Heridas por armas de fuego -1584338202 PDF

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ADVERTENCIA A LOS ALUMNOS El material de lectura de esta asignatura contiene imágenes impresionables y susceptibles de provocar diferentes reacciones emocionales, según las distintas sensibilidades de los lectores. No obstante ello, estas imágenes revisten finalidad pedagógica y son meramente ilustrativas del tipo de evidencias probatorias que aportan los profesionales de esta disciplina al proceso penal. Debemos aclarar que, usualmente, las evidencias en el proceso penal están constituidas por elementos sensibles significativos, que en primera instancia deben ser identificados por profesionales que se desempeñan en la investigación de la escena del crimen. A fin de lograr una adecuada captación del material sensible, los futuros egresados de esta carrera deben estar debidamente ejercitados para estos menesteres. Asimismo, se recomienda a los alumnos proteger a niños y adolescentes menores de edad del acceso a esta información.

Heridas por armas de fuego Se entiende como heridas por armas de fuego a aquellas lesiones que son producidas por el disparo de armas que presentan una carga con diversos tipos de pólvora o por explosivos. A los fines del perfil que se busca en la presente carrera, y con el objeto de no hacer una lectura demasiado extensa, sólo se realizarán en este apartado las consideraciones necesarias desde el punto de vista médico-legal que te permitan realizar una interpretación de las descripciones que se realizan en los informes médicos sobre las heridas que se producen. La ciencia que se ocupa de la descripción de todo lo referente a las armas de fuego es la balística, y dentro de esta se pueden distinguir las siguientes ramas: balística interior, balística exterior y balística de efecto. Desde el punto de vista médico-legal, se estudia la balística de efecto, la cual refiere las características que presentan las heridas que se producen en el cuerpo, mientras que la balística interior estudia lo referente a la conformación de las armas de fuego, y la balística exterior estudia el comportamiento que tienen los proyectiles al abandonar el arma; estas dos últimas ramas son abordadas por la materia Balística de la carrera, por lo que no serán consideradas en esta materia.

Tipos De manera general, las podemos dividir en dos tipos: a) Las que son producidas por armas de fuego de proyectil único (pistolas, revólveres, carabinas, etc.), y b) las que son producidas por armas de proyectil múltiple (escopetas). Médico y legalmente, en las heridas de arma de fuego se describen el orificio u orificios de entrada, el trayecto y el orificio de salida (cuando existe).

Orificio de entrada El orificio de entrada de los proyectiles de arma de fuego constituye la zona que mayores datos nos puede aportar en la investigación del hecho que se trata. Desde la descripción médica, el mismo se denomina como herida perforante, o penetrante, o contuso perforante. Esta herida es, habitualmente, de forma redondeada u oval, siendo excepcionalmente de forma circular, debido a la elasticidad que presenta la piel (lo cual se verá un poco más en detalle al tratar heridas de arma blanca). Esta particularidad hace que normalmente el orificio de entrada sea de menor diámetro que el calibre de la bala que lo produjo. Al producirse el disparo del arma, salen por la boca del cañón, además del proyectil disparado, gases de explosión, llama, granos de pólvora a medio combustionar y humo (en los casos de disparos de escopeta, se agrega además el taco que tiene el cartucho que utiliza), los que de acuerdo con la distancia a la cual se encuentra la persona de la boca de fuego (y a la presencia de ropa o no en la zona impactada), producen una serie de signos en el área donde se recibe el disparo. El signo que produce el proyectil al ingreso al cuerpo se denomina halo de Fish, este signo se encuentra constituido por el halo contusivo (que es la excoriación y equimosis que se produce alrededor del orificio de entrada, como consecuencia de la contusión y perforación de la piel por el proyectil) y el halo de enjugamiento (que es la suciedad que presenta el proyectil, y que se deposita en la piel de alrededor del orificio al penetrar en el cuerpo, y que le otorga a los bordes de este un colorido negruzco). Los granos de pólvora incandescentes se incrustan en la piel, produciendo en los alrededores de la herida pequeñas quemaduras puntiformes a las cuales se las denomina tatuaje verdadero (porque no pueden ser removidas con el lavado), mientras que el humo deja una mancha de color negruzco, denominada ahumamiento o falso tatuaje (porque puede ser removido con la limpieza de la zona). La llama que sale de la boca del arma produce el chamuscamiento de los pelos y la piel en la zona. La presencia o no de todos o algunos de estos signos permite dividir a los orificios de entrada, de acuerdo con la distancia en que se produjeron, en: disparos de contacto o a boca de jarro, disparos de muy corta distancia o a quemarropa, disparos de corta distancia, y disparos de media y larga distancia.

