La cuestión del arkhé PDF

Title La cuestión del arkhé
Course Introducción a la Filosofía
Institution Universidad Siglo 21
Pages 16
File Size 561.7 KB
File Type PDF
Total Downloads 4
Total Views 126

Summary

modulo 1...


Description

La cuestión del arkhé

Existe una búsqueda fundamental situada en el centro de la reflexión presocrática. Se trata de una indagación clave para construir la primera fase del pensamiento occidental cuyo punto de inflexión fue el asombro ante un kósmos ordenado y armónico. En esta lectura transitaremos el camino que sirvió de inspiración a los primeros filósofos. “Paso del mito al logos”

Los problemas fundamentales

Referencias

LECCIÓN 1 de 3

“Paso del mito al logos”

Suele afirmarse que la primera época de la filosofía antigua fue aquella que tuvo de protagonistas a los presocráticos. Reconstruir el pensamiento presocrático equivale, en cierta forma, a repasar el armado de un gran puente histórico por donde se produjo el famoso paso del mito al logos. Este tránsito, que tuvo su origen en Jonia, en la costa de Asia Menor, provocó un cambio sustancial, un viraje clave en la historia del pensamiento filosófico y más aún, de todo el pensamiento occidental. No es de extrañar que, en la medida en que la explicación racional de los fenómenos naturales comenzaba a sustituir a la explicación mitológica cargada de fuerzas sobrenaturales, la filosofía dirigiera su mirada al estudio de la estructura y las leyes del universo.

Pero volvamos otra vez al punto de partida. La expresión “filosofía antigua” hace referencia al primer capítulo de la reflexión filosófica que surge alrededor del siglo VII a.C. en Grecia y se extiende hasta el siglo VII d.C. Durante este período, tuvo lugar una gran transformación intelectual debido a que empiezan a abandonarse las tradicionales explicaciones del mundo basadas en argumentos de tipo religioso o mitológico para sustituirse por formas de pensamiento basadas en la razón (Orosco Fabián, 2012).

Figura 1: Mapa de Jonia, Asia Menor.

Fuente: S.n., s.f., https://bit.ly/2P2RqBu

Interpretar el mundo en clave mitológica implicaba considerarlo como una expresión de la voluntad de los dioses. Las respuestas a las principales preguntas acerca de los fenómenos del universo o de grandes acontecimientos sociales (guerras, enfermedades, desastres climáticos, etc.) remitían a explicaciones sustentadas en mitos.

Consideremos cómo sería tener una visión mítica del mundo. Quizá, gracias a todas las películas y series épicas que retratan escenas de ese mundo, no nos cueste tanto adentrarnos en esos escenarios de batallas y seres fabulosos. Observemos detenidamente la figura 1. Se trata de “La furia de Aquiles”, un óleo sobre lienzo de Charles Antoine Coypel (1694-1752).

Figura 2: La Furia de Aquiles, Charles Antoine Coypel (1694-1752).

Fuente: [Imagen sin título sobre La furia de Aquiles], s.f., https://bit.ly/2P1jcxX

Ahora pensemos:

¿Qué nos llama la atención?

¿Qué impresión nos causa la mujer que está a la izquierda de Aquiles como intentando calmar su cólera?

¿Cómo son las representaciones de los hombres que aparecen en el cuadro?

¿Hay figuras aladas?

Veamos lo que “nos cuenta” la imagen, que es sobre una de las leyendas más ricas de la mitología griega. En la pintura se retrata un episodio clave de la Ilíada, uno de los más grandes relatos épicos de la historia, atribuido a Homero, que narra acontecimientos ocurridos en la Guerra de Troya. Concretamente, la acción se sitúa en los 51 días en el décimo y último año de la guerra. El tema central de la Ilíada es la cólera de Aquiles

por la muerte de Patroclo, su amigo, en manos de Héctor, que dirigía al ejército troyano. Aquiles, hijo de la diosa Tetis, le propone a Agamenón que hagan a un lado sus diferencias, pero luego regresó al campo de batalla, desoyendo así las advertencias de su caballo Janto que, luego de haber recibido los dones de la palabra y de la profecía, le había predicho su muerte. Aquiles porta una nueva armadura hecha por el dios del fuego Hefesto, y hiere a muchos troyanos en busca de Héctor. Los dioses evitan por momentos que ambos héroes confronten, pero Aquiles avanza hacia Troya sin un mínimo respiro para su cólera. Finalmente, Aquiles se lanza contra Héctor y da tres veces la vuelta alrededor de las murallas de Troya. La balanza del Destino se inclina por la suerte de Aquiles contra Héctor. Aquiles lo asesina clavándole su lanza, y para sellar su venganza ata el cuerpo a su carro y lo arrastra por el campo de batalla durante nueve días.

