Oración a San José - SAN JOSE PDF

Title Oración a San José - SAN JOSE
Author Marcela Rios
Course Español
Institution Universidad Cooperativa de Colombia
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Summary

SAN JOSE...


Description

Oración a San José

Oh, San José, cuya protección es tan grande, tan fuerte, tan cerca frente al trono de Dios, deposito en ti todos mis intereses y todos mis deseos. Oh, San José, asísteme por tu poderosa intercesión y obtén para mí todas las bendiciones espirituales a través de tu hijo adoptivo, Jesucristo Nuestro Señor, de manera que, habiéndote comprometido aquí en la tierra debajo de tu poder celestial, yo pueda ofrecerte mi agradecimiento y homenaje. Oh, San José, nunca me canso de contemplarte a ti y a Jesús dormido en tus brazos. No me atrevo a acercarme mientras él reposa junto a tu corazón. Abrázalo en mi nombre y dale un beso en su cabecita por mí, y pídele que me devuelva el beso cuando suelte mi último aliento. Amén Sobre la oración: Hay infinidades de oraciones a San José, pero existe en ésta algo muy especial: el lenguaje sencillo de alguien que reconoce en San José, el fruto de ser el más grande de los santos por su pobreza, obediencia y castidad. Es el anhelo de gozar con el favor del Santo Guardián del Dios Hombre, de la familia y, por ende, de la Iglesia. Es la seguridad de que, si salvó humanamente al Salvador, con su intercesión es garantía de la realización de la divinidad de la humanidad de quien se acoge a su protección. Sobre la imagen: Es la figura paternal de San José cargando al niño Jesús mientras María descansa agotada después del parto. Una imagen muy humana de María confiándole el niño a José para que ella pueda recuperar sus fuerzas. Es en definitiva un preludio a lo que Dios Padre mismo le confiaría a San José: su Sagrada Familia. ¡Qué imagen tan humana!… la humanidad de José y Maria, y el anhelo de un Dios buscando el amor en esa humanidad haciéndose realidad. José al cargar al niño, no pensaba en la gran responsabilidad, sino en la Gracia de ser el padre adoptivo. Es la grandeza de tener a Dios mismo en brazos en forma de un inocente y vulnerable niño, acomodándose en el calor corporal de su papá terrenal, y escuchar los latidos de un corazón, más que agradecido, agraciado....


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