Actividad 1 Maria Garí Font.27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas estandarizadas modelo I y modelo II. 27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas estandarizadas modelo I y PDF

Title Actividad 1 Maria Garí Font.27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas estandarizadas modelo I y modelo II. 27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas estandarizadas modelo I y
Author Maria Garí Font
Course Fundamentos de la Economía
Institution UNED
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27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas estandarizadas modelo I y modelo II. 27476-Texto del artículo-59701-1-10-2019 0115. Pruebas estandarizadas modelo I y modelo II....


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INNOVACIÓN, INVESTIGACIÓN Y GESTIÓN DEL CAMBIO EN ORIENTACIÓN EDUCATIVA MÁSTER UNIVERSITARIO EN FORMACIÓN DEL PROFESORADO DE EDUCACIÓN SECUNDARIA OBLIGATORIA Y BACHILLERATO, FORMACIÓN PROFESIONAL Y ENSEÑANZAS DE IDIOMAS

ACTIVIDAD 1

Maria Garí Font UNED 14/12/2021

Lectura 1 Martínez Garrido, C., Krichesky, G., & García, A. (2010). El orientador como agente interno de cambio. Revista Iberoamericana de Educación, 54, 107-122.

● Título El orientador escolar como agente interno de cambio.

● Tema tratado Se describe el rol que tiene el orientador en los centros educativos, a partir del análisis de las tareas, ya sea cuando lo asume en los procesos de cambio como la formación y trayectoria. Se especifica el trabajo de orientador con los diferentes agentes educativos: equipo directivo, profesores y estudiantes, destacando las capacidades del orientador como líder educativo comprometido con la mejora en los progresos de la escuela.

● Síntesis del marco teórico utilizado por los autores A partir de los autores citados en los artículos, procedo especificar aquellos que tienen enfoques e ideas más relevantes: En primer lugar, como dice Harris 2001, pp. 261-270; Hargreaves y Fink, 2006, pp. 43-58, para aumentar la calidad de la educación hay que desarrollar las capacidades internas de las escuelas. Lo que se interpreta con esta afirmación, es que tenemos que poner el enfoque en invertir en la orientación académica y profesional, ofrecer a los alumnos ofertas formativas de calidad y atractivas, así como aumentar la inversión en educación. Con esta afirmación, tenemos que tener en cuenta las fortalezas que tiene la escuela para poder hacer este salto al progreso y calidad de la educación. Según los estudios de Ainscow, Black-Hawkins y Booth (2002), para poder conseguir escuelas de calidad y escuelas que sean inclusivas, los agentes educativos tienen que tener los recursos y herramientas necesarias para crear estas aulas más adaptativas. También, Bolam y otros (2005) fomentan iniciativas para la comunidad educativa como son el liderazgo distribuido o docente. Este tipo de liderazgo lo fomenta Fullan, 2002; Harris y otros, 2007, donde la figura del orientador debe de jugar un papel de líder junto con el director y que su figura sea reconocida en el sistema educativo, que se valoren sus ideas y aportaciones además de que tengan su espacio para que el orientador u orientadora pueda promover la mejora (Clemens, Milsom y Cashwll, 2009). Otras de las aportaciones interesantes que me ha llamado la atención es la que aporta Giné, 1995, la cual explica que el orientador es un facilitador que acompaña a las personas en el proceso. Cabe decir, que es muy importante que el orientador

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se vea como un asesor capaz de acompañar a los diferentes agentes educativos. Tal y como expresa Martín Toscazo (2009), uno de los valores que tiene el asesor educativo es que sabe asociar el conocimiento teórico con el práctico, y eso le da la capacidad de crear actividades de innovación. La relación que tiene con organismos y entidades le hacen valiosos y eficaz para conseguir los recursos y herramientas para construir nuevos proyectos.

● Metodología Teniendo en cuenta que la finalidad de este artículo no es generalizar unos datos, sino acercarse a la realidad educativa para comprenderla mejor y dotar de más recursos para alcanzar el progreso y la innovación, se puede afirmar que se utiliza una metodología de investigación, ya que se encuentran casos que propician una evidencia científica empírica cualitativa o cuantitativa de los resultados de una investigación. El objeto investigado es la figura del orientador, por tanto, se trata de un Podemos afirmar que se trata de un caso único en el cual se encuentra sujeta a factores y obstáculos. En este caso los factores serían el tiempo, la sociedad, el y los obstáculos serían el financiamiento, y los recursos materiales. Intuimos que puede ser una metodología de investigación, porque no se encuentran fases y resultados de experiencias prácticas, sino que solo hay estudios que intervienen en el proceso del orientador.

