Barbero- Cap 7 economías industriales PDF

Title Barbero- Cap 7 economías industriales
Course Relaciones Internacionales
Institution Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires
Pages 10
File Size 205.8 KB
File Type PDF
Total Downloads 105
Total Views 158

Summary

Download Barbero- Cap 7 economías industriales PDF


Description

Barbero Historia Económica y social general- Cap 7 Las economías industriales en la segunda mitad del Siglo XIX En primer lugar, el proceso de innovación tecnológica, que se identifica en una primer etapa con la revolución de los transportes y que se refuerza en las últimas décadas del siglo gracias a la Segunda Revolución Industrial. Se vio acompañado por la emergencia de la empresa moderna y de nuevas formas de organización del trabajo (fordismo y taylorismo), destinadas a perdurar durante la mayor parte del siglo XX. En segundo lugar, en la última mitad del SXX, la economía se va reestructurando en función de los procesos de transformación sufridos por los países industriales, de las innovaciones tecnológicas, de las migraciones masivas hacia América y otros destinos extraeuropeos, de la expansión económica y colonial de los países de Europa y, en general, de la nueva dinámica de la economía industrial. La nueva civilización industrial fue modificando paisajes y grupos sociales, las distancias se acortaron, cambiaron las formas de trabajo, se incrementaron la cantidad y variedad de bienes disponibles, la gente se fue concentrando en las ciudades y se transformaron las modalidades de hacer política y los protagonistas de ella, así como el tipo de conflictos sociales. La revolución de los transportes Los ferrocarriles En la segunda mitad del SXIX es necesario destacar el papel estelar desempeñado por el transporte, tanto en la integración de los mercados como en el incremento de la demanda de bienes industriales generada por su construcción. La expresión de la revolución de los transportes se utiliza para hacer referencia al conjunto de innovaciones que tuvieron lugar a partir de la década de 1830, desde el momento en el que comenzó a usarse la energía del vapor para accionar medios de transporte por tierra y agua. El vapor reemplazó la energía animal en el transporte por tierra, y a la del viento, las corrientes y los remos en el agua. El invento más revolucionario lo constituyó el ferrocarril, permitió abaratar y agilizar el transporte por tierra. El ferrocarril pudo construirse en cualquier tipo de terreno y salvar toda clase de obstáculos. Debemos recordar, por otra parte, que en las áreas en las que existían buenas comunicaciones internas por agua, los ferrocarriles no compitiron con las redes de ríos y canales, sino que las completaron. Hacia 1850, sólo los países más industrializados contaban con una extensión considerable de vías férreas. En la segunda mitad del siglo su construcción se aceleró. En la medida en que se fueron completando redes nacionales también se fue integrando un mercado continental. Hacia 1880, prácticamente todas las vías férreas estaban unidas entre sí, y la estructura ferroviaria de Europa continental apenas sería modificada luego. Las grandes construcciones ferroviarias fueron el principal impulso de la expansión de la industria hasta la década de 1870 y sustentaron el crecimiento económico del período. La construcción masiva de líneas férreas demandó crecientes inversiones de capital. El ferrocarril contribuyó al desarrollo de nuevas formas de financiación y de organización de

empresas. En los primeros países industriales, los ferrocarriles fueron construidos con capitales nacionales, en los de industrialización tardía fue determinante la inversión extranjera. Desde fines del siglo XIX, los distintos Estados empezaron a nacionalizar los ferrocarriles o al menos a exigir que fueran equipados por las industrias locales y la situación comenzó a revertirse. La navegación a vapor Las transformaciones en el transporte marítimo permitieron a una Europa en plena expansión salir hacia el resto del mundo. El mercado mundial adquiriría así nuevos horizontes. El importante papel desempeñado por los bancos a vapor en el comercio marítimo sólo se dejaría sentir a partir de 1840, año aproximado que marca la incorporación de innovaciones revolucionarias en su desarrollo. De todos modos, hasta la década de 1870 había velero, los clippers, que eran más veloces que ellos. Desde los ‘40 hubo una serie de innovaciones técnicas que sustentaron la superioridad de los barcos a vapor: 1. el reemplazo de la rueda por la hélice y la posterior mejora de esta última (hélice de tres palas instead of 4). 2. la adopción del motor compuesto luego de 1860. 3. Construcción de cascos de acero en reemplazo de los de mader hacia 1860/70 Resultados: mayor solidez a los barcos, instalación de motores más potentes y aumento del tonelaje y la velocidad. Ya en 1890 se incorpora la turbina a vapor sumado a la reducción significativa en los costos de producción del carbón y el acero. Paralelamente a las innovaciones técnicas, crecieron los costos de construcción de los barcos. Los capitales fueron provistos por grupo bancarios que sostenían a grandes empresas, con la colaboración del Estado, que respaldó a las modernas empresas navieras y permitió el control casi monopólico de las líneas. Todos estos cambios llevaron aparejada una sustancial reducción de los costos de los fletes y el consiguiente aumento en el volumen transportado. Todo los países se vieron involucrados en el proceso pero sólo los industrializados pudieron desarrollar las nuevas tecnologías e incrementar su presencia. El transporte marítimo debió ser acompañado por infraestructuras portuarias que llevó a la concentración en unos pocos puertos de vastas magnitudes y con los requerimientos técnicos suficientes para atender las necesidades de las grandes embarcaciones. Segunda Revolución Industrial El concepto de revolución tecnológica La primera revolución industrial fue acompañada de profundas transformaciones económicas y sociales, las siguientes fueron sólo etapas de innovación tecnológica. La expresión segunda revolución industrial hace referencia al conjunto de innovaciones técnicoindustriales, la empresa moderna y los nuevos tipo de gestión del trabajo y organización industrial que surgen durante el último tercio del SXIX. Revolución tecnológica que se distingue por su capacidad de transformar el aparato productivo de una economía en su conjunto y que tiene un impacto global en la dinámica del crecimiento económico, en las formas socioinstitucionales y en el régimen de acumulación de

