Comentario Copla I Manrique PDF

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Apuntes de lengua y literatura de Bachillerato. Son resumenes....

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Comentario de la Copla I de Coplas a la muerte de su padre, de Jorge Manrique

Recuerde el alma dormida, avive el seso y despierte contemplando cómo se pasa la vida, cómo se viene la muerte tan callando; cuán presto se va el placer; cómo después de acordado da dolor; cómo a nuestro parecer cualquiera tiempo pasado fue mejor. 1. (Presentación) Este texto se trata de la primera estrofa de Coplas a la muerte de su padre, un poema lírico, perteneciente al subgénero de la elegía, escrito por Jorge Manrique, poeta cortesano del siglo XV (Baja Edad Media). 2. (Tema del texto) El tema del texto es el recuerdo o aviso de la llegada de la muerte (tópico del “memento mori”) y la reflexión sobre la fugacidad de la vida (tópico del “tempus fugit”). Además, en la alusión al placer perdido podemos intuir la nostalgia por el pasado (tópico del “ubi sunt”) que se desarrolla en otras coplas. 3. (Análisis métrico) La estructura métrica del poema es la propia de la estrofa manriqueña, llamada también “copla de pie quebrado”: dos sextillas de arte menor, formadas por versos octosílabos (8 sílabas) y tetrasílabos (4 sílabas) de rima consonante, dispuestos de la siguiente forma: 8a, 8b, 4c, 8a, 8b, 4c – 8d, 8e, 4f, 8d, 8e, 4f.1 4. (Figuras retóricas) El poema comienza con una invitación (o consejo) a reflexionar sobre la brevedad de la vida y la inminencia de la muerte con tres verbos de valor imperativo: recuerde, avive y despierte. En ellos encontramos la personificación del alma y el seso, metonimias del ser humano, a los que se les atribuye la acción de dormir y despertar. Esta antítesis entre ser inconsciente (dormir) y ser consciente (despertar) se repite en la oposición vida-muerte, pasa-viene, en un paralelismo reforzado por la anáfora cómo, que se repetirá en los versos posteriores: cómo se pasa la vida, cómo se viene la muerte La muerte aparece como un personaje que nos sorprende, pues se acerca sigilosamente, tan callando, en nueva personificación. Al final, en las última coplas, reaparecerá dirigiéndose directamente al moribundo, Don Rodrigo, padre del poeta, y estableciendo un diálogo con él.

1 Atención: los versos 7, 9, 10 y 12 suman una sílaba más (7+1=8, 3+1=4) al acabar en sílaba aguda.

Una nueva antítesis enfrenta el pasado (feliz) con el presente (desgraciado) y el placer con el dolor: la memoria provoca la infelicidad al evocar el tiempo perdido, que, subjetivamente, fue mejor. Por último, destaca el uso de los verbos en relación con el devenir temporal: el presente de subjuntivo que nos invita a la toma de conciencia (recuerde, avive, despierte), el presente de indicativo que enuncia los hechos generales sobre los que se reflexiona (pasa, viene, va, da), el gerundio que transmite la sensación de duración del momento (contemplando, callando) y el pretérito perfecto simple que nos sitúa ante el pasado perdido (fue). 5. (Conclusión) En conclusión, en esta copla manriqueña se sintetiza la reflexión general que sobre la vida y la muerte hace el autor en la primera parte de la obra. Sin entrar aún en la evocación del padre y sus virtudes, el poeta nos invita a compartir su pensamiento, expresado en tópicos medievales, incluyéndonos en la primera persona del plural del posesivo (a nuestro parescer). De este modo la elegía adquiere un valor universal que trasciende la anécdota personal de la muerte del padre y que se extiende a la vida y la muerte de todos los seres humanos....