

sus recursos para favorecer la adaptación de otro. La selección natu­

al primer jugador dos bandejas en las que el alimento estaba dividido

ral no explica esta conducta altruista, que parece beneficiar al que

previamente, una parte para él y otra para el segundo jugador. Por

recibe los recursos y perjudicar al que los da, porque el sujeto al­

ejemplo, «ocho uvas para mí y dos para ti» contra «cinco para cada

truista a fin de cuentas disminuye su inversión en adaptación. Si

uno». El primer jugador tenía que empujar la bandeja tan lejos de sí

tomamos en serio la selección natural, el proceso evolutivo debería

como pudiera en la dirección del segundo, y éste tenía entonces la

barrer a los altruistas, a los que reducen su valor reproductivo invir­

opción de cerrar el trato arrastrando hacia sí la bandeja o de no ha­

tiendo en los demás, pero el altruismo biológico existe, y es un enig­

cerlo. Los seres humanos rechazan la primera propuesta cuando la

ma desde el punto de vista de la adaptación, es uno de los grandes

segunda es «cinco para cada uno». Pero los chimpancés no. Los...


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