Figura 1

Fuente: Verdú, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/BLeNv4

Disparo de contacto o a boca de jarro: en este caso, la boca de fuego del arma se encuentra en contacto con la piel, aquí todos los elementos que van a salir del cañón se introducen al interior del cuerpo por el orificio de entrada. En aquellos casos en los cuales por debajo de la piel se encuentra una superficie dura (hueso), como es el caso del cráneo, se van a producir una serie de signos (tanto externos, como internos) que nos van a permitir establecer la distancia a la que se efectuó el disparo. Estos signos son: a nivel externo, la denominada boca de mina de Hoffman, y en ocasiones, el signo de Puppe Werkgartner; y a nivel interno, el signo de Benassi. El primero se produce como consecuencia del rebote de los gases en la superficie ósea subyacente a la piel, determinando el retroceso de los mismos y produciendo un orificio de entrada irregular (estrellado) y de mayor tamaño que el calibre del proyectil. El segundo (Puppe) es la marca del cañón del arma en la piel por acción termo mecánica. El tercero (Benassi) se corresponde al ahumamiento de la tabla externa del hueso, este signo tiene el valor, además, de permitir establecer en cadáveres en estado de descomposición, o aun esqueletizados, la cercanía del disparo, ya que el mismo no desaparece con el tiempo.

Imagen 16

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/Jsenre

Signo de boca de mina de Hoffman

Imagen 17

Fuente: Cárceles de Costa Rica, s.f., Recuperado de: http://goo.gl/sVza6d

Signo de Puppe Werkgartner. Impronta del cañón del arma.

Imagen 18

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/MTCQc3

Signo de Benassi. Ahumamiento en tabla externa del hueso.

Disparo a muy corta distancia o disparo a quemarropa: es aquel en el cual el arma se encuentra a una distancia no mayor al alcance de la llama que sale del arma. En este tipo de orificios de entrada, se observa muy concentrado alrededor del orificio la impronta del humo (ahumamiento o pseudotatuaje) y la de los granos de pólvora (tatuaje verdadero), junto con la quemadura que determina la llama. Si bien la distancia varía de acuerdo con el tipo de munición y arma empleada, estamos hablando de distancias de escasos centímetros.

Imagen 19

Fuente: elaboración propia.

Herida de arma de fuego a quemarropa o muy corta distancia.

Disparo a corta distancia: son aquellos que se producen a una distancia inferior al alcance que tienen el humo y los granos de pólvora incandescentes. Esto va a determinar que la herida, además de los signos propios del ingreso del proyectil, presente a su alrededor, en forma más o menos dispersa, los signos que dejan el humo (ahumamiento) y los granos de pólvora (tatuaje), lo cual permite, de acuerdo con la mayor o menor dispersión de los mismos (pudiendo faltar el ahumamiento), determinar una mayor o menor corta distancia de producción (actualmente, el tipo de pólvora utilizada en los cartuchos tiene una distancia aproximada de entre 60 y 70 cm de alcance de los granos de pólvora, y una distancia menor de alcance del humo).

Imagen 20

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/k67KN0

Ahumamiento o falso tatuaje.

Imagen 21

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/iSXfYt

Tatuaje verdadero, cadáver que ha sido higienizado. Disparos de media y larga distancia: son aquellos que se producen desde una distancia mayor al alcance que tienen todos los elementos que salen por la boca de fuego del arma, excepto el proyectil. Es por esta razón que el orificio de

entrada en estos casos presenta únicamente los signos que deja el ingreso del proyectil, es decir, el halo de Fish.

Imagen 22

Fuente: elaboración propia.

