Capitulo 3 Las actitudes y la satisfacción en el trabajo PDF

Title Capitulo 3 Las actitudes y la satisfacción en el trabajo
Author Marco Naula Sanchez
Course Gestión de la Producción
Institution Escuela Superior Politécnica de Chimborazo
Pages 13
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Capitulo 3 Las actitudes y la satisfacción en el trabajoActitudes(EAGLY, 1993) Una actitud es una tendencia psicológica que se expresa al evaluar una entidad particular con algún grado de aprobación y desaprobación(ALLPORT, 1954) Una estado de disposición mental y nerviosa, organizado mediante la ex...


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Capitulo 3 Las actitudes y la satisfacción en el trabajo Actitudes (EAGLY, 1993) Una actitud es una tendencia psicológica que se expresa al evaluar una entidad particular con algún grado de aprobación y desaprobación (ALLPORT, 1954) Una estado de disposición mental y nerviosa, organizado mediante la experiencia, que ejerce un influjo directivo dinámico en la respuesta del individuo a toda clase de objetos y situaciones. (ROBBINS, 2009) Las actitudes son enunciados de evaluación –favorable o desfavorable– de los objetos, personas o eventos. Reflejan cómo se siente alguien respecto de algo. Cuando digo “me gusta mi trabajo”, expreso mi actitud hacia el trabajo. (REA, 2014) Disposición de ánimo manifestada de algún modo. Autores Comportamiento regular ocasionado por diferentes circunstancias, las actitudes suelen ser innatas o adquiridas para sentir y actuar de manera predispuesta. 3.1 ¿Cuáles son los tres componentes principales de las actitudes? Ha sido muy común que los investigadores supongan que las actitudes tienen tres componentes: cognición, afecto y comportamiento. A continuación se estudiará cada una de estos. La afirmación “mi salario es bajo”, es una descripción. Es el componente cognitivo de una actitud, aspecto que es una descripción de ésta o la creencia de cómo son las cosas. Sitúa el escenario para la parte más crítica de una actitud, su componente afectivo. El afecto es el segmento emocional o sentimental de una actitud, y se refleja en el enunciado: “Estoy enojado por lo poco que me pagan”. Por último, más adelante en esta sección lo estudiaremos con detalle, el afecto conduce a eventos del comportamiento. El componente del comportamiento de una actitud se refiere a la intención de comportarse de cierta manera hacia alguien o algo (para continuar con el ejemplo: “Vo a buscar otro empleo donde me paguen mejor”). Concebir que las actitudes tienen tres componentes –cognición, afecto y comportamiento– es útil para entender su complejidad y la relación potencial entre ellas y el comportamiento. Tenga en mente que estos componentes se relacionan estrechamente. En particular, la cognición y el afecto son inseparables de muchos modos. Por ejemplo, imagine que concluyó que alguien lo acaba de tratar en forma injusta. ¿No es probable que albergue sentimientos al respecto, que ocurren virtualmente de manera instantánea con el pensamiento? Así, la cognición y el afecto están entrecruzados. En las organizaciones, las actitudes son importantes debido a su componente de comportamiento. Si, por ejemplo, los trabajadores creen que los supervisores, auditores, jefes e ingenieros de tiempos y movimientos conspiran para hacer que los empleados trabajen más por el mismo salario o menos, tiene sentido tratar de entender cómo se formaron estas actitudes, su relación con el comportamiento en el puesto real y el modo en que podrían cambiarse. (ROBBINS, 2009)

Ilustración 1 Los componentes de una actitud

Los seres humanos tenemos actitudes hacia muy diversos objetos y situaciones y símbolos, por ejemplo, hacia el aborto, la política económica del país, la acreditación, los sistemas de evaluación, los modelos pedagógicos, los diferentes grupos étnicos, la Ley, etc. Las actitudes están relacionadas con el comportamiento que mantenemos en torno a los objetos a que hacen referencia. Si mi actitud hacia la política de acreditación curricular es favorable, lo más seguro es que participaré en su desarrollo e implementación en la U. Si mi actitud es desfavorable a cierto candidato presidencial, lo más probable es que no vote por él en las próximas elecciones. Las actitudes son sólo un “indicador” de la conducta pero NO la conducta. Es por ello, que las mediciones de actitudes deben interpretarse como “síntomas “o como indicios y no como hechos. Por ejemplo, si se detecta que la actitud de un grupo hacia la contaminación es desfavorable, esto no significa que las personas están adoptando acciones para evitar la contaminación, pero si es un buen indicador que pueden irlas adoptando paulatinamente. CARACTERÍSTICAS DE LAS ACTITUDES: 1. Dirección: positiva o negativa; favorable o desfavorable 2. