KANT► Espacio, Tiempo Y Categorías... ¡Explicadas😎 Kant PDF

Title KANT► Espacio, Tiempo Y Categorías... ¡Explicadas😎 Kant
Author Yamna Akhrif
Course Filosofia
Institution Universitat Autònoma de Barcelona
Pages 5
File Size 52 KB
File Type PDF
Total Downloads 74
Total Views 141

Summary

apuntes de filosofia bachillerato...


Description

Adictos. Vamos a insistir en la embolia cerebral que nos provocó el último vídeo de Kant, porque si por amor al arte. Y además, porque todavía nos faltan muchas cosas por ver. Las distintas formas, muchas automaquillaje. En el anterior video comparamos a Kant con Aristóteles, vimos que para Aristóteles la realidad es un compuesto de materia y forma, y que el conocimiento es el proceso con el que la mente abstrae la forma de la realidad. La forma es algo que pertenece a la realidad, la cosa real, y que el sujeto, mediante su conocimiento, descubre. Pero esta fiesta se apunta. Rumi dice que no, que la abstracción esta es imposible, que no hay ninguna forma en la realidad y que lo único que nos muestra la experiencia son casos particulares y contingentes. Por tanto, cualquier elemento formal, universal y necesario en mi conocimiento es una ilusión de mi mente. Este empirismo desata una crisis en la filosofía y amenaza con hundir los cimientos de la ciencia. Por suerte, Immanuel Kant estaba cerca y se vino al rescate con el superpoder del pensamiento. En términos generales, Cantã acepta la crítica de Giuly, pero al mismo tiempo intenta superarla. La realidad o no humano que nos es dado en los sentidos es un conjunto caótico, disperso e inconexo de impresiones. Pura materia. La forma, por tanto, tendrá que provenir de otra fuente las estructuras apriori del sujeto. La forma ya no es, como en Aristóteles, algo de la realidad que el sujeto descubre, sino que pasa a ser algo del sujeto que el sujeto pone en el conocimiento. La universalidad y necesidad del conocimiento pasarán a estar fundadas en estas estructuras, a priori independientes de la experiencia que el sujeto posee en sí mismo. Podemos decir, por tanto, que para Kant el conocimiento es una síntesis entre dos elementos 1 lo que recibimos a través de las impresiones sensibles la materia y el segundo, lo que nuestra propia facultad de conocer aporta desde sí misma la forma. Pues bien, una vez establecido que la forma la aporta el sujeto Kant va a pasar a distinguir tres niveles de formalidad dentro del mismo sujeto que va a estudiar, respectivamente, en la cual efectivamente los tres son capítulos dentro de la crítica de la razón pura de la que todavía no hemos salido en estos videos. La estética trascendental se ocupa del nivel de la sensibilidad. La analítica trascendental se ocupa del entendimiento y la dialéctica trascendental se ocupa de lo que Kant llama razón. En cada uno de estos niveles de conocimiento hay que distinguir entre la materia que es aportada por las impresiones sensibles y la forma que es aportada por el sujeto, y en cada uno de estos niveles la forma que aporta al sujeto va a ser distinta. La no encuentra la forma escueta de la tierra.

