Comentario la Máquina de Coser Electrosexual PDF

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Summary

Una máquina de coser es una máquina utilizada para coser, en 1846,1​ se ha mejorado notablemente su eficiencia y productividad en la industria textil.

Las máquinas de coser domésticas están diseñadas para que una persona pueda coser artículos individuales utilizando un cierto tipo de pu...

Description

Comentario la Máquina de Coser Electrosexual La máquina de coser electrosexual de Oscar Dominguez en óleo sobre lienzo pertenece al surrealismo (vanguardia) y al año 1934 concretamente. Pintado en el contexto del surrealismo que abarca desde 1924 hasta la segunda guerra mundial. Tiene una gran influencia de Salvador Dalí como podemos observar en el alargamiento de las piernas, los brazos, etc… además de que las figuras parecen débiles y gelatinosas. Se aprecia la imagen paranoica o doble y un grado de humor y atracción sexual propios de un mundo onírico e irreal. Sobre el fondo oscuro se halla el cuerpo de una mujer cubierto por un manto y en la espalda le vierte un hilo de sangre que va de la cabeza de un toro a un embudo. Destacar que el cuerpo de la mujer está siendo devorado por una especie de criatura o planta carnívora que claramente no procede de nuestro mundo. Lo erótico y lo mortal se combinan en este cuadro que emana el deseo o el sentimiento de la liberación de la conciencia y de la fantasía llevada al extremo, sin dejar de lado el humor que es parte de la realidad y del surrealismo. En conclusión, es una obra emblemática de su tiempo y representativa del movimiento surrealista e influenciada en gran dosis por Dalí. En conclusión, en esta obra se muestra como los objetos liberados de su funcionalidad habitual, se convierten en medios eficaces para establecer nuevas e imaginativas relaciones entre el entorno físico y el humano desarrollando el subconsciente más profundo y adentrándose en el mundo de los sueños.

Comentario de las Meninas Las Meninas de Diego Velázquez es un cuadro colectivo y cortesano de óleo sobre lienzo, pintado en 1656 y que se encuentra localizado en el Museo del Prado. El pintor Diego Velázquez se autorretrata en el Alcázar de Madrid en el contexto de un retrato colectivo de la familia de Felipe IV. El cuadro nos sitúa como espectadores de forma que nos convertimos en los protagonistas de la obra, el pintor, la familia y los personajes secundarios parecen mirarnos directamente. El tema representado es una escena común en el palacio de la infanta Doña Margarita con las damas que reciben precisamente el nombre de las Meninas. La función del cuadro es retratar el hogar familiar de la realeza y la infancia de las infantas (como si de una foto instantánea y espontanea se tratará), además Velázquez daba a entender su estrecha relación con el rey al permitirle aparecer en el cuadro de su propia familia. En la obra predomina en la obra una composición equilibrada, de colores cálidos como el ocre (varias tonalidades), la crema, el azulado o el blanco en el vestido de las niñas. Además, Velázquez sostiene una paleta con distintos colores. En el centro del cuadro esta la infanta Margarita y otras figuras a contraluz. En el fondo se reflejan los reyes en el espejo. Hay que dividir el cuadro en dos partes, la mitad inferior donde los personajes están en una especie de dinamismo y la parte superior donde destaca la ausencia de personajes y solo hay aire. Destacar la perspectiva lineal formada en diagonal y en lateral por el techo. Los focos de luz están bien situados, uno en la ventana lateral que recibe Margarita, otro a contraluz de forma perpendicular y un tercero que procede de una segunda ventana en el fondo de la estancia. Esa combinación de sombra y luz ayuda a conseguir la sensación de atmosfera o espacio en la parte superior del cuadro que da la sensación de profundidad entre el techo, la puerta al fondo y el pasillo. Por último, la pincelada es bastante ligera, diversa, detenida y ante todo detallista, aunque en ocasiones las pinceladas sueltas describen el método “alla prima” es decir casi sin dibujar, a mano suelta y libre. El contexto en el que se da el cuadro es el siglo XVII en la España de Felipe IV, una España en decadencia que lucha por conservar su hegemonía en Europa. El significado de la obra es la representación del instante, que ya ha sido nombrada. Otro significado es el deseo de Velázquez de que le fuera concedido un honor de su talla, pues la pintura no era considerada un arte liberal sino un oficio manual y de segunda. Con posteridad le añadirían al Velázquez del cuadro un símbolo honorario. Un último significado es que Velázquez le gustaba jugar con el ilusionismo por ello coloco al espectador en primer plano....