Pesemos lo que habrá significado entonces ir apartándose de ese mundo habitado por esos torrentes de emociones y caprichos divinos para responder a la pregunta “por qué sucede lo que sucede”. Siendo así, es indudable que se haya tratado de una transformación de la realidad que influyó poderosamente en la generación de un nuevo orden para el universo. Es ese “paso del mito al logos” el que comienza a consolidarse con los filósofos presocráticos al intentar edificar una reflexión racional del cosmos. Lo que se conoce de estos filósofos (llamados así por su ubicación temporal previa a Sócrates, aunque algunos filósofos son coetáneos suyos) es a través de fuentes indirectas (Aristóteles, Diógenes Laercio, Teofrasto, etc.). De lo que no cabe duda es que su reflexión cosmológica, que busca el logos, la estructura racional de la naturaleza, inaugura un periodo del pensamiento humano en pugna con la construcción mitológica como esquema explicativo de la realidad.

La cosmología (del griego kósmos, “universo”, y lógos, “discurso”) se convierte en el principal motor de la reflexión presocrática. Pero la pregunta acerca de cómo está constituido el universo se extiende entonces más allá de lo que meramente observamos: para los griegos, el universo sustenta un “orden” que tiene su origen en un caos inicial. Esta mirada en un todo armónico que se afirma contra una materia primigenia caótica también responde a dos vías teóricas centrales del pensamiento griego que son la ética y la estética: la verdad, el bien y la belleza son conceptos fuertemente enlazados.

Una de las características más destacadas de este tránsito al estudio del universo y sus leyes es que guiará a la filosofía a un nuevo paradigma del pensamiento:



En los presocráticos se inicia un pensar «demostrativo», que no se limita ya a escuchar relatos, sino que con su propia observación y reflexión crítica trata de captar algo y al mismo tiempo de razonarlo. Al surgir así con los presocráticos el pensar conceptual, nacía al mismo tiempo la filosofía de Occidente (Hirschberger, 2012, p. 14).

LECCIÓN 2 de 3

Los problemas fundamentales

Los filósofos presocráticos suelen agruparse en escuelas. No hay que entender la noción de escuela en su sentido actual, sino que más bien hace referencia a cierta tradición de pensamiento. Suelen reconocerse dos grandes tradiciones que reciben el nombre de fisicalista y lógico-racionalista. Ambas formas de pensamiento se difundieron por todo el mar Mediterráneo (desde Asia Menor hasta Italia). Pero veamos qué tenían en común.

Interesados fundamentalmente en buscar explicaciones naturales a los procesos de la naturaleza, el gran mérito de estos filósofos fue centrarse en esclarecer la cuestión del arkhé (en griego, término que se puede traducir por “principio”, pero también por “origen primordial”), es decir, el principio o la materia primaria de la que todo lo demás está hecho. Es importante destacar que ese origen de la naturaleza es lo que la sustenta como razón organizadora de todo lo existente.

Los presocráticos identificaron este principio con diversos elementos de la naturaleza, y optaron por apelar a un principio (monismo), a dos (dualismo), a varios (pluralismo) o a uno de carácter indefinido (ápeiron). La meditación presocrática es así una meditación sobre los principios que operan para organizar el cosmos (la totalidad de lo existente). Sobre esta base, estos filósofos elaboraron sus propios enfoques que encarnaron una nueva manera de pensar alejada de los mitos tradicionales.

Establecer el ser más íntimo de las cosas como “algo” de lo que todo procede y a lo que todo regresa implica extender la mirada más allá de las apariencias sensibles y de las innumerables variaciones de las cosas. Lo que domina el interés, entonces, es averiguar ese “algo” que constituye el verdadero y propio ser de las cosas.

La reflexión de los presocráticos queda expresada de la manera más clara en estas distinciones fundantes del pensamiento filosófico:



Esta distinción entre lo exterior y lo interior, entre el fenómeno perceptible por los sentidos y el verdadero ser sólo pensable, entre lo accesorio y lo esencial, acarreaba todavía otra distinción: En el fenómeno o apariencia exterior cada cosa era algo propio, individual, pero luego, en la esencia, las cosas resultaban iguales entre sí; la esencia era común. Ahora bien, esto común o general aparecía ahora como lo más importante, y por consiguiente como algo aún más esencial en comparación con lo sólo individual. Todavía surgía, como por sí misma, una tercera distinción: la esencia interior, la misma en todas partes, es también lo permanente, lo consistente, seguro, computable, desconocible, comparado con lo transitorio, casual, inseguro, envuelto en sombras, que no puede ser objeto del saber, sino a lo sumo de una representación, de una creencia u opinión (Hirschberger, 2012, p. 1617).



Como dijimos antes, suelen distinguirse dos grandes tradiciones en este contexto. Por un lado, identificamos la fisicalista, interesada por la búsqueda del principio (arkhé) del universo en un principio material. Constituye la vertiente, en general, más naturalista, es decir, más próxima al estudio de la physis o naturaleza. Podríamos decir que una de las cuestiones clave aquí es saber qué componentes físicos constituyen el cosmos. Veamos cuáles son las posiciones que se agrupan aquí. Comencemos por los tres filósofos de la llamada Escuela de Mileto:

Tales de Mileto (624-546 a. C.)

Consideró que el agua era el principio u origen de todas las cosas.

1 of 3

Supuso que era el aire el principio que explicaba el universo.

Anaxímenes (585-524 a. C.)

2 of 3

El principio explicativo o arkhé que propone es algo que él llamó “lo indefinido” o ápeiron. Se trata de algo

Anaximandro (610-545 a. C.)

imperecedero e indestructible, que engendra todas las cosas.

3 of 3

Para estos pensadores había, entonces, una materia primaria de lo que estaba hecho todo lo demás. Ellos son monistas ya que justamente postulan un único principio constitutivo de todo lo existente.

Hay otras tres figuras que se inscriben en esta tradición fisicalista aunque se identificans como pluralistas dado que suponen una pluralidad de principios explicativos del universo:

Para él no, hay un solo elemento sino cuatro: aire, tierra, fuego y agua. Estos se combinan mediante

Empédocles (495-455 a. C.)

relaciones de amor u odio o fuerzas de atracción y repulsión, y son el origen de lo existente.

1 of 3

Apeló a unos componentes minúsculos, que denominó “gérmenes” o “semillas”, Anaxágoras (500-428 a. C.)

que se combinaban siguiendo las leyes de una inteligencia ordenadora (nous) de carácter natural y físico.

2 of 3

Junto con Leucipo, se conocen como “los fundadores del atomismo”. Sostuvo que todo está

Demócrito (460-370 a. C.)

constituido por unas unidades pequeñas e invisibles que las denominó “átomos”. La palabra

3 of 3

La visión que estos filósofos tenían de la realidad era variada y múltiple. Algunos, como Tales, llegaron a ser considerados parte de los siete sabios (lista de personas que habían sido destacadas por sus funciones políticas, sociales, etc.,) como referentes para la antigüedad.

Veamos ahora la tradición que se define como lógico-racionalista. Recibe esta denominación porque su preocupación central gira en torno a la identificación de las leyes que regulan el universo.

Heráclito (540-480 a.C.) es uno de sus principales exponentes. A él se le atribuye una concepción dinámica de la realidad, signada por el cambio permanente: todo fluye al modo de la corriente en el río, razón por la que nunca “descendemos dos veces en el mismo río”.

Heráclito mantuvo además un firme compromiso con la idea de que el mundo está caracterizado por un juego de fuerzas opuestas o contrarias que mantienen entre sí una relación de unidad. Esa tensión entre los contrastes (por ejemplo, invierno-verano, guerra-paz, etc.) es indispensable para reconocer la existencia de las cosas.

Veamos algunos testimonios biográficos que menciona el gran investigador del pensamiento de este presocrático de Éfeso, el filósofo Roberto Mondolfo (2007, p. 10-11):

ARISTÓTELES, Ética a Eudemo, VII, 1 1235 a 25 Y Heráclito reprocha al poeta que dijo: ¡Oja ¡Ojalá lá

se extingu xtinguiera iera

la

discordia

entre los di diose ose oses s

y los

hombres! hombres!(HOMERO, llíada, XVIII, 107) Pues no habría armonía si no hubiese agudo y grave, ni animales si no hubiese hembra y macho, que están en oposición mutua.

SIMPLICIO, Categorías, 412, 22 ed. Kalbfleisch No estarán de acuerdo quienes establecieron como principio los opuestos, ya sea los demás, sea los heraclíteos; pues si uno de los contrarios llegara a faltar, todo desaparecería y quedaría reducido a la nada. Por eso también Heráclito reprochaba a Homero, quien decía: ¡Oja ¡Ojalá lá se e ex xtin ingu gu guiera iera lla a discordia entre los diose dioses s y los h hombres ombres ombres! !

Pues dice que desaparecerían todas las cosas.

Heráclito subrayó que los opuestos se combinan en el mismo logos (lo mismo es el camino de ida que el de vuelta). Así: “Lo mismo es vida y muerte, velar y dormir, juventud y vejez; aquellas cosas se cambian en éstas y éstas en aquéllas” (Plutarco, citado en Kirk, Raven y Shofield, 2014a, p. 220). También emplea con frecuencia la palabra logos, que significa razón, para hacer referencia a la ley sobre el flujo racional de las cosas. Ese flujo no es anárquico, sino que está regido por el logos.

