TEMA 5 Dominios ClimÁticos EN EspaÑa PDF

Preview

Summary

Download TEMA 5 Dominios ClimÁticos EN EspaÑa PDF

Description

1 TEMA 5. LOS DOMINIOS CLIMÁTICOS EN ESPAÑA. Los fundamentos de la diversidad climática española. Los principales tipos de climas y sus características. La distribución geográfica de los climas de España. La influencia de los factores climáticos sobre los elementos del clima en el territorio español se manifiesta en la presencia de diferentes dominios climáticos. 1.- El CLIMA OCEÁNICO ocupa el norte de la península: la cornisa cantábrica y Galicia. Se caracteriza por una elevada nubosidad y baja insolación a lo largo del año, con un mucha humedad y precipitaciones por el paso continuo de las borrascas atlánticas asociadas al frente polar. La acción termorreguladora del mar justifica las temperaturas templadas y la cordillera Cantábrica divide en dos el clima: el oceánico puro y el de transición. a) Clima oceánico puro: corresponde a las áreas más próximas al litoral de Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco. Presenta veranos frescos y cortos (18º-22º máximo), inviernos suaves (10º-6º), con una amplitud térmica reducida, entre 10º y 12º. Las precipitaciones son abundantes y regulares, superiores a los 1000 mm, con un mínimo pluviométrico en verano (nunca inferior a 30 mm) y un máximo invernal, provocadas por las borrascas asociadas al frente polar y las lluvias orográficas. b) Clima oceánico de transición: es característico de las regiones septentrionales relativamente alejadas del litoral, desde Orense y el interior de Lugo, pasando por la vertiente sur de la Cordillera Cantábrica, hasta el interior del País Vasco, Navarra y Prepirineo aragonés y catalán. La amplitud térmica es mayor (12º-15º), con inviernos más fríos (2º menos que en la costa) y veranos más cálidos. Las precipitaciones son menos abundantes que en el litoral, pues son zonas resguardadas por la pantalla orográfica cantábrica (efecto Foehn), con menos de 1000 mm anuales, y algún mes seco en verano. 2.- El CLIMA MEDITERRÁNEO se extiende por el resto del territorio peninsular, Baleares, Ceuta y Melilla. Su característica esencial es la aridez y el calor estival por la influencia del anticiclón de las Azores. En las estaciones equinocciales y el invierno, la situación anticiclónica alterna con las bajas presiones propias de las latitudes templadas, dando paso a las precipitaciones, que son moderadas, inferiores a los 800 mm, distribuidas irregularmente y, a veces, en forma violenta; el máximo tiene lugar en otoño y primavera, salvo en el oeste, en las zonas abiertas al Atlántico, donde se producen en invierno. Las temperaturas varían con la latitud y la distancia al mar, así podemos encontrar tres subtipos: marítimo, continentalizado y árido. a) Marítimo: propio de las costas orientales y meridionales de la Península y archipiélago balear. Presenta temperaturas invernales muy suaves y los veranos calurosos y largos. Las temperaturas medias anuales no suelen descender por debajo de los 15ºC, aumentando de norte a sur, y la amplitud térmica varía de 12ºC a 15ºC según nos alejemos de la costa. Las precipitaciones son muy irregulares y van descendiendo también de norte a sur y de oeste a este, producidas por el paso de las borrascas asociadas al frente polar, aunque ya atenuadas por haber perdido antes gran cantidad de humedad, y en las épocas de calor pueden ser de carácter torrencial y breves por su origen convectivo o por el fenómenos de "gotas frías (DANAS)" en otoño. Debido a la extensión en latitud de este clima podemos diferenciar distintas variedades: -El clima mediterráneo puro, en Valencia y Baleares, con inviernos que no bajan de los 10º, veranos calurosos y precipitaciones entre 500 y 300 mm, principalmente en otoño.

2 -La variedad del golfo de Cádiz, que se extiende por toda la costa atlántica andaluza, muy seco en verano, tres máximos de precipitaciones en otoño, invierno y primavera y una escasa amplitud térmica. -La variedad mediterránea subtropical, desde Almería hasta Gibraltar, con el invierno más cálido de la Península, por encima de los 11ºC de media y precipitaciones equinocciales. -La variedad gerundense, desde Gerona al norte de Tarragona y en Menorca, con mayor cantidad de precipitaciones, más de 600 mm anuales, y temperaturas más frescas, con 7ºC de media en enero. b) Continentalizado o de interior: El carácter macizo de la Península Ibérica impide que la influencia marina alcance el interior peninsular, aislado por las cordilleras que le rodean. Por ello las Temperaturas presentan una gran amplitud térmica, con inviernos muy fríos y veranos muy calurosos. Sin embargo, las precipitaciones son similares al mediterráneo costero, insuficientes y clara aridez estival, provocadas por las borrascas de procedencia atlántica que atraviesan el interior peninsular, teniendo los máximos en las estaciones equinocciales, cuando se debilitan los anticiclones invernales. Se pueden distinguir tres subtipos: -El clima de la submeseta norte, situada a una elevada altitud media (700 m) y encerrada entre montañas, por lo que tiene inviernos muy fríos, con frecuentes heladas, y veranos cortos y relativamente calurosos, rara vez se superan los 22ºC de media mensual. Las precipitaciones no superan los 450 mm anuales. -El clima de la submeseta sur tiene veranos calurosos e inviernos menos fríos y más cortos que en la otra submeseta debido a un aislamiento menos acusado, una latitud más meridional y una menor altitud. Las precipitaciones son más modestas que en la submeseta norte. En Extremadura, no obstante, más abierta a las influencias atlánticas, el total pluviométrico asciende. -El clima del interior andaluz, con veranos calurosos e inviernos moderados. La amplitud térmica es mayor cuanto más nos alejamos del Atlántico (16ºC en Sevilla, 18ºC en Jaén). Las precipitaciones superan los 500 mm anuales, gracias a la llegada de las perturbaciones atlánticas, que penetran fácilmente hacia el interior por el golfo de Cádiz. c) Árido: se localiza en el Sureste peninsular (Murcia y Almería) y en la zona media del valle del Ebro. Es la región más seca de la península (300 mm), disminuyendo las precipitaciones de norte a sur (180 mm en cabo de Gata). La escasez e irregularidad de las precipitaciones y la elevada temperatura tienen como consecuencia una elevada aridez, acentuada por el efecto Foehn de las cordilleras Béticas, que dificultan la llegada de las borrascas atlánticas, y por las masas de aire secas procedentes de África. 3.- El CLIMA CANARIO es diferente al clima del resto de España debido a su posición en una latitud subtropical (zona cálida), próxima al continente africano, y a la especial configuración de su relieve. La posición subtropical explica la moderación de las temperaturas todo el año, con escasa amplitud térmica (7ºC a 8ºC) y que el archipiélago esté gran parte del año bajo la influencia del anticiclón de las Azores, los vientos alisios y la corriente fría de Canarias, que generan una situación de gran estabilidad atmosférica con escasas precipitaciones, potenciado por la llegada de masas de aire sahariano, seco y caluroso. La configuración del relieve determina la variación del clima con la altitud. 4.- El CLIMA DE MONTAÑA. En todas las zonas de montaña se produce un descenso de las temperaturas (con medias anuales inferiores a los 10ºC) y un aumento de las precipitaciones que caen muchas veces en forma de nieve. El factor más

3 importante es la altitud, al que se suma la distinta exposición de las vertientes montañosas a los rayos solares (sola y umbría) y a los vientos (barlovento y sotavento). Este clima se manifiesta de distintas formas, puesto que el clima de montaña no representa más que una modificación con respecto al dominante en cada región, así las montañas incluidas en el clima oceánico no tienen ningún mes seco y presentan veranos frescos; las montañas del área mediterránea pueden tener uno o dos meses secos y su temperatura estival es más alta, el Teide necesita alcanzar más altitud para que se produzcan las precipitaciones....