● Principales resultados y conclusiones En los últimos años, el concepto de orientador educativo ha experimentado ciertos cambios, ya que, el orientador es reconocido como agente de cambio por medio del asesoramiento y soporte a los centros educativos para contribuir a la mejora, progreso e innovación, así como justicia social. Para que haya un cambio interno en la figura del orientador, tiene que haber renovaciones a nivel cualitativo y cuantitativo dentro de la escuela. Tiene que haber cambios duraderos a partir de las fortalezas del centro. Sin embargo, este proceso aún está en camino y queda mucho para que haya una transformación de la figura del orientador, sobre todo en la enseñanza secundaria. La figura del orientador tiene que verse como un líder educativo que mejora hacia el progreso y trabaja conjuntamente con los otros agentes educativos, sin embargo, la falta de especificación en sus funciones hace que sea una figura ambigua y que no se le reconozca su papel a nivel educativo y social. El orientador del siglo XXI, tiene que ser un agente de cambio, no solo en el ámbito educativo, sino también en otros contextos donde se necesite de su figura para desarrollar una acción. El cambio no es una posibilidad, sino una necesidad y tiene que ser una realidad.

● Valoración personal del artículo La figura del orientador no fue reconocida hasta la reforma de la LOGSE en el año 1990, la cual iba dirigida en la transformación estructural y social para promover una educación más integral, participativa y democrática que fuera capaz de satisfacer las necesidades y la diversidad de la población. No obstante, el desconocimiento para el papel que juega el orientador ha hecho que sus funciones sean ambiguas y 2

no estén bien definidas. A esto se le suma las cuestiones administrativas y políticas que no se han centrado en la formación inicial de estos profesionales. De este modo, es a día de hoy que cargamos con las consecuencias: profesores que reclaman soluciones inmediatas, equipos directivos ansiosos para que los orientadores les ofrezcan consejo y alumnos desorientados y necesitados de atención. Aun así, se ha ido avanzando y ya no se basa en el modelo clínico, sino que se han planteado las cuestiones para alcanzar una comunicación e intervención conjunta. El orientador La percepción de los orientadores y orientadoras como líderes de los procesos de innovación puede llevarse de manera significativa y eficaz a través de la investigación. Es por esta razón que, durante los últimos años se ha aumentado las investigaciones y estudios sobre cómo los orientadores pueden hacer una mejora educativa. Los orientados han pasado de verse como un sujeto inútil en la comunidad educativa, a tener un rol de acompañamiento para familias, tutores, profesores, en los ámbitos de actuación. Finalmente, cabe destacar que lo importante es que las personas se comprometan en construir un futuro basado en la calidad de la enseñanza y el sistema educativo, teniendo en cuenta la diversidad y centrándose en las acciones que fomenten el avance de la sociedad.

Referencias bibliográficas: Bolam, R. y otros (2005). Creating and Sustaining Effective Professional Learning Communities. Bristol: University of Bristol. Booth, T., Ainscow, M., Black-Hawkins, K., Vaughan, M., & Shaw, L. (2002). Index for inclusion. Developing learning and participation in schools, 2. Clemens, E; Milsom, A. y Cashwell,(2009). «Using Leader-Member Exchange Theory to Examine Principal School Counselor Relationships, School Counselor‘s Roles, Job Satisfaction, and Turnover Intentions», en Professional School Counseling, vol. 13, n.º 2. Fullan, M. (2007). Las fuerzas del cambio con creces. Madrid: Akal. García-Barrera, A., Martínez-Garrido, C., & Krichesky, G. J. (2010). El orientador escolar como agente interno de cambio. Revista iberoamericana de educación, 54(1), 107-122. Giné, C. (1995). «El asesoramiento desde la perspectiva de la educación inclusiva», en J. FERNÁNDEZ SIERRA (coord.), El trabajo docente y psicopedagógico en educación secundaria. Archidona: Aljibe. Harris, A. (2001). «Building the Capacity for School Improvement», en School Leadership & Management, vol. 21, n.º 3. Toscazo, J. M., & Morán, E. G. (2009). Muchos papeles para un solo actor. Cuadernos de pedagogía, (389), 67-69.