capital. Desde el aspecto tecnológico, se pueden distinguir dos tipos de innovaciones de carácter múltiple, que corresponden a las macroinvenciones y las microinvenciones. Las primeras, las radicales, son por definición “una ruptura capaz de iniciar un rumbo tecnológico nuevo (...) introducen productos y/o procesos productivos verdaderamente nuevos” Pueden dar nacimiento a toda una industria. Las innovaciones incrementales son “las mejoras sucesivas a las que son sometidos todos los procesos productivos y productos (...).Sustentan un incremento de la productividad”. La ductilidad de estas comprende una amplia gama de innovaciones que consisten en perfeccionar la eficiencia técnica y mejorar la productividad y la precisión en los procesos, esto es, modificaciones en los productos para elevar su calidad, disminuir su costo o ampliar su gama de uso en el mercado. El origen y encadenamiento de innovaciones radicales interrelacionadas técnica y económicamente que se difunden a lo largo y ancho del sistema productivo. El factor llave debe reunir las siguientes condiciones 1. Ostentar un costo relativo bajo, que tienda al descenso 2. parecer de oferta ilimitada 3. tener una universalidad de usos y aplicaciones 4. encontrarse en el centro de un núcleo de innovaciones radicales, capaces de desarrollar un gran salto de productividad en todo el aparato productivo y de modificar la estructura de costos relativos. En primer lugar, cada revolución tecnológica conjuga innovaciones en insumos, productos y procesos con innovaciones institucionales, organizativas y gerenciales. En segundo lugar, en cuanto a los agentes de los procesos de innovación, tenemos dos posturas extremas. La del “science push”, pone énfasis en la oferta del conocimiento científico y técnico en el proceso de innovación, en un modelo lineal que presenta la articulación “invento-innovación-difusión”. La corriente del science push se vincula con el pensamiento schumpeteriano. Por otro lado la denominada demand pull se centra en la demanda del mercado, las inversiones del capital y su relación con el nacimiento de las innovaciones. La teoría del demand pull estaría dentro de la línea de pensamiento neoclásico. Otro intento interesante de interpretar el proceso de innovación es la “teoría evolutiva” según la cual el progreso tecnológico tiene lugar de una manera evolutiva y compleja según la cual interviene el actualmente conocido conglomerado institucional de investigación y desarrollo industrial (I&D) La innovación tecnológica El uso del carbón de piedra como combustible industrial y la utilización de la máquina de vapor en la producción el núcleo generador de las innovaciones tecnológicas que revolucionaron la economía mundial, desarrollando un salto impresionante en los niveles de productividad. La virtuosa y dinámica combinación entre estos verdaderos factores clave hizo posible el desarrollo del ferrocarril, que por su trascendental impacto en la historia de ese siglo se convirtió en el paradigma tecnológico de la época. Las innovaciones tecnológicas de la 2da RI sirvieron para actualizar y relanzar la tecnología de la 1ra RI a través de perfeccionamientos.

