TEMA 14 Fundamentos para una historia de la arquitectura romana PDF

Title TEMA 14 Fundamentos para una historia de la arquitectura romana
Course Historia de la Cultura Material del Mundo Clásico
Institution UNED
Pages 35
File Size 3.1 MB
File Type PDF
Total Downloads 84
Total Views 128

Summary

Download TEMA 14 Fundamentos para una historia de la arquitectura romana PDF


Description

Tema 14. Fundamentos para una historia de la arquitectura romana

2014

BLOQUE TEMÁTICO V. LA CULTURA MATERIAL EN LA ROMA ANTIGUA.

TEMA 14. FUNDAMENTOS PARA UNA ARQUITECTURA ROMANA

HISTORIA

DE

LA

INTRODUCCIÓN: 1. MATERIALES Y TÉCNICAS CONSTRUCTIVAS . Para el conocimiento de la edilicia romana no sólo contamos con las fuentes arqueológicas, ya sean las canteras o los restos arquitectónicos, sino también con fuentes escritas y entre ella es imprescindible la obra de arquitectura, compuesta por 10 libros y escrita por Vitrubio en época de César y de Augusto, que aporta una información preciosa de tipo técnico, metodológico e histórico.

1.1. Materiales. El uso del material de construcción varía dependiendo del destino del edificio, de sus dimensiones, de su situación, de la disponibilidad financiera de la empresa, de las preferencias personales y culturales del cliente y del arquitecto.

1. 1.1. La piedra. Los primeros materiales pétreos que se utilizan en la construcción de la ciudad de Roma desde el siglo VI a.C. son los siete tipos de tufo1. Y finales del siglo II a.C. se comienza a usar el travertino (caliza de las canteras de Tivoli) ya que es más sólido y duradero que el tufo. A mediados del siglo I a.C. ya se utiliza el mármol de Carrara que llegaba a Roma por mar, al puerto de Ostia. Otros mármoles venían importados de Grecia, Egipto, África…; se usaban para las partes decorativas de los edificios, como las columnas, los revestimientos parietales y los pavimentos. A partir del siglo IV d.C. comienza a disminuir la importación y se empieza a reutilizar el mármol decorativo de los edificios imperiales. Este hecho se incrementa durante el Medievo en los edificios que estaban ya en ruinas y eran una

1

Tufo. piedra caliza muy porosa.

1

LA CULTURA MATERIAL EN LA ROMA ANTIGUA. - BLOQUE TEMÁTICO V cantera de materiales preciados para la construcción de los nuevos templos cristianos. Los constructores romanos utilizan para la mampostería los diversos tipos de piedra local y sólo los materiales destinados a las partes nobles de los edificios son importados. En las canteras cunado los bloques ya estaban preparados se transportaban al edificio con rodillos y cuerdas y utilizaban máquinas de elevación para las zonas más altas (cabria), además para izar los fustes monolíticos de columnas se utilizaba una máquina con dos postes en forma de ángulo recto, donde el inferior se ataba al fuste y el superior se sujetan los cables para levantar el bloque (fig. 1). El uso de mortero para la unión de sillares solamente se constata en edificios de poca calidad que recibían un nuevo enlucido posterior y cuando los monumentos estaban construidos con un relleno de opus caementicium, sobre el que se disponía el parlamento de sillares.