Orificio de entrada con halo de Fish Cuando entre la piel y la boca del arma existe algún elemento que se interponga, como por ejemplo, la ropa que tenga puesta la víctima, todos los signos elementos descriptos en los diferentes disparos mencionados quedan en la superficie que se interpone (tatuaje, ahumamiento, quemadura y enjugamiento del proyectil), por lo que en el cuerpo de la víctima únicamente se podrá observar el halo de contusión.

Imagen 23

Fuente: elaboración propia.

Halo de contusión en orificio de entrada de proyectil de arma de fuego en víctima que se encontraba con ropa en la zona del impacto.

En estos casos, resulta importante un buen examen de la vestimenta, ya que podemos observar los signos del chamuscamiento de la tela, el deshilachamiento hacia adentro a nivel del orificio de entrada. En el caso de las heridas de armas de fuego de proyectil múltiple (escopeta), se va a observar en la zona de impacto un orificio de entrada por cada uno de los elementos que integra la carga del cartucho, lo cual va a variar en lo referente a la dispersión que presenten en el lugar de impacto de acuerdo con la distancia en que se haya efectuado el disparo. El grado de dispersión que presenten, junto con la presencia o no de los otros elementos descriptos que salen de la boca del arma al producirse el disparo, sirven para establecer la distancia a la que se produjo el disparo.

Imagen 24

Fuente: Reyes Ramos, s.f. recuperado de: http://goo.gl/rqaVA8

Herida de arma de fuego de proyectil múltiple (escopeta).

En el caso de las escopetas, cuando el disparo es de contacto, o se efectúa a muy corta distancia, los proyectiles que integran el cartucho no llegan a dispersarse, penetrando todos juntos en el cuerpo junto con el taco que presenta el cartucho, esta situación produce un único orificio de entrada, lo que se denomina efecto bala.

Imagen 25

Fuente: elaboración propia.

Efecto bala. Suicido con escopeta

Orificio de salida Descripto médico y legalmente como una herida contusa, es inconstante, ya que no se encuentra cuando el proyectil no sale del cuerpo. En general, es de características irregulares, tanto en forma como en tamaño, ya que depende de la deformación que haya sufrido el proyectil en su paso por el cuerpo, o el arrastre que produzca de determinados elementos anatómicos que haya podido lesionar (esquirlas óseas). En líneas generales, carecen de cintilla contusiva, y no presentan nunca los signos propios de los otros elementos del disparo (tatuaje), lo cual constituye el principal elemento de diagnóstico. Suele presentar sus bordes evertidos con salida de tejido celular subcutáneo.

Imagen 26

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/2wYKqe

Orificio de salida de proyectil de arma de fuego

Trayecto Lo constituye el recorrido que realiza el proyectil dentro del cuerpo hasta su salida (cuando esto ocurre) o hasta el lugar en que el mismo se detuvo. Este trayecto puede ser recto cuando no sufre desviaciones en el interior del cuerpo, o con desviaciones cuando, por choques habitualmente con huesos, sufre una alteración en su recorrido rectilíneo, por lo que se pueden observar grandes alteraciones en el mismo.

Figura 2

Fuente: Malthus, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/YoiBhR

En la necropsia, el trayecto se reconoce a partir de una línea sanguínea que se observa en el paso del proyectil, que se produce porque la cavidad que se genera al paso de este se llena de sangre. Distinguiéndose el orificio de entrada a nivel orgánico por la producción de una hemorragia en la zona.

Imagen 27

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/Mw3B0x

Hemorragia periorificial en pulmón. Orificio de entrada al órgano. En los casos en que el proyectil continúe alojado en el cuerpo, y con el objeto de realizarse las pericias balísticas correspondientes, es necesario la recuperación del mismo al realizarse la necropsia. Para facilitar el hallazgo de este en el cuerpo, dado que en ocasiones el proyectil suele quedar alojado en lugares increíbles, se le realizan al cadáver tomas radiográficas que nos ayudan a localizarlo.

Imagen 28

Fuente: Galvão, s.f. Recuperado de: http://goo.gl/gw3sEF

Herida de arma de fuego en cráneo. Las flechas violetas muestran el trayecto del proyectil. La flecha roja la localización final del proyectil.

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