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Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED)

Tema 7. LA TUTORÍA EN EDUCACIÓN SECUNDARIA

Dr. Ernesto López Gómez Dr. Santiago Castillo Arredondo 1

Contenido 1.

Presentación y contextualización ............................................................................ 3

2.

Introducción ........................................................................................................... 4

3.

Delimitación conceptual de la tutoría en secundaria................................................ 5 3.1. La tutoría en el contexto de las profesiones de ayuda.......................................... 5 3.2. Indagación terminológica y semántica................................................................ 5

4.

Modalidades o categorías de tutoría ....................................................................... 7 4.1. Tutoría académica: ............................................................................................ 7 4.2. Tutoría profesional-vocacional .......................................................................... 8 4.3. Tutoría personal ............................................................................................... 19

5.

Perfil y cualidades del profesor tutor .................................................................... 10

6.

Funciones, tareas y actividades para el desarrollo de la tutoría en secundaria ........ 12

7.

Dificultades en la práctica de la acción tutorial ..................................................... 16

8.

A modo de conclusión ......................................................................................... 17

9.

Bibliografía (referencias básicas) ......................................................................... 19

10. Preguntas de autoevaluación y reflexión ............................................................. 21 11. Anexo. Ejemplos de recursos para la tutoría en secundaria ................................. 22

2

1. Presentación y contextualización El tema que aquí se presenta aborda la tutoría en educación secundaria y constituye un pilar básico de la asignatura de Procesos y Contextos Educativos, complementario a otros temas ya desarrollados en el curso, especialmente los referidos a la comunicación en el aula y en el centro, el clima institucional, la atención a la diversidad y la inclusión. Su desarrollo se ha planteado para que el lector, profesor de secundaria en formación, pueda reflexionar en torno a su función como tutor así como, desde una perspectiva institucional, valore la relevancia que la tutoría y los procesos de orientación tienen en los centros educativos. El texto que se ofrece quiere ser una invitación a la reflexión sobre un tema de enorme calado formativo, con la pretensión de orientar la formación inicial del profesorado de educación secundaria y mejorar su práctica profesional. La premisa que se asume es que si las instituciones educativas de educación secundaria tienen un papel relevante en la educación de las jóvenes generaciones, la función tutorial del profesorado debe desempeñar un rol central desde el que articular los planes y programas que se desarrollan en las instituciones. Así, este tema pretende lograr los siguientes objetivos: 1) Analizar el concepto de tutoría y determinar sus modalidades en educación secundaria. 2) Comprender la figura del profesor-tutor como el eje de la acción educativa. 3) Entender la acción tutorial como parte inherente a la función docente. 4) Valorar el perfil y las cualidades más óptimas para el desarrollo de la función tutorial en educación secundaria. 5) Identificar y reflexionar sobre las funciones, tareas y actividades más relevantes para el desarrollo de la tutoría. 6) Conocer algunas de las dificultades que plantea la acción tutorial y proponer actuaciones que anticipen dichas dificultades. En consecuencia, el tema aborda los siguientes puntos fundamentales: -

Introducción general, a modo de presentación y situación de la temática.

-

Delimitación conceptual.

-

Modalidades o categorías de la tutoría.

-

Perfil y cualidades del tutor.

-

Funciones, tareas y actividades para el desarrollo de la tutoría en secundaria.

-

Dificultades en la práctica de la acción tutorial.

-

Conclusiones finales y preguntas de autoevaluación y reflexión orientadas al desarrollo de la competencia tutorial docente. 3