Si esto va a ser importante, ni la experiencia sola ni la razón sola constituyen conocimiento. Empecemos, pues, por la estética trascendental. Y no, no estamos hablando de cómo lograr un cuerpo estético. Kant toma la palabra estética en su sentido etimológico Heist, CSIS, que en griego significa sensibilidad, sarai y sensibilidad de sentidos. La estética trascendental es, pues, un estudio de las condiciones de posibilidad del conocimiento sensible. Y como estamos hablando de conocimiento. Tiene que haber algo que aporten las impresiones sensibles. La materia tiene que haber algo que aporte el sujeto, la forma que aporta al sujeto en este nivel. En este primer nivel, Kant descubre dos formas o intuiciones puras. En estas formas no hay nada que pertenezca a la sensación y su única finalidad es estructurar las impresiones caóticas y múltiples que recibimos por los sentidos. Estamos hablando de las formas del espacio y del tiempo que se encuentran a priori en el espíritu humano y que subyacen a toda impresión sensible. El espacio y el tiempo son las formas generales de toda intuición sensible, sin las cuales no podemos representarnos sensiblemente en nada. Todo lo que se nos presenta sensiblemente se nos presenta bajo la forma del espacio y del tiempo. Por ello son las condiciones trascendentales de la sensibilidad, porque sin ellas no podríamos percibir nada. Son las condiciones sin las cuales no es posible el conocimiento sensible. Pero ojo, no son algo real en sí mismo que nos podemos encontrar en la realidad, como diría por ejemplo Newton, ni tampoco expresan la relación entre las cosas, como diría por ejemplo Leibniz, sino que son formas que residen en el sujeto. Son las formas a priori del conocimiento sensible. No están en la realidad, sino que están en el sujeto que son. A priori significa que no adquirimos las nociones del espacio y del. De la experiencia, sino que en cierto sentido nos vienen ya de fábrica, anteriores a cualquier experiencia. No pueden depender de la experiencia, porque es justamente la experiencia la que depende muy fuertemente de estas dos formas del espacio y del tiempo, pues aparte del espacio y del tiempo no se puede percibir nada. No hay conocimiento sensible fuera del espacio y el tiempo, pero tampoco percibimos el espacio y el tiempo, sino que son aquellas condiciones sin las cuales no podemos percibir nada. Son, por decirlo de algún modo, los marcos de nuestra sensibilidad, su contorno o perspectiva previa, los cristales con los que miramos el mundo. La metáfora para mirar adelante hacia el cuerpo que se cuela saltando y sujeta para codificar la traza las patas de las pisca. Quedamos con que no son cosas u objetos que encontremos en el mundo, sino que son las ventanas con las que vemos el mundo en términos más kantianos. Son el horizonte general desde el cual nos representamos todos los objetos al nivel de la experiencia sensible. Se hallan en nuestro espíritu con

anterioridad a cualquier percepción, pues fuera de ellos no podemos percibir nada. Son formas de nuestro modo de recibir los fenómenos. Recibimos los fenómenos según las formas del espacio y del tiempo. Para Kant, este es el nivel de las matemáticas, cuyas dos ramas geometría y aritmética estudian respectivamente el espacio y el tiempo, al demostrar que estas formas de la sensibilidad se pueden aplicar a las intuiciones sensibles. Kant concluye que las matemáticas son una ciencia, es decir, que nos aportan conocimiento universal y necesario. Subamos de nivel. Vamos ahora por la analítica trascendental. Y no, no estamos hablando de olas porque nos piden nuestros médicos diversos tipos de analíticas. Después de examinar el conocimiento sensible, le toca el turno al conocimiento intelectual. En la analítica trascendental, Kant intentará averiguar qué es aquello que en el conocimiento proviene únicamente del entendimiento, cuál es la forma con la que el entendimiento piensa los objetos. En este nivel, Kant descubrirá los conceptos o categorías que integrarán en una unidad superior la multiplicidad de fenómenos descubiertos en el nivel de la sensibilidad. Ya en el primer nivel, una primera ordenación de las caóticas y diversas intuiciones sensibles bajo las formas del espacio y del tiempo, ahora procede una segunda unificación bajo las formas del entendimiento las categorías. Sólo así se podrá alcanzar un pleno conocimiento. Entonces, cuáles son las formas, las categorías con las que el entendimiento piensa los objetos? Pues Kant es muy complicado hacerla. El final no te parece? Pues Kant descubre, a partir de los diferentes juicios, que el entendimiento puede hacer una lista de 14 categorías, que son las siguientes. Leónidas, dirás tú vale, ya lo hago yo. Unidad, pluralidad, unidad. Pluralidad totalidad real. Unidad, pluralidad totalidad. Realidad. Negación, paz. Me cago en la leche. Unidad. Pluralidad totalidad. Realidad. Negación, limitación, sustancia y accidentes. Causalidad, acción y pasión. Posibilidad, existencia y necesidad. Estas formas o categorías son puras, es decir, tienen cero contenido empírico. Son, por tanto, conceptos independientes de los datos de la sensibilidad que no se obtienen a partir de la experiencia, sino que vienen de fábrica en el espíritu humano. Esto es una ventaja para Kant, porque si vinieran de la experiencia por abstracción, por ejemplo, como en Aristóteles, serían conceptos empíricos y no podrían fundar una ciencia rigurosa. Recordad que desde de la experiencia no se puede derivar necesidad ni universalidad, que son las características de la ciencia, pero como son conceptos a priori que residen en el sujeto, poseen universalidad y necesidad y pueden trasladar estas características al objeto de conocimiento.

