Seccion Contagiarte PDF

Title Seccion Contagiarte
Course Comunicación Gráfica
Institution Universidad Tecnológica Centroamericana
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Contagiarte...


Description

Shirley Paz La chica del Violonchelo Shirley Paz, es una mujer hondureña, cellista, cantante, productora y compositora de diversas interpretaciones musicales. Se graduó de maestra de música; en la Escuela Nacional de Música, terminó su licenciatura con especialización en violonchelo y dirección de orquesta en Chicago, Estados Unidos. Fue violonchelista de la Orquesta Sinfónica Nacional de Honduras. A través de sus proyectos musicales ha creado esperanzas para el arte hondureño. Shirley Dayana Paz Montoya, desde sus cinco años soñó con ser cantante, y hoy en día la música se ha convertido parte de su vida. Nunca se ha aburrido de componer música sino manifiesta que no podría vivir sin la música. Su madre, fue la promovedora de su talento, porque vio en su hija, Shirley Paz, rasgos de artista. La llamó Shirley porque notó rasgos de la cantante norteamericana Shirley Temple quien cantaba, dramatizaba, bailaba y su pelo era rizo. Shirley Paz a sus cinco años ingresó a la Escuela Experimental de Niños para la Música, a sus 12 años decidió crear música para toda la vida. Le apasiona el violonchelo desde que miraba a su maestra rusa apasionada por aquel instrumento que hoy se ha convertido parte fundamental de su vida. Desde 1993 se congrega en la Iglesia Cuadrangular de Tegucigalpa, y es directora del Ministerio de Alabanza, donde dirige cada canción que se ejecuta para adorar a Dios. Ha compuesto 21 piezas con su violonchelo, entre ellas: Olor a madera, Soy mujer y me gusta mi ser, un vestido y un mujer, la novia de Honduras, Así te amo yo, entre otras. Su música ha cruzado fronteras llegando a todos los países centroamericanos, Alemania, Kazajistán, Canadá y algunas partes de los Estados Unidos.

Ha sido galardonada en tres ocasiones por los Premios Nacionales Extra, por diversas agencias de Turismo, por Fundaciones y eventos artísticos del país por su destacada labor musical como violonchelista.

El sonido que produce el violonchelo es grueso, versátil y elegante; durante el día practica alrededor de tres horas diarias logrando que la composición sea armoniosa.

El violonchelo es un instrumento musical de cuerda frotada, perteneciente a la familia del violín. Es uno de los instrumentos básicos y fundamentales de la orquesta dentro del grupo de las cuerdas, realizando normalmente las partes graves, aunque su versatilidad también permite a los instrumentistas que lo tocan interpretar partes melódicas.

La pasión y empeño de Shirley Paz por la música es invaluable. Su deseo en esta vida, es que se construya un palacio de las artes que incluyan la diversidad artística para que haya desarrollo en Honduras.

Crescendo

El Conservatorio de Música donde se sueña y se crea música

La música es todo lo que transmite paz, alegría y esperanza para cientos de hondureños que desean aprender a ejecutar un instrumento, de lunes a sábado las puertas de Crescendo se abren para recibir a niños y jóvenes que aprenden de los instrumentos de cuerda, percusión y viento. Antes del 2008 varios artistas incluyendo a Shirley Paz daban cursos de música en diferentes hogares, luego se originó la idea de aglomerar personas con buena actitud hacia la música en un solo local para brindar cursos eficientes y a bajo costo, es por eso que nace Crescendo en 2008 con ningún presupuesto, con la visión de formar compositores musicales, preparar artistas y ensanchar el arte hondureño, en Crescendo se han expresado lágrimas, risas y experiencias ya que aprender música requiere de pasión, tiempo y dedicación. Los estudiantes inscritos aprenden del instrumento de su preferencia, Crescendo dispone de clases de Piano, Guitarra, Violín, Batería, Bajo, Saxofón, canto y Flauta dulce y su preparación es en bachiller en Música. El anhelo de la directora de Crescendo, Shirley Paz, es que los 170 alumnos matriculados honren a su país, con valores, con amor y sobre todo representar a la nación dignamente.

Dos veces a la semana llegan los estudiantes inscritos a Crescendo, con la intención de poder especializarse en la ejecución de un instrumento musical de su preferencia, para expresarlo en iglesias, plazas, comunidades, reuniones o representando el país a nivel internacional.

Los estudiantes aprenden a ejecutar un instrumento musical mediante la lectura de partituras impresas que indican como debe interpretarse una composición musical, a través de un lenguaje propio formado por signos musicales.