1. 1.2. La arcilla. La maleabilidad, que permite la realización de formas diversas, sobre todo, su solidez tras el secado y la cocción, convierten a la arcilla en un material esencial para la construcción. La fabricación de tapial y de adobe consistía en colocar la arcilla en una fosa con agua para amasarla junto con un desengrasante, ya sea vegetal (paja, hierba) o mineral (arena, gravilla). Para construir los muros con tapial era imprescindible un armazón de madera que tuviera la anchura que se quería en el muro, en cuyo interior se divierte la arcilla, siempre encima de un zócalo de piedra. Y una vez seca se retiraba el armazón. Los adobes son ladrillos de arcilla que se secan al sol y que se unen al muro mediante una lechada de arcilla húmeda. Para lograr la forma que se busca se usan moldes de madera sin fondo. La cocción de los ladrillos se hacía en hornos similares a los cerámicos; tienen una cámara de caldeo que está enterrada en el suelo, con una abertura para introducir el combustible y recubierta por una bóveda de ladrillos como orificios que dejan pasar el calor. La cámara de cocción se sitúa en la zona superior y los materiales se introducen por una puerta que se tapia durante el proceso de cocción (fig. 2). La difusión del ladrillo comienza en época de Augusto aunque sólo se emplea en estancias con alto índice de humedad; ya en la época de Tiberio se generaliza el uso en los paramentos, denominados (opera testacea). Los ladrillos se fabrican según medidas estandarizadas, (bessales 19,7cm, semilaterales 44,4cm, bipedales 59,2cm…) y además existe una forma específica destinada a las termas (tubuli de forma tubulary tegulae sin bordes), usados para la eliminación del humo y la circulación del aire caliente. 2

Tema 14. Fundamentos para una historia de la arquitectura romana

2014

Los fabricantes de ladrillos marcan sus producciones en las estampillas con el nombre de la persona que dirige la producción y que depende del dominus en calidad de arrendatario officinator, el lugar de procedencia de la arcilla figlina, las fechas consulares.

1. 1.3. El mortero. El mortero es una argamasa formada por cal (gran aportación de los romanos a la historia de la edilicia) y arena. La cal se obtiene tras un proceso que empieza con la cocción en hornos de piedra calcárea que produce óxido de calcio “calx viva”, ésta se deposita en fosas donde se moja con agua y se calienta hasta los 300º, al enfriarse y pulverizarse se consigue la cal “calx exstinta” que es la usada en la construcción y en el momento de la utilización se moja para formar una pasta homogénea que, unida a la reina, forma el mortero. Una vez fabricado el mortero se traslada a la obra y se coloca entre las juntas de piedras o ladrillos y se enlucen las paredes; el mortero se mezcla con mampuestos para la fabricación del opus caementicium, material que se considera el gran hallazgo de la edilicia romana; se usa desde el siglo III a. C. y actúa de relleno entre dos paramentos realizados con sillares, mampuestos o ladrillos, aunque sólo para edificios de poca calidad (fig.3).

1.2. Cimentaciones. Las cimentaciones soportan el peso de la estructura y lo trasmiten al terreno de la forma más uniforme posible para asegurar al edificio la máxima estabilidad. Yegún Vitrubio para que sean adecuadas es necesario excavar hasta llegar a un suelo sólido (roca). Las cimentaciones pueden estar realizadas con piedras irregulares dispuestas a seco y van evolucionando hacia un tamaño de piedras uniformes y unidas con mortero. Un segundo tipo son los grandes bloques de piedra escuadrados en seco que se usan con anterioridad a la difusión del opus caementicium, para los edificios importantes; en esta estructura la trinchera debía ser ligeramente más amplia y el plano inferior de la cimentación era más ancho que el superior. Cuando comienza a difundirse el opus caementicium se abandonan los grandes 3

LA CULTURA MATERIAL EN LA ROMA ANTIGUA. - BLOQUE TEMÁTICO V bloques y para este tipo de cimentación debían encofrarse las franjas mediante tablas de madera, donde se vertía el mortero, si bien en ocasiones y cuando el terreno permitía se disponía directamente en la trinchera excavada.

1.3. Aparejos murarios. 1. 3.1. Grandes aparejos. Las primeras construcciones pétreas romanas son las fortalezas de las ciudades del sur del Lacio, datadas entre los siglos V y III a. C. Donde los bloques son de forma irregular, a lo que se denomina aparejo poligonal u opus siliceum. El aparejo constructivo más usado en Roma hasta el final de la República es el opus quadratum, en el que los bloques paralelepípedos regulares uno sobre otro en hiladas horizontales (aparejo isódomo), todos a soga (visto por la cara mayor) o a tizón (visto por la cara menor) o alternando hiladas a soga en hiladas a tizón, ya sea en una misma hiladas o en gradas distintas. Los primeros ejemplos contratados de este tipo de aparejo son los restos de la muralla del siglo IV a. C. y una parte de los basamentos del templo de Júpiter Capitolino (figura 4.1 y 4.2).

Figura 4. Opera quadrata. 1: Templo de Júpiter Capitolino. 2: Muralla “serviana” del siglo VI a.C.

1. 3.2. Estructuras mixtas. El aparejo en damero es la alternancia de bloques de sillar con rellenos de mampuesto; este tipo no tiene una larga trayectoria y sólo se usa en los siglos IV y II a.C. Otro aparejo es el opus africanum siglo IV a.C., está compuesto por cadenas verticales de bloques de sillares en alternancia con hiladas verticales y horizontales que están rellenos con mampuestos (fig.5.1). Difundida por los cartagineses (Sicilia y Ponpeya) Finalmente, el entramado de madera denominado opus craticium. Consta de dos pies rectos de madera que apoyan sobre los zócalos de mampostería y que sostienen una viga superior que recibe el armazón de la cubierta, además hay otras vigas menores que evitan la flexión lateral y divide los paneles en lienzos, que se rellenan de opus incertum (fig. 5.2).

4

Tema 14. Fundamentos para una historia de la arquitectura romana

2014

1. 3.3. Pequeños aparejos. Una vez que aparece el opus caementicium, el opus quadratum se reserva para los grandes edificios. El opus caementicium se reviste con parámetros de piedras o ladrillos, dando lugar a diversos aparejos, que detallamos. Al principio el opus caementicium (fig. 6.1) se reviste con grandes bloques pétreos creando un falso parlamento de opus cuadratum y posteriormente los ensayos encaminan a crear un tipo de construcción más ligera, el opus incertum se realiza con pequeños bloques de tufo colocados de forma irregular en las dos caras del muro.

Figura 6.1 Bloque de opus caementicium de una tumba de la Via Appia. Figura 4.3 muralla de Ponpeya con supersposición de aparejos: opus cuadratum, opus reticulatum y opus testacerum

Entre el año 100 y el 60 a.C. el tamaño y disposición de estos bloques se regularizan y el parlamento pasa a denominarse opus quasi reticulatum, y ya entre el año 60 y el 40 a.C. los bloques se tallan en forma piramidal de base cuadrangular, que se denominan cubilia y se insertan en el conglomerado del opus reticulatum que en muchas ocasiones adquiere un agradable aspecto estético al combinar distintas piedras de colores (fig.6.2). El opus vittatum es un aparejo isódomo de reducidas dimensiones y dispuesto en piedras cuadrangulares en hileras horizontales (fig.6.3). El opus mixtum (fig. 7.1) son los parámetros construidos con alternancia de mampuestos y ladrillos, donde estos últimos serán con los que se hagan los ángulos de los muros y la parte inferior como superior del muro. Figura 7. Pequeños aparejos. 1: opus mixtum de Pompeya. 2: opus testaceum de Ponpeya. 3: opus listatum de la Puerta de San Paolo (Roma).

5

LA CULTURA MATERIAL EN LA ROMA ANTIGUA. - BLOQUE TEMÁTICO V El primer edificio construido íntegramente con ladrillos es decir el denominado opus testaceum son los Castra Praetoria, datada entre el 21 y el 23 a.C. (fig.7.2). En el aparejo denominado opus listatum alternan ladrillos con otros de pequeñas piedras de tufo rectangulares (fig. 7.3).

1.4. Arcos, bóvedas y cubiertas. Los arcos pueden construir con distintos tipos de aparejos. El gran aparejo puede consistir en un gran bloque que flanquea la distancia entre dos soportes y cuya cara interior está tallada de forma curva; también pueden ser dos bloques que dan lugar a una estructura triangular y varios bloques unidos por aproximación de hiladas. El arco de dovelas son piezas pétreas en forma de cuña que se colocan de forma radial. En ocasiones en que se construyen con la misma estructura mixta de los muros, pero de manera que el ladrillo o la piedra está en la cara vista, mientras el interior se recubre con opus caementicium. Bajo el término de bóveda se debe entender cualquier estructura de cubierta cuya principal característica es la concavidad de la superficie interna y el empuje lateral de los elementos que la constituyen. La disposición y los tipos derivan de la planta del espacio a cubrir (de cañón para estancias rectangulares, de cúpula en las circulares, esquifada en las cuadradas…) Dependiendo de su construcción hay dos tipos: -

la bóveda de dovelas que se hace con bloques pétreos de diferentes tamaños y la bóveda concrecionada, para cuya construcción es imprescindible la cimbra, que está constituida por dos arcos de círculos de madera triangulados y unidos por un tablado semicilíndrico llamado manto de cimbra, que hace de molde de la bóveda. El conjunto apoya en el suelo mediante postes o a la altura del nivel del arranque, practicando unos salientes que pueden tener valor decorativo de cornisa (fig.8).

-

Para construir las bóvedas concrecionadas, sobre una cimbra de madera, el albañil vertía el opus caementicium y después de quitar la cimbra se remataba el acabado del intradós mediante la aplicación de un enlucido con el que conseguir un perfil regular que permitiese la decoración pintada o estocada.

La técnica de construir cúpulas se adoptada con rapidez por los romanos, como por ejemplo las termas de Agripa (25 y 19 a.C.), y ya a partir de finales del siglo I d.C. la cúpula está ya instalada en la arquitectura romana. Los armazones de los tejados son muy simples ya sean a una o dos vertientes. Yonsisten en vigas horizontales (cathenae) que van de un muro aguilón al otro; estas vigas soportan a los denominados cabrios que sobresalen de los muros y finalmente los listones donde van las tejas. Este tipo de cubierta es válida para pequeños espacios. Para grandes espacios se utiliza la estructura triangulada, que son, según Vitrubio, en dos grandes vigas (pares), colocadas según la inclinación de las vertientes, unidas en la parte superior y la inferior apoyada en una 6

Tema 14. Fundamentos para una historia de la arquitectura romana

2014

gran pieza horizontal (entrecinta o tirante); los dos padres reciben todas las cargas de la cubierta (fig.9).

Los materiales para el revestimiento de las cubiertas son tejas que generalmente se colocan de la misma forma: las tegulae, (piezas planas con rebordes) yuxtapuestas en sentido longitudinal y los imbrices, (tejas curvas), situados sobre las uniones. En los bordes del tejado las hiladas de imbrices terminan en un antefixus que es un imbrex cerrado en un extremo por una placa decorada. Los techos interiores estaban construidos mediante un armazón de vigas de madera que apoyan en voladizos o en huecos realizados a tal efecto en los muros; sobre estas se clavan piezas de madera más pequeñas y que forradas de carrizo se extendía el enlucido. Este sistema permite crear falsas bóvedas ya que vigas y permisos podían doblarse según el perfil deseado (fig.10).

2. ARQUITECTURA RELIGIOSA. 2.1. Lugares y estructuras de culto en época romana. En los tiempos más antiguos se consideraba lugar sagrado aquellos espacios donde se sentía la presencia de alguna divinidad. Muchos de estos lugares podían permanecer originales o construirse estructuras (ara, edículo o templo). El altar o (ara) fue el más simple y antiguo elemento de culto empleado por los romanos. Su función principal fue la de recibir las ofrendas realizadas a la divinidad, ya fuera en forma de libación2, con productos agrícolas o bebidas, ya en forma de sacrificios cruentos con la

2

Libación. Ritual religioso consistente en la ofrenda de un líquido a una divinidad.

7

LA CULTURA MATERIAL EN LA ROMA ANTIGUA. - BLOQUE TEMÁTICO V inmolación de un animal. Podían erigirse tanto en un lugar al aire libre, como en las ciudades, los edificios para espectáculos, las propias viviendas privadas y también unidos a los templos. Su apariencia inicial recuerda a los templos griegos in antis, consistente en una planta en forma de “U”, con una estructura rectangular y dos antas avanzadas que rodeaban el espacio destinado al sacrificio (fig.11.1).