El carbón mantuvo la supremacía absoluta como fuente de energía. De una edad de hierra a una edad de acero El acero es en realidad una variación del hierro que contiene una pequeña parte de carbono, que al quemarse produce un material menos frágil que el hierro fundido pero más resistente y duradero que el hierro forjado. La expansión de la industria del acero tuvo un enorme impacto global en todo el sistema económico. Funcionó como factor de retroalimentación tanto en las industrias que la abastecían (como el carbón) como en las que se servían de él. Los raíles de acero para el ferrocarril duraban más y eran más seguros que los de hierro. El uso de laminado de acero para la construcción naviera permitió construir barcos más grandes, más ligeros y más rápidos, y también, acorazados de guerra. El uso de travesaños y vigas de acero hizo posible la construcción de importantes obras de ingeniería civil. El petróleo y el motor de combustión interna El petróleo tiene mayor poder calorífico que el carbón, es de más fácil transporte y presenta un espectro de uso mucho más amplio, potente y diversificado que aquél. Hacia 1859 comenzó su explotación comercial en EEUU. El petróleo crudo se compone de varias sustancias o fracciones. Se consideró al querosén como la más valiosa por su adecuación para las lámparas de aceite. Otras facciones se utilizaron como lubricantes, cuya demanda aumentó rápidamente con la extensión de la maquinaria con piezas móviles, y con propósitos medicinales. Hasta la 1ra década del sXX el petróleo había sido empleado para fines limitados, hasta que el motor a combustión interna lo transformó en la principal fuente de energía para todo tipo de transporte. Desde 1890, inventores e ingenieros experimentaron con los motores a combustión interna. En 1900 se habían diseñado prototipos. “La aplicación más importante del motor a combustión interna fue el transporte ligero, como los automóviles, los camiones y autobuses”. La electricidad Hacia principios del siglo XIX, Volta, al inventar la batería, elevó la electricidad a objeto de laboratorio. La electrólisis, por la cual una corriente eléctrica descompone los elementos químicos en ciertas soluciones acuosas, dio paso a la industria del galvanizado. Desde 1859, se empiezan a construir los primeros acumuladores; hacia 1870, se inventa la dínamo, antecedente de los generadores y alternadores. Entre 1878 y 1880, el perfeccionamiento de la lámpara eléctrica incandescente, conseguido casi simultáneamente por Swan y Edison inauguró una nueva era de la industria eléctrica. La electricidad es una de las formas de energía más versátiles y tiene una multitud de aplicaciones prácticas. Siemens en 1880 inventó el tranvía eléctrico, con consecuencias revolucionarias para el transporte de las masas en las nacientes metrópolis de la época. Los motores eléctricos y equipos de maquinarias eléctricas fueron encontrando para ellos docenas de aplicaciones industriales, y los inventores estaban empezando a pensar ya en los pequeños electrodomésticos. La electricidad también podía utilizarse para producir calor y de ese modo pasó a emplearse en la metalurgia, en la fundición de metales. Hacia 1850, la

mayoría de las ciudades estaban unidas por cables de telégrafo. Compañías de material eléctrico, como Philips, Siemens, General Electric, Westinghouse, después de la Gran Guerra, la corriente eléctrica se convierte en un servicio público por excelencia. La industria química La industria química fue otro de los grandes núcleos tecnológicos que caracteriza a la Segunda Revolución industrial. La ciencia química demostró ser especialmente prolífica en el nacimiento de innovaciones, nuevos productos y procesos productivos. La institucionalización de I&D en las corporaciones químicas fue requisito ineludible para su desarrollo. Entre las principales empresas se encontraban Hoechst, Bayer, etc. Entre las más destacadas innovaciones diremos que la industria de colorantes sintéticos es el nacimiento de una nueva industria de productos de química. Se desprendieron nuevas ramas de gran futuro: la industria farmacéutica, los explosivos, las fibras y el caucho sintéticos, las telas artificiales y la industrialización de residuos minerales. En la rama de la metalúrgica al actuar como medio para el descubrimiento de nuevos metales, como el zinc, el aluminio, níquel, magnesio y cromo. Permitió el ulterior desarrollo de los procesos de aleación, teniendo al acero como metal básico. En la rama alimenticia hubo dos direcciones, por un lado la agricultura a través de la elaboración de fertilizantes artificiales, por el otro la producción, procesado y conservación de alimentos a través de métodos de pasteurización de la leche, de refinación del azúcar, de envasado de latas esterilizadas y cerradas herméticamente y de procesos de refrigeración articial de los alimentos como la carne. Estas innovaciones dieron origen a la “agricultura científica” y permitieron especialmente que las regiones de ultramar como la Argentina y Australia pudieran exportar alimentos. El nacimiento de la empresa moderna La empresa moderna se entiende como la gran empresa con una organización burocrática, administrada por gerentes asalariados, cuya forma jurídica más característica es la sociedad anónima. La empresa tradicional es de dimensiones pequeñas, consta de una sola unidad operativa y se especializa en un tipo de función (producción o distribución), o en la producción de un tipo de bien o de servicio. Las empresas modernas son grandes empresas que han integrado diversas funciones, combinando la producción y la distribución en gran escala. Otro factor que contribuyó al desarrollo de la gran empresa fue la ampliación de los mercados. En la medida en que se fueron conformando mercados de masas, el tamaño de las empresas se amplió, en muchos rubros como consecuencia de las estrategias de integración horizontal y vertical. En el primer caso, la unión de corporaciones independientes por consenso o absorción de las más débiles generó empresas de mayores dimensiones. En el segundo, tuvieron lugar procesos de integración hacia atrás y hacia adelante. Los procesos de integración atrás se produjeron con el fin de controlar el abastecimiento de materias primas y de insumos; los de integración hacia adelante, con la finalidad de controlar el proceso de distribución. La dinámica de expansión de las empresas las llevó a implementar estrategias de diversificación, ampliando el espectro de bienes producidos con el objeto de aprovechar en