Crescendo busca crear cambios radicales en el impacto del arte, forma, intelecto y pensamiento, para reflejar que la cultura hondureña se caracteriza por el interés a las buenas prácticas.

La tarea del Conservatorio de Música Crescendo es alimentar armoniosamente a cada persona que llega a sus instalaciones, también los hacen meditar en la labor social que se puede hacer a través de la música.

Escuela Nacional de Música Más de 60 años formando miles de músicos para la nación

La fundación de la Escuela Nacional de Música, marca en la historia de la música en Honduras hechos muy importantes afines con la evaluación de las ciencias, las artes, la cultura y las políticas del Estado. El primer intento de creación de una escuela de música por parte del Estado fue logrado por el general Miguel Dávila quien nombro al maestro Rafael Coello Ramos en la dirección de lo que podría llamarse Escuela Nacional de Música. El primer director de esta escuela fue el violinista Humberto Cano en 1953. En 1954 los principales catedráticos eran Victoriano de la Cananea quien impartía clases de Violoncelo, contrabajo y acordeón. El maestro Mario Ferreti compartía clases de canto, estos dos maestros eran de origen italiano. Actualmente la Escuela Nacional de Música ofrece dos bachilleres profesionales, ciclo común y cursos libres de más de 10 instrumentos musicales.

Sus corredores están llenos de alumnos que en sus horas libres ejecutan su instrumento musical favorito, respirándose un verdadero ambiente de amor por el arte.

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Más de 1,000 músicos se han formado en esta escuela musical donde aprenden de manera profesional a ejecutar un instrumento de acuerdo a su preferencia.

Cada estudiante practica alrededor de cuatro a cinco horas diariamente el instrumento que eligió, se requiere una entrega, pasión y sacrificio para poder obtener el título de bachilleres en formación musical.

La Escuela Nacional de Música es una entidad abierta, ofrece bachilleres cursos libres musicales. Cualquier persona puede estudiar solo debe tener tiempo y el instrumento que desea aprender.

La música Garinagu como una Identidad Nacional

Los garífunas o Garinagu (termino que se utiliza para describir a los garífunas de manera plural) son una etnia de origen africano que arribaron a las islas hondureñas desde el 11 de marzo de 1797. Los garífunas tienen sus propios valores, tradiciones, creencias y sobre todo su música garinagu que representa resistencia cultural. El 90 % de la música garífuna proviene del continente Africano, se basa en invocar el espíritu de la naturaleza y son 25 ritmos que componen esta música. Cuando los garinagus construyen una casa, siembran, velan un fallecido lo hacen de manera alegre con instrumentos autóctonos que dejaron sus ancestros. Los garífunas en toda ocasión hacen uso de sus raíces hereditarias, por eso utilizan los diversos instrumentos para ejecutarlos en todo tiempo, si van a construir una casa la edifican cantando para pedirle permiso a la naturaleza, en los velorios se ejecutan más de 10 instrumentos como una manera de celebración, menos los tambores porque se cree que el difunto lleva malos espíritus. La punta es una forma música propia de la etnia garífuna en sus celebraciones y festividades. Se tienen registros que se toca música garífuna desde finales de la década de 1970 por los habitantes de las ciudades de Tela, La Ceiba, Trujillo y Roatán.

El tambor garífuna es una leyenda y dentro de la sociedad garinagu es símbolo de unificación, de la paz, de la guerra y sagrado frente a las divinidades. Hecho de la caoba y cedro y estos se cortan según los movimientos del astro lunar.

Los tambores garífunas son sagrados, a través de ellos se invoca a Dugu (Dios de los Garífunas). Su ejecución impone soberbia y respeto y sus afinaciones son realizadas por los espíritus de los ancestros.

Las maracas son un instrumento idiófono de sacudimiento y de percusión indirecta, las semillas naturales que llevan dentro golpean las paredes del jícaro obteniendo un sonido musical.

Uadabaguri o concha de caracol como se conoce, trata de un instrumento aerófono. Su uso es de introducir aire a presión con la boca y según la posición de los labios se obtendrá el sonido. Funciona para llamar al pueblo avisando que el pescado ya está en la playa.

Los canciones de parranda son: de tristeza, dolor, alegría, de la concepción del amor y la amistad. Las canciones Bunda Banguidi (Punta) son exclusivas para el ritual dancístico en los velorios, novenarios y la botada del luto. Los cantos Jungu Jungu son cantos entonados por las abuelas que narran la historia garinagu ancestral....


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