2. Introducción Los marcos institucionales y la legislación de cada contexto establecen unos parámetros bastante claros para definir y concretar la función tutorial. No obstante, la literatura científica y los programas de acción tutorial llevados a cabo pueden ofrecer un perfil de funciones, actividades, técnicas e instrumentos para el desarrollo de la tutoría en educación secundaria. En este punto, consideramos de interés conocer cómo se ha desarrollado la tutoría en la etapa de secundaria en el contexto del sistema educativo español, dado que su estudio resulta un aprendizaje relevante para conocer los antecedentes fundamentales de esta realidad en la educación secundaria. Así, desde que se sucediera la honda reforma estructural en el sistema educativo español propiciada por la Ley Orgánica de Ordenación General del Sistema Educativo, a lo largo de los años noventa, han sido diversos los temas que han suscitado interés en investigación pedagógica. Uno de estos temas, la tutoría, fue tratado en aquella época con especial profundidad por distintos académicos e investigadores (Álvarez y Bisquerra, 1996; Asensi, 2002; García Nieto, 1990, 1996; Lázaro, 1997; López, 1996; Pastor, 1995). Destacamos también los monográficos dedicados a esta temática o afines por Revista Complutense de Educación en 1996 y Revista Interuniversitaria de Formación del Profesorado y Educación XX1 en 1997, que consolidaron la línea de investigación tutorial y orientadora sobre la base de los trabajos clásicos sobre la disciplina (Artigot, 1973; González, 1975; Lázaro y Asensi, 1987) y otros que encontramos en el número dedicado por Bordón en 1978. En este sentido, se recomienda al estudiante la consulta de algunos de estos trabajos clásicos que se encuentran en la lista de referencias para entender el rumbo y la evolución de la tutoría en el sistema educativo español. La presencia de la tutoría y singularmente del tutor, así como de sistemas de apoyo y orientación a los estudiantes toma como base la idea de que la misión de la escuela no es sólo instruir a los alumnos, sino hacer posible que la educación cumpla con su objetivo de lograr el desarrollo integral del ser humano. Así, “la tutoría se convierte en una herramienta de la que disponen los centros educativos y los propios docentes, para mejorar sustancialmente la calidad de los procesos educativos. Sin embargo, se concede mayor importancia a la tarea académica que a la formativa de la persona” (León y Fernández Díaz, 2019, 526). Pero la tutoría supera también la propia relación educativa entre profesorado y estudiantes y se sitúa como un medio necesario al servicio de la comunidad, favorecedora de las relaciones del centro educativo y familias así como la mejora de los procesos de convivencia, el clima de aula y de centro (Rodríguez Ruiz et al., 2019). En este sentido el profesorado, “tradicionalmente” responsable sólo de la instrucción, están llamados a ejercer también de orientadores de los estudiantes en la búsqueda de su desarrollo integral. Precisamente por ello, se identifica la acción educativa con la acción 4

tutorial como un todo en la práctica docente. Docencia y tutoría constituyen un inseparable binomio, son inherentes (López-Gómez, 2013; Álvarez González, 2017). Así, para avanzar en el tema se procede a delimitar conceptualmente la tutoría para la etapa de secundaria.

3. Delimitación conceptual de la tutoría en secundaria. Nos aproximaremos al estado de la cuestión desde una doble perspectiva. En primer lugar desde una metáfora que sitúa al quehacer docente dentro de las profesiones de ayuda, y en segundo lugar a partir de un acercamiento terminológico y semántico que ofrezca luz sobre el significado de tutor (López-Gómez, 2013). 3.1 La tutoría en el contexto de las profesiones de ayuda Situamos a la tutoría como el núcleo de una relación educativa entre profesor y estudiantes, especialmente, aún conscientes de que los niveles de intervención y los destinatarios pueden ser también las familias y el conjunto de la comunidad educativa. En definitiva la educación y más concretamente la tutoría es una relación que se establece entre personas en la que una de ellas, metafóricamente, rescata a la otra. Pero el auténtico maestro, o en este caso tutor, sabe que esa ayuda es transitoria; una vez “rescatado” (léase orientado, ayudado), el alumno ha de caminar solo. Así cada año, cada curso, la vida se lleva de las manos del educador, del profesor, en definitiva del tutor, a “sus” estudiantes y al curso siguiente tiene que comenzar de nuevo, con otro grupo, una tarea de conocimiento, de relación y de trabajo. Es un tejer y destejer incesante que acompaña al profesor a lo largo y ancho de su vida docente (Santos Guerra, 2009, 366). En efecto, la función del profesor –y del tutor – es trágica; tras un pequeño tiempo esos alumnos se marchan y al profesor –tutor únicamente le queda la recompensa del trabajo bien hecho y el consuelo de que otros alumnos llegaran, pronto, con el comienzo de un nuevo curso. 3.2 Indagación terminológica y semántica Tutor, según la Real Academia Española (2001) significa: “persona que ejerce la tutela”; entendiendo tutela como “autoridad que en defecto de la paterna o materna se confiere para curar de la persona y los bienes de aquel que por minoría de edad, o por otra causa, no tiene completa capacidad civil”. En otra acepción cercana a nuestro tema, tutor es el “rodrigón, caña o estaca que se clava junto a un arbusto para mantenerlo derecho en su crecimiento”. En efecto, el rodrigón es el tutor, es la vara que colocamos en paralelo y que además de sujetar a la planta en sus vaivenes le muestra el camino recto de su crecimiento. En educación, el tutor, a diferencia del rodrigón, se presta de guía y no está anclado al alumno ya que un rasgo esencial de la persona es la libertad (Reyero, 2003). 5

Además de rodrigón, otro sinónimo de tutor es mentor, definido primeramente como “consejero o guía de otro”, en clara alusión a Méntor –personaje de la Odisea, hijo de Álcimo y amigo de Ulises–, que guío e instruyó a Telémaco (Lázaro, 2010) y, en segundo lugar, como aquel que “sirve de ayo”, entendiendo ayo como la “persona a cuyo cuidado está el criar, educar e instruir algún niño en buenas costumbres y modo civil” (Albar, 2005, 1000). Finalmente, tutor es el “defensor, protector o director en cualquier línea”, significado que queda reforzado si atendemos a la raíz etimológica, donde intueri deriva de tueri, que además de “mirar” significaba “proteger”; de ahí tutor, ( -ōris), “protector” (Corominas y Pascual, 2007, 450). Ser tutor, en definitiva, significa siempre protección y cuidado, orientación y guía, que en la situación educativa dota de especial sentido a la tarea de ser profesor. El concepto de tutoría se circunscribe en los modelos de educación personalizada como respuesta a la necesidad de apoyar los procesos educativos, no solamente con actividades del tipo didáctico convencional, sino abordando también el conjunto de la persona del individuo en sus diferentes facetas. Así, la tutoría trata de acompañar a los sujetos en los procesos de toma de decisiones desde lo puramente académico hasta lo profesional, sin obviar su incidencia en el desarrollo personal. Por otra parte, se denomina tutoría al espacio y al encuentro o reunión entre un docente y uno o varios de los estudiantes con la finalidad de intercambiar información, analizar, orientar o valorar un problema o proyecto, debatir un tema, o discutir un asunto de utilidad para el desarrollo personal, académico y profesional de un estudiante o aprendiz. El concepto de tutoría engloba en sí mismo determinados aspectos, desde los meramente informativos hasta aquellos que se pueden considerar más prácticos como son las muchas tareas de las actividades tutoriales. En definitiva, se puede definir la tutoría en los siguientes términos (destacándose los elementos claves en el énfasis añadido): La tutoría consiste en un proceso de ayuda y acompañamiento durante la formación de estudiantes que se concreta mediante la atención personalizada a una persona o a un grupo deseablemente reducido de ellas, por parte de profesores o maestros competentes formados para la función tutorial. De la definición anterior se puede concluir que la tutoría es un proceso de acompañamiento de tipo personal y académico para mejorar el rendimiento, solucionar problemas de aprendizaje, desarrollar hábitos de estudio, trabajar formas de ser y actuar valiosas, de trabajo y de reflexión, de convivencia social o de iniciación al mundo laboral. Estos atributos también han sido destacados por autores como Álvarez y Bisquerra (1996), quienes definen la tutoría como una acción sistemática y personalizada, específica y concretada en un tiempo y un espacio en la que el alumno recibe una especial atención, ya sea individual o grupalmente. 6

Con todo, cabe indicar que el concepto de tutoría implica consideraciones como las siguientes: - Constituye un proceso continuo, no puntual. - Se desarrolla de forma activa y dinámica. - Debe estar planificada sistemáticamente. - Supone un proceso de aprendizaje. - Requiere la colaboración de todos los agentes educativos. - El currículum escolar debe ser el marco para su desarrollo. - Perspectiva interdisciplinar. - Debe propiciar el desarrollo personal.

La acción tutorial constituye en el contexto académico un elemento inherente a la actividad docente dentro de una visión integral de la educación. Entraña una relación individualizada con la persona del educando en la estructura de los procesos de la enseñanza y del aprendizaje, y la dinámica de sus actitudes, aptitudes, conocimientos e intereses. El concepto de tutoría encierra en sí mismo unos valores de dinamismo, apertura, actitud de servicio, capacidad de ayuda, entre otros. Es la ocasión en la que el profesor, y cualquier formador en general, tiene la oportunidad de dar lo mejor de sí y ponerse a disposición de quien necesita de su orientación. A pesar de ser una actividad sublime y apasionante, no está exenta de dificultades que se presentan desde distintos ángulos, como así se indicará después.

4. Modalidades o categorías de tutoría De las claves conceptuales anteriores se derivan una cierta pluralidad de modalidades o categorías de la tutoría que si bien han sido nominadas de distintas maneras, se sintetizan a continuación las fundamentales para la etapa de secundaria. No obstante, cabe destacar que aunque hablemos de modalidades de tutoría estas no deben desarrollarse de forma parcelada, más bien han de vincularse y desarrollarse de modo sinérgico para el logro efectivo del desarrollo integral pretendido en la educación secundaria. 4.1 Tutoría académica: Se entiende esta modalidad de tutoría como un medio para acceder a nuevos conocimientos o para complementar los aprendizajes ofrecidos en el marco de los procesos de enseñanza-aprendizaje. Desde este punto de vista se concibe la tutoría como la actividad académica que permite la comunicación entre tutor-estudiante sobre los 7

aprendizajes del curso. Permite al profesor identificar el logro de los conceptos básicos y la consecución de los aprendizajes esperados. Así, con esta actividad académica, ya sea individual o grupal, se pueden detectar las dificultades y logros que tienen los estudiantes en sus aprendizajes; de este modo, la acción tutorial puede desarrollar mejor la función de aclarar y orientar a los estudiantes en los temas de su desarrollo curricular. La tutoría académica tiene mucho que ver con la orientación didáctica sobre el trabajo de cada estudiante y permite repensar a cada uno sus logros formativos así como adecuar sus acciones cuando estas se desvíen de sus intenciones de aprendizaje. Tiene que ver mucho con la retroalimentación, el feedback formativo que se ofrece al generar un espacio para compartir y estimar los aprendizajes alcanzados. En este sentido la tutoría es un momento óptimo para presentar inquietudes y aclarar dudas donde el tutor define su acción de enseñanza proporcionando estrategias y métodos para posibilitar el mejor aprendizaje de cada estudiante. De acuerdo con Justel (2017), la tutoría académica permite: diagnosticar dificultades de aprendizaje y poner los medios para resolverlas, facilitar los procesos de aprendizaje del estudiante desde la personalización de la enseñanza, implicar y motivar al estudiante y potenciar las competencias clave, especialmente la competencia de aprender a aprender. En definitiva, esta modalidad, categoría o dimensión de la tutoría se centra básicamente en los procesos de enseñanza, en los cuales se le da una función clave al tutor. Se enfatiza la acción de la enseñanza subrayando el papel del tutor sobre el desarrollo de los procesos de aprendizaje de los estudiantes.

4.2 Tutoría profesional-vocacional: La tutoría profesional o vocacional constituye un eje fundamental de los procesos de orientación en la etapa de educación secundaria, dado que está llamada a ayudar a que cada estudiante descubra en su proyecto personal, la profesión o itinerario formativo hacía el que quiere orientarse. En efecto, una de las finalidades de educación secundaria es la de preparar al alumnado para la incorporación a la vida activa. Por este motivo, es imprescindible ofrecer una adecuada orientación, sobre todo en los momentos clave (4º de ESO y 2º Bachillerato), donde el alumnado debe afrontar un proceso de toma de decisiones de gran trascendencia, en el que ha de elegir la trayectoria educativa más adecuada (Domínguez et al., 2013; Bereziartua et al., 2017) y, a su vez, dotarlo de las herramientas y competencias necesarias para garantizar su incorporación efectiva a la sociedad, al mundo laboral (Álvarez Justel, 2017). Se trata, en definitiva, que cada estudiante descubra los motivos que permiten proyectar su futuro hacía ámbitos profesionales (o académicos) de interés, orientando la formación necesaria para dar sentido a las expectativas o preferencias identificadas. El 8

profesorado tutor (en coordinación con el Departamento de Orientación y bajo la previsión del Plan de Acción Tutorial, PAT), debe ayudar al alumnado a conocerse a sí mismo, a buscar opciones para después de la ESO, bachillerato y/o ciclos formativos, a decidir y configurar su itinerario académico y profesional. Para ello, es importante que el estudiante sea capaz de reconocer sus potencialidades, habilidades o destrezas, para lo que resulta clave que el profesorado y singularmente el tutor genere espacios de reflexión compartida y situaciones formativas en la que cada estudiante pueda descubrir sus intereses, aprenda a conocerse, valore sus potencialidades, descubra sus inquietudes formativas, etc. Cada estudiante necesita saber o descubrir qué quiere ser, qué quiere hacer con su vida, a qué quiere dedicarse, y por ello debe saber quién es y cómo es, qué le apasiona, qué se le da bien, etc., conseguir la información que necesita sobre las diferentes opciones tanto académicas como profesionales existentes y lanzarse a tomar decisiones importantes para su futuro. Para ello, necesita que alguien le acompañe en este proceso de descubrimiento personal y profesional. En este caso, el tutor es quien mejor puede hacer este acompañamiento, orientación y preparación del alumnado para afrontar sus trayectorias tanto académicas como profesionales y conseguir sus objetivos (Álvarez Justel, 2017; Álvarez González, 2017). Así, el apoyo del tutor ha de incidir en la ayuda a elegir el camino previsiblemente más adecuado que ha...