Otro gran exponente de esta tradición es Parménides (530-515 a.C.), que vivió en la colonia griega de Elea, en el sur de Italia. Para Parménides, la reflexión debe instalarse fundamentalmente en una dimensión ontológica, es decir, en el plano del ser. En el discurso parmenídeo, el ser es estático, inmutable, incorruptible (no tiene partes) y perfecto.

Para Parménides, lo que es no puede admitir un verdadero cambio, ya que cambiar es dejar de ser: no hay nada que se pueda transformar en algo distinto a lo que es enteramente. De este modo, no hay como en Heráclito un acento puesto en el devenir de las cosas. Son solo nuestros sentidos los que nos proporcionan la imagen del devenir, pero esta imagen nos crea una ilusión errónea del mundo.

Parménides llega a esta idea en un poema en el que describe que se le presentó una diosa que le ofreció dos caminos (métodos) a seguir: uno que conduce al no-ser, a la apariencia, lo mudable, lo perecedero, y otro que lleva hacia el ser, la verdad, la permanencia, lo eterno. Está aquí ya en germen la distinción platónica entre un mundo de lo cambiante (del no ser), que atestiguamos mediante los sentidos y la opinión, y un mundo del saber (episteme), que nos conduce hacia el ser de las cosas:

Ni nunca fue ni será, puesto que es ahora, todo entero, uno, continuo. Pues ¿qué nacimiento podrías encontrarle? ¿Cómo y de dónde se acreció? No te permitiré que digas ni pienses de "lo no ente", porque no es decible ni pensable lo que no es. Pues, ¿qué necesidad le habría impulsado a nacer después más bien que antes, si procediera de la nada? Por tanto, es necesario que sea completamente o no sea en absoluto. Ni la fuerza de la convicción permitirá jamás que de lo no-ente nazca algo además de ello. Por eso, la

Justicia no afloja sus cadenas para permitir que nazca o que perezca, sino que las mantiene firmes; la decisión sobre estas cosas se basa en esto: es o no es. Pero se ha decidido, como es en todas sus direcciones; pues ni mayor ni menor es necesario que sea aquí o allí, ya que ni es lo no-ente, que podría impedirle llegar a su igual, ni existe al modo que pudiera ser más aquí y menos allí, pues es todo inviolable, porque, por ser igual a sí mismo por todas partes, se encuentra por igual dentro de sus límites. (Simplicio, citado en Kirk, Raven y Shofield, 2014b, pp. 57-58).

Otro gran exponente de esta tradición es Pitágoras (570-469 a. C), discípulo de Tales. A él se le atribuyen, además de sus reflexiones filosóficas, importantes descubrimientos en el campo de las matemáticas. Las ideas de Pitágoras se combinan con muchos elementos religiosos presentes en orfismo tales como el dualismo (mente-cuerpo) y la doctrina de la salvación del alma.

Pitágoras consideraba que la forma o el número era el rasgo más fundamental de la naturaleza. Él también señaló la importancia de la idea de armonía cósmica o universal. La armonía era precisamente identificada con el alma, y ambas poseían un papel indispensable para conservar la unidad del Todo.

Actividad de repaso: Pregunta con única opción.

Lejos de considerar que todo cuanto existe esté sometido a la libre y arbitraria voluntad de los dioses, piensan que debe haber algún o algunos principios racionales que actúan necesariamente. ¿Cómo se denominan esos principios?

Polis

Kósmos

Arkhé

Ápeiron

SUBMIT

LECCIÓN 3 de 3

Referencias

[Imagen sin título sobre La furia de Aquiles], (s.f.). Recuperado de https://es.wahooart.com/@@/8Y37Q8Charles-Antoine-Coypel-Furia-todaclasede-Aquiles-

Hischberger, J. (2012).Breve historia de la Filosofía. Barcelona, ES: Herder Editorial.

Kirk, G. S., Raven, J. E. y Schofield, M. (2014a). Los filósofos presocráticos I. Madrid, ES: Gredos

Kirk, G. S., Raven, J. E. y Schofield, M. (2014b). Los filósofos presocráticos I. Madrid, ES: Gredos

Mondolfo, R. (2007) Heráclito, textos y problemas de su interpretación. México DF, MX: Siglo xxi editores.

Orosco

Fabián,

J.R.

(2012)

Epistemología

de

las

ciencias

https://riofa.files.wordpress.com/2012/08/epistemologc3ada-d-las-ccss.pdf

sociales.

Recuperado

en...


Similar Free PDFs