Esto es lo que le permite a Kant concluir en este nivel que la física también es una ciencia, porque es la disciplina que aplica estos conceptos o categorías a las intuiciones empíricas. Sin embargo, mantiene en mente que las categorías no son algo de la realidad. No nos dicen ninguna propiedad de las cosas en sí que desconocemos, sino que son algo del sujeto, exactamente igual que las formas del espacio y el tiempo constituyen la mochila subjetiva con la que el sujeto conoce la sustancia. Por ejemplo, no es algo que exista en lo real, sino que es una de esas maneras o estructuras con las que nuestra mente interpreta y piensa los datos caóticos y múltiples de la experiencia. No es algo de la realidad, sino que es algo del sujeto. Se consuma el giro copernicano, la unidad y la forma de los objetos no tiene su origen en las cosas mismas que nos son desconocidas, sino en el sujeto. Es el sujeto el que impone a los objetos sus propias estructuras o leyes, a priori caracterizadas en el nivel de la sensibilidad por las formas del espacio y del tiempo, y en el nivel del entendimiento por los conceptos o las categorías. Es cierto que las categorías no son la causa del ser de los objetos, porque el espíritu humano no es un espíritu creador y por eso Kant se ve obligado a distinguir entre el fenómeno, lo que conocemos y el no humano, aquella realidad en sí que desconocemos, pero que en parte es causa de nuestro conocimiento. Y es que sin esta distinción que establece la existencia de algo desconocido de lo que nosotros no somos causa, la línea que separa el espíritu humano del espíritu divino sería muy, muy fina. Pero sí que podemos decir que las categorías son causa no del ser de los objetos, sino del modo en el que los objetos se nos presentan, con tal de que puedan ser pensados para poder pensar los datos de la sensibilidad. Nuestro espíritu necesita ordenarlos bajo las categorías. Eso sí, el único modo de que las categorías nos den conocimiento es poniéndolas en relación con los datos de la experiencia. Esta frase grabados a fuego. Si queréis entender a Kant, sólo hay conocimiento en el encuentro entre las categorías del entendimiento y las intuiciones empíricas. Conceptos sin intuiciones son vacías, intuiciones sin conceptos son ciegas porque son ciegas a las intuiciones sensibles, sin conceptos, porque sin un orden impuesto no se puede pensar nada. Porque son vacíos los conceptos si no los aplicamos a las intuiciones sensibles, porque sin referencia a algo que no se ha dado en la experiencia, los conceptos se quedan sin contenido y unos conceptos vacíos. No están hablando de nada, no están pensando nada. Todo esto levanta serias dudas sobre la posibilidad de un conocimiento que vaya más allá de lo empírico, es decir, de un conocimiento meta empírico o, dicho de otro modo, metafísico. Esto es lo que examina el siguiente nivel la dialéctica trascendental para la española. Vaya, pues vamos a tener que dejarlo para otro video. Si te gustaría saber qué es eso de la dialéctica trascendental y resolver el misterio de sí, para Kant es posible una ciencia metafísica. Dale al compártelo con tus amigos para que descubran el acervo apriori de su espíritu y suscríbete para no perderte nuestro contenido.

Y hombre, ya que estás, pues dale a la campanita o acuérdate que no hace falta que te hagas el listo con la pronunciación. En fin, nos vemos pronto. Agur. Joder, pues para aburrirse el lío que nos montó ya le a la amiga....


Similar Free PDFs