Libro prepa - Psicología del mexicano PDF

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“El mexicano, psicología de sus motivaciones”

Este libro bastante interesante escrito por el autor Santiago Ramírez, quien fue uno de los filósofos más importantes del siglo XX, quien es también español y quien fue sacerdote a partir de 1916. Al inicio del libro Santiago describe la situación en la cual se desarrolló la perdida de la identidad mexicana, la cual radica en la conquista hispana con la cual se trato de intercambiar nuestra cultura por la suya, pero en vez de esto dejo un vacío el cual el mexicano, el mestizo y el criollo no pudieron llenar. Por eso se habla de un sentimiento de abandono, y se hace el símil a la separación de una madre a un hijo, dándole la figura maternal, a la cultura que nos vio nacer. Otro símil que también realiza el autor es con respecto al padre comparándolo con el conquistador, al cual el mestizo odia por no haber estado al lado de él, por las malas acciones que comete hacia su madre indígena y a su persona, por el abandono, la humillación que le hace pasar en el caso de que viva con ellos. Todo este rencor inconscientemente lo transforma en una forma de ser cuando crece, lo que el padre español era para con su madre indígena, él lo va a ser para con su esposa, aun así, esta sea mestiza también. Esa discriminación indígena de los españoles, el mestizo la convierte en una discriminación total hacia las mujeres… Pienso que de aquí parte el machismo mexicano. Si comparamos estas situaciones con la actualidad que es una de las intenciones de nuestros ensayos las cosas no han cambiado mucho, el mexicano lleva una cercanía muy cálida y placentera con la madre durante los primeros años de vida, pero esto cambia cuando llega otro hermano y sustituye ese lugar, de aquí el sentimiento de abandono. Luego entonces, para la necesidad de cubrir ese descobijo se forman pandillas y se desarrolla un sentimiento machista, ya que la figura del padre tampoco existe, fue criado de la misma forma y el solo acercamiento hacia un hijo es impensable. Otra parte que me llamó la atención el doble significado o, contrario significado que se le da a la palabra “madre”. Como mexicanos está muy presente en nuestro vocabulario decir cuando algo no nos interesa, “me vale madres”, a nuestros oídos mexicanos es totalmente interpretable como un no mi interesa en lo absoluto. Ahora bien, cuando algo nos afecta de una manera colosal, también usamos esta frase siguiente: “me dieron en la madre”, “me lleva la madre” o algo así, y para nosotros es totalmente entendible que fue algo grave que nos pasó, y de mucha importancia… ¿qué papel juega la madre de nosotros en este vocabulario? ¿importa o no es importante? Creo que está relacionado con el hecho que cuando se insulta a una persona se haga intentando ofender a su mamá, y cosas por el estilo.

A lo largo del libro Santiago intenta seguir explicando la motivación que nos conduce, comenta que, en síntesis, el origen actual surge de una ruptura. La llegada de los españoles escinde la consciencia del mexicano. Le siembra una nueva cultura a la fuerza y lo mantiene mediante un sistema conductual hacia un fuerte arraigo espiritual. El mexicano producto del choque de culturas es el mestizo. Allí se encuentra un origen y causa. El padre español es irresponsable, pues tan sólo utiliza a la india para su placer. Él tiene que importar una mujer peninsular que se mantenga dentro de su canon social y cultural; alguien verdaderamente espiritual. El niño mestizo forma inconscientemente un odio latente hacia la imagen paterna, quien distingue como un objeto total de agresión. Se apega entonces a la madre, objeto total a la que desarrolla una ambivalencia crucial. Se le ama por otorgarle amor al alimentarlo con sus pechos, pero su se le odia también, por no ser fuerte, por dejarse dominar por el padre. Entonces se hace uso de varios mecanismos de defensa: la negación (niega su pasado para protegerse de recordar); la compensación (mantiene una imagen de violencia heredada del padre para ocultar su flaqueza); la proyección (ve en los demás los defectos que no quiere ver sí mismo); la identificación (no encuentra identidad original e imita). El mestizo por su parte mantiene otro mecanismo de defensa que lo estigmatiza fuerte. El de aislamiento. Sabe que nunca llegará a ser español; pero, también niega su parte indígena. Así le es recíproco por parte de los españoles y los naturales. El sólo tiene un camino, el progreso; y el progreso es ser como el padre, aunque lo odie. Aprende a ser como él, lo imita. La imagen del padre ha de ser fundamental durante toda su historia. Tratará de repararse con una máscara, el machismo. Aunque el machismo es de carácter meramente varonil y con esto se crea que se excluye a la mujer de la historia, no es así, ya que el machismo lo juegan los dos sexos. El macho necesita de una mujer sumisa, abnegada; estereotipo por demás cansino de la ambigua madre mexicana. A lo largo del libro, la imagen de padre que prevalece, es la del español. Padre sin calor. Se le odia, al no querer recordarlo, se trata de ser como él. Santiago menciona a los franceses como símbolo posterior del padre; símbolo de carencia cultural. Ellos son la parte refinada de Europa, que sí se quiere. Después los Estados Unidos, aunque, ellos primero pasan por el rol de hermanos al ser a la par de nosotros, emancipados del yugo europeo; después, se convierten en ideal, en estereotipo. Se les ataca como a todos los padres con el mecanismo de reacción-formación.