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Lectura 2 Morentín-Encina, V. y Ballesteros, B. (2021). Objetivo CINE3: Análisis del éxito y abandono educativo. Implicaciones para la Orientación. REOP, 32(2),7-26.

● Título Análisis del éxito y abandono educativo- Implicaciones para la orientación.

● Tema tratado El porcentaje de ATEF, en España, ha disminuido desde 2009. De esta manera, se realiza un estudio de la evolución de este abandono, teniendo en cuenta las variables clave: matrícula y resultados académicos. Los resultados muestran como la mayoría de estudiantes siguen estudiando y el 30% del alumnado que empieza los estudios de ESO, no tienen éxito. A partir de las medidas de orientación académica y profesional reguladas en la Ley Orgánica de Educación (LOE, 2006) y la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE, 2013), así como los programas para prevenir y reducir el abandono temprano, ya que tienen un peso importante en el asunto tratado.

● Síntesis del marco teórico utilizado por los autores A partir de los autores citados en el artículo, procedo a especificar aquellos que tienen enfoques e ideas más relevantes desde mi punto de vista. Todos estos están relacionados con los cambios que se produjeron de la LOE a la LOMCE y las implicaciones que comportaron: En primer lugar, la LOE implementó el Programa de Diversificación Curricular (PDC), dirigidos a aquellos alumnos de 3º y 4º de la ESO que tenían dificultad (Martín Ortega, 2000). Se investigó que este programa permite a los alumnos tener un aprendizaje más personalizado, atendiendo a sus necesidades; les resultaba más fácil, tenían mejores notas y su autoestima aumenta (Navarro Hinojosa, 2006). Des de mi punto de vista, la autoestima y la motivación es un punto fundamental a mencionar, ya que es uno de los factores más significativos que causan el fracaso escolar. Según Tapia (1994, p.35), la motivación tendría que mantenerse durante todo el proceso de aprendizaje, desde el inicio hasta el final. Si los fracasos se acumulan, las expectativas del alumno disminuyen y con ello la motivación de este. Por tanto, el fomento de una positiva autoestima y motivación debe ser un reto para los docentes y profesionales (Valles, 1996, p. 49). No obstante, estos programas fueron sustituidos por otros que incorporaron a partir de la LOMCE, los cuales dificultan la evaluación de sus resultados. Uno de ellos fue el Programa de Mejora del Aprendizaje y Rendimiento (PMAR) en el primer ciclo. En segundo lugar, en España se llevaron a cabo los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI) a través de la LOE, los cuales iban destinados a aquellos que no habían conseguido el certificado de ESO o/y ninguna titulación de formación profesional (Romero-Rodriguez et al., 2015). Aun así, estos programas fueron sustituidos por la LOMCE, y la Formación Profesional Básica (FPB). Es decir, los 4

alumnos que terminen FP básica podrán presentarse a las pruebas para obtener el graduado en la ESO o pasar directamente a la Formación Profesional de Grado Medio. Metodología El método que hace servir el artículo es realizando un análisis comparativo y longitudinal a partir de la información que facilita el Ministerio de Educación y Formación Profesional. Se han centrado en variables e indicadores como son la matrícula y resultados académicos conseguidos por los alumnos y alumnas. La información está disponible a partir de investigaciones académicas que tienen importantes carencias. Teniendo en cuenta los trabajos hechos anteriormente por Bisquerra (1989), se puede afirmar que es un estudio fundamentando en la investigación educativa, ya que se presenta en forma de investigación-acción, porque es una investigación aplicada, orientada a decisiones y de carácter idiográfico que ayuda a resolver problemas específicos y se especifican metas y objetivos que se quieren alcanzar. Del mismo modo, se ha tomado como referencia del trabajo el análisis de documentos públicos u oficiales: Estadísticas de la educación del alumnado matriculado en enseñanzas no universitarias (año 2005 al 2019). Estadísticas de la educación de los resultados académicos del alumnado en enseñanzas no universitarias (año 2005 a 2017). Estadísticas de la educación del Nivel de Formación, Formación Permanente y Abandono. Transición de la formación al trabajo. Abandono temprano de la educación formación (año 2010 a 2017).