forma más eficiente sus instalaciones y de ampliar sus mercados. Elementos característicos de la gran empresa 1. Estructura burocrática crecientemente descentralizada 2. Gobernadas por gerentes asalariados El desarrollo de un management sistemático en gran escala respondió a las nuevas necesidades de coordinación y eficiencia. Los métodos con base familiar o transmitidos de una persona a otra se revelaron inadecuados, incluso considerando las mayores exigencias de coordinación y eficiencia, podían resultar contraproducentes. El proceso de separación entre propiedad y gestión estuvo estrechamente vinculado al incremento de los volúmenes de capital que las grandes empresas requerían. Debieron recurrir crecientemente al crédito bancario y al mercado de capitales, mediante la emisión de acciones y obligaciones, lo cual tuvo como contrapartida el incremento del número de sociedades anónimas, que se constituyeron en la forma jurídica más característica de la gran empresa moderna. En los Estados Unidos fueron las empresas ferroviarias las primeras en contratar gerentes asalariados y en descentralizar su gestión, mientras que en Inglaterra y en Europa continental se mantuvieron sistema de organización más centralizados. En Alemania, los funcionarios públicos, civiles y militares cumplieron un papel destacado en el sistema de educación técnica, en el desarrollo de la ingeniería y en las primeras asociaciones científicas e industriales y otros fueron contratados por las empresas privadas. La organización burocrática implicó un funcionamiento más eficiente de las empresas, a través de la adopción de normas generales e impersonales, de la planificación, de la racionalización de los procesos de producción y de la adopción de sistemas más sofisticado de contabilidad y de ventas. Las nuevas formas de organización del trabajo: taylorismo y fordismo Ambas se originaron en los Estados Unidos entre fines del SXIX y principios del XX y tienen en común proponer una nueva organización más racional del trabajo, con el fin de incrementar su productividad. Taylorismo El management científico implicaba un sistema de control muy preciso sobre la organización de la producción y de la gestión e incluía un campo muy amplio de problemas, entre ellos, los cálculos de costos y beneficios, los métodos de contabilidad. El taylorismo aparece como la propuesta de “organización científica del trabajo” difundida con éxito a partir de la última década del pasado siglo, primero en los Estados Unidos y luego por las regiones más industrializadas del mundo. Durante el SXIX, en el ámbito de la industria, la “mano” y el “saber” del trabajador de oficio determinaban las condiciones y los niveles de producción manufacturera. El control y dominio de los obreros los transformaban en el factor más de la producción. En lugar de una relación conflictiva con los trabajadores, postulaba considerarlos como sus amigos íntimos, estimulándolos a que realizaran el trabajo más intenso y calificado del cual eran capaces; a cambio de eso recibirían una paga proporcional a su rendimiento y

esfuerzo. El taylorismo consiste en una serie de técnicas y mecanismos para lograr aumentar la productividad y la producción que amplían los horizontes del crecimiento económico: 1. Estudio de los tiempos y movimientos de las tareas para identificar y eliminar los movimientos inútiles 2. Instaurar una acentuada división social y técnica del trabajo 3. Estandarización de las tareas (“la única y mejor manera”) 4. Asignación de un número limitado de tareas específicas a c/u de los trabajadores a ser realizadas de manera regular y permanente en un tiempo prescripto. 5. Individualización del trabajo 6. Sistema de remuneraciones estructurado básicamente en función del rendimiento personal 7. Control y estrecha supervisión de cada trabajador por parte de capataces y supervisores. Reducción de la autonomía Fordismo Otra forma de management científico y de organización del trabajo se implantó en las empresas que manufacturaban grandes bienes de consumo durables de naturaleza homogénea. Consiste en una producción en serie de mercancías estandarizadas. “estandarización” y “producción en serie” son dos especificaciones complementarias. La producción masiva y en serie se apoya en “la cadena de montaje sobre la cinta transportadora, lo que implicaba un flujo continuo de producción , el permanente movimiento de las piezas y subconjun...


Similar Free PDFs