Nos describe como la parte baja lumbar de su anatomía. Según esto, así nos consideramos y deseamos emigrar hacia la cabeza. No encontramos satisfacción a lo primario, el comer. Escalamos hacia el sueño esperanzador, la frontera. La odiamos, pero una vez cruzada, ser vuelve fuerza que impele y niega lo que está detrás.

El mexicano, entonces, repara con agresión y repite su más temible máscara para no ser víctima, otra vez. Niega, con su valemadrismo, las partes oscuras de su pasado y así, introyecta sufrimiento a su inconsciente colectivo. Otros puntos importantes tocados en el libro son: El mexicano es ese pueblo gordo por los cuidados excesivos de su madre, con su horizonte adornado y limitado por los cerros, el autonombrado, dramáticamente el pueblo del sol. Pero México, el lugar del ombligo de la luna, es el seno de esa madre protectora que lo amamanta con su leche aguamiel. También exhorta que la mexicana es una mujer minimizada en las canciones populares, la ingrata que siempre abandona al ausente, al mexicano y que por tanto este se cansa de rogarle; la flor silvestre que no es ni rosa y mucho menos flor de liz, solo flor de campo que crece junto al nopal, que descarga todos sus sentimientos afectivos a través del ser madre, con sus muñecas, sus hermanos, sus hijos, sus nietos. La expresión de su sexualidad solo acarrea desprestigio, esterilidad y satanización. Para Santiago Somos la parte baja lumbar de la anatomía de pueblo. Así nos consideramos y deseamos emigrar hacia la cabeza. No encontramos satisfacción a lo primario, el comer. Escalamos hacia el sueño esperanzador, la frontera. La odiamos, pero una vez cruzada, ser vuelve fuerza que impele y niega lo que está detrás. El mexicano, entonces, repara con agresión y repite su más temible máscara para no ser víctima, otra vez. Niega, con su valemadrismo, las partes oscuras de su pasado y así, introyecta sufrimiento a su inconsciente colectivo. Como conclusión me gustaría aportar que es un gran libro de análisis del pueblo mexicano, que no solo analiza las situaciones presentes si no que para su análisis se basa en los hechos pasados, en las raíces que nos convirtieron en lo que somos ahora. La conquista sobre todo fue el parte aguas que nos voltio todo, y nos cambió toda la cultura que alguna vez fue totalmente practicada en este continente. Somos quienes somos actualmente, y somos a mi punto de vista un pueblo maravilloso como lo es México, a veces corrompido, a veces mal dirigido, pero las costumbres que actualmente tenemos, que son enormemente variadas nos hacen un gran pueblo, y la gran variedad de cultura también junto al respeto que debemos de tenernos todos y cada uno de nosotros, deben de ser nuestras herramientas para afrontar cualquier pasado, cualquier presente y cualquier futuro....