● Principales resultados y conclusiones El abandono escolar es un tema muy presente en las políticas educativas tanto a nivel europeo como nacional. Para dar respuestas a este abandono, se creó la Ley Orgánica de Educación (LOE, 2006) y a posterior la Ley orgánica para la Mejora de la calidad Educativa (LOMCE, 2013). Ambas, presentan acciones orientadas a afrontar la problemática. Sí que podemos comprobar que el porcentaje de abandono ha ido disminuyendo desde el año 2009, pero tenemos que analizar la perspectiva de esta mejora. Algunas de las reflexiones que se pueden extraer de las gráficas son las siguientes: Un alto porcentaje de los estudiantes han superado la ESO con éxito. Sin embargo el 30% que empieza, no termina con éxito, lo que estos tienen que repetir de curso. Los que abandonan, lo hacen antes de llegar a 4º y bien cuando estén en este curso.

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A partir de este punto, es importante establecer acciones que permitan ayudar a los colectivos de estudiantes que no consiguen ser visibles y están en una situación de mayor vulnerabilidad. No se puede permitir que continuemos así los próximos años, ya que el hecho de que el abandono disminuya, no significa que el sistema educativo vaya a mejor. Se debería exigir la progresión de los estudiantes a lo largo de su escolarización y de recoger datos significativos para poder comprender qué está pasando y ofrecer soluciones al respeto. El perfil del alumno que accede a estos programas se consideran personas que están en situación de exclusión social y tienen problemas familiares o de relación. Son alumnos desmotivados, con baja autoestima y con carencias en las habilidades sociales. por tanto, la motivación que se le pueda proporcionar tiene un peso significativo en ellos. Algunas limitaciones son a partir del Ministerio de Educación y Formación Profesional, el cual no ofrece datos que permitan estudiar las causas del abandono escolar desde una visión pedagógica.

● Valoración personal del artículo Las políticas educativas tienen que tener una visión holística y sistemática para mejorar el sistema educativo. Por tanto, se necesita la participación de las administraciones para que supervisen los procesos educativos y de orientación. En términos de implicaciones, se podría observar que una mayor inversión económica produciría reducir los niveles de abandono juvenil. Quería reflexionar sobre el hecho que no es un hecho individual, sino social. En mi opinión, la responsabilidad del fracaso puede relacionarse con la sociedad, el sistema educativo y el individuo. Es verdad que hay personas responsables de su fracaso escolar, pero si bien hay que reconocer que en la mayoría de las situaciones, la responsabilidad recae sobre el contexto social y el propio sistema educativo. Como posible solución, quería plantear el hecho de que se muestre más interés y esfuerzo en detectar los problemas de aprendizaje o de conducta para actuar lo más antes posible para poder detectar el abandono escolar. Por tanto, es importante centrarse en la detección temprana, la prevención y el refuerzo para evitar el fracaso. Finalmente, uno de los agentes que juega un papel relevante y que no hemos mencionado anteriormente, son las familias, ya que se convierten en un pilar sólido que puede promover la motivación y la orientación en el proceso del alumno o alumna. Es muy importante la participación de padres y madres con los agentes de los centros educativos ante el fracaso escolar.

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Referencias bibliográficas: Bisquerra, R. (1989). Métodos de investigación educativa: Guía práctica. Barcelona: CEAC. Bisquerra, R. (2004). Metodología de la Investigación Educativa. Ed. La Muralla. Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación. (LOE). Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa. Martín Ortega, E. (2000). Programas de diversificación curricular: uso, pero no abuso. Cuadernos de Pedagogía, 293, 18-22. http://hdl.handle.net/11162/38097 (LOMCE). Navarro Hinojosa, R. (2006). Los Programas de Diversificación Curricular: ¿qué opinan los alumnos que los han cursado? Revista Española de Pedagogía, 233(1), 123-142. https://doi.org/10.5944/reop.vol.15.num.2.2004.11637 Romero Rodriguez, S. (2004). Aprender a construir proyectos profesionales y vitales. Revista Española de Orientación y Psicopedagogía, 15 (2), 337-354. https://doi.org Tapia, A. (2002). Una propuesta contra el fracaso escolar. B/ Ilustre Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y Ciencias, 133, 10-12. Valles, A. y Vallés, C. (1996). Las habilidades sociales en la escuela. Una propuesta curricular. Madrid: EOS.

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