Durante el periodo republicano de imperial el altar sería un bloque prismático de unos 50 ó 100 cm de altura. Solía presentar un zócalo liso, seguido de unas molduras, luego el cuerpo y rematado con más molduras y un coronamiento liso o con volutas a los lados (pulvini) (fig.11.2). Los edículos (aedicula) eran pequeños edificios que reproducían la fachada de un templo y albergaban imágenes de dioses o héroes (fig. 12.1). Eran similares a capillas o templetes (sacellum) y solían estar en el cruce de calles; también los lararios están destinados al culto doméstico muestran una estructura similar (fig.12.2), si bien su tipología presenta múltiples variantes.

Figura 12. 1: edículo del Santuario de Juturna en el Foro Romano. 2.: Lario de la Casa de Meandro en Ponpeya.

El templo era el edificio por excelencia dedicado a una o varias divinidades, como los ritos se celebraban en el exterior, delante del edifico, en la escalinata de acceso o ante ella, se encontraba un altar donde el sacerdote hacía las celebraciones. Otro lugar de culto estaba destinado a las ofrendas votivas, entregadas para solicitar al dios un favor, dar gracias por su concesión. Las ofrendas (exvotos) eran sagradas y por eso no podían ser destruidas, robadas, vendidas…y se guardaban en fosas excavadas específicamente a sus depósitos. Podía tratarse de pozos practicados junto al edificio o bien en su interior, en cuyo caso se denominaban (favissae). 8

Tema 14. Fundamentos para una historia de la arquitectura romana

2014

2.2. Tipología y características generales del templo romano. La fórmula arquitectónica del templo romano es el reflejo de unas concepciones más cercana a la etrusca queda griega. Un elemento fundamental es el podio (basamento elevado con un único acceso escalonado en la parte delantera y donde se erguía el edificio o templo), separar al dios del hombre. Siempre se construyó en piedra y se decoraba con molduras en las partes inferiores y superiores. El tipo más difundido era el templo próstilo, que se caracteriza por una habitación rectangular precedida de un pequeño pórtico soportado por dos pilares in antis o con una pronaos columnada (fig.13.a). Otra modalidad fue la “etrusco-itálica” entre los siglos VI y V a.C., características de los Capitolia de las colonias romanas y de numerosas ciudades del imperio, caracterizada por ser rectangular y sin escalinata con una pronaos columnada (templo de Júpiter Capitolino de Roma) (fig.13.b).

El tipo de templo perípteros sine postico, creación romana que adopta la del mundo griego la forma alargada; es una modalidad de planta períptera pero sin columnas en la fachada posterior, tiene un gran podio y escalinata (fig. 13.c). Este modelo se difundió en el área latina y etrusca entre fines del siglo IV e inicios del I a.C.

A partir de mediados del siglo II a.C. hay un proceso helenizador y se adopta la forma pseudoperíptera en la que sobre las paredes de un templo próstilo se colocan semicolumnas (fig. 13.d).

Este influjo también trajo consigo la construcción períptera (fig.13.e) y edificios circulares de tipo tholos (fig. 13.f); además hay un alargamiento de la planta cuadrada (influencia griega) y la reducción del espacio de los intercolumnios Referente a los materiales empleados, en los primeros tiempos sólo se utilizó la piedra en cimientos y parcialmente en el podio; las paredes de la cella eran de adobe y las columnas primero fueron de madera y después de tufo volcánico, el arquitrabe y la estructura de la cubierta también eran de madera. Entre los siglos VII y VI a.C. estos dos últimos elementos fueron revestidos de terracota. A partir del siglo V a.C. se construye el edificio en piedra y el aparejo empleado es el opus quadratum. El mármol se utilizó por primera vez en un templo a mediados del siglo II a.C., pero no se convertirá en habitual hasta la época altoimperial. Un gran avance fue la aplicación del opus caementicium, aunque reservado para los cimientos ya se utiliza en el podio, bóvedas y cúpulas.

9

LA CULTURA MATERIAL EN LA ROMA ANTIGUA. - BLOQUE TEMÁTICO V Los recursos ornamentales de los edificios romanos se limitaban a terracotas arquitectónicas, sistema decorativo heredado de los etruscos, que di...


Similar Free PDFs