Carpeta Masacre de Villa Ramallo PDF

Preview

Summary

Carpeta de casos policiales obligatorios...

Description

MASACRE DE VILLA RAMALLO En la mañana del 16 de septiembre de 1999, una banda integrada por los asaltantes Javier Hernández, Carlos Martínez y Tito Saldaña entró a la sucursal del Banco Nación en Villa Ramallo a las 10 de la mañana con la intención de robar el dinero del lugar. Para hacerlo, aprovecharon la entrada de un correo y se encerraron en el lugar donde tomaron varios rehenes, entre los que se destacaban el gerente del establecimiento, Carlos Chaves, su esposa, Flora Lacave, y el contador del banco, Carlos Santillán. El objetivo de los maleantes era robar la recaudación del Banco, que, según dicen, era de $30000 más unos $100000 en el tesoro. Por ello, comenzaron negociaciones ue duraron toda la jornada para conseguir la llave y clave de este último. Entre las 4 y 5 de la mañana del 17 de septiembre, los delincuentes trataron de escapar del banco junto a los tres rehenes a bordo de un Volkswagen Polo verde. Chaves, el gerente, iba al volante. Esa era la táctica para salir ilesos del lugar. Pero nada salió como esperaban: al menos un centenar de policías apostados en las veredas y techos de las casas vecinas los fusilaron. A lo largo de los 112 metros que duró el intento de escape, el vehículo recibió 35 disparos de fusiles, ametralladoras y escopetas Itaka. Chaves, Santillán y Hernández murieron, Lacave y Martínez resultaron heridos y Saldaña salió ileso. Si bien la negociación estuvo a cargo del juez federal de San Nicolas, Carlos Villafuerte Rizzo, no se pudo dictaminar con precisión quién dio la orden del fuego. Este fue un caso emblemático en la representación de la negligencia policial. Y a eso se suman diversas sospechas de conspiración disparadas por la muerte del asaltante Tito Saldaña horas después de la detención. El criminal apareció colgado en la celda donde estaba recluído, en lo que en primera instancia pareció un suicidio, aunque luego los peritos desmintieron esa posibilidad. Estas confirmaron que Saldaña fue víctima de un brutal golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente y, seguido, fue estrangulado con un complicado nudo del tipo “as de guía”. Debido a la complejidad del caso, donde la Justicia diferencia el robo al banco y la muerte de los rehenes, hubo dos juicios en los años siguientes: en primer lugar, en septiembre de 2002, el Tribunal Federal N°1 de Rosario, integrado por María Laura Cosidoy, Otmar Paulucci y Santiago Harte, condenó a Carlos Martínez a 24 años de cárcel por el delito de “homicidio en tres oportunidades en ocasión de robo, privación ilégitima de la libertad en seis oportunidades, una de ellas agravada por ser mujer, y tenencia de armas de guerra y explosivos”. El único delincuente sobreviviente del robo al banco tuvo la pena más alta de todas. Además de esa condena, el tribunal federal

impuso otras penas a gente que estuvo involucrada en el exterior del banco: 15 años de prisión a Jorge Aguilar, un vecino de Martínez sospechado de haberle entregado a la banda un pan de trotyl que terminó colgado del cuello de Carlos Chaves al salir del banco, 14 años a Monica Saldaña, hermana de unos de los delincuentes fallecidos y 13 años a Norberto Céspedes, Oscar Mendoza y la remisera Silvia Vega. Estos últimos fueron enjuiciados por “privación ilegítima de la libertad en seis oportunidades, una de ellas agravada, y el robo calificado en grado de tentativa”. Por otro lado, el mismo Tribunal Oral, pero en diciembre de 2004, dictó condenas para los policías involucrados en la masacre que sucedió al robo al Banco: el ex suboficial de la policía bonaerense, Oscar Parodi, le dieron 20 años al encontrarlo culpable de la muerte del gerente de la sucursal Villa Ramallo del Banco Nación, Carlos Chaves; al ex sargento del disuelto Grupo Especial de Operaciones (GEO) de ZárateCampana, Ramón Leyva, le dieron 18 años por el homicidio simple del contador Carlos Santillán; por la comisión del delito de homicidio en grado de tentativa, fueron condenados el ex cabo del GEO Zárate-Campana, Carlos Aravena, a 10 años de prisión, mientras que el ex cabo primero de la misma fuerza, Ramón Darío Sánchez, y el ex cabo primero del Grupo Halcón, Sergio Susperreguy, fueron penados con seis años de prisión; por último, el ex sargento del ex Grupo de Infantería de Zárate-Campana, Sergio Garea, fue condenado a dos años de prisión en suspenso por el delito de abuso de armas y el comisario inspector de la DDI de San Nicolás, Omar Isaías, recibió la misma pena por violación de los deberes de funcionario público, al no haber brindado seguridad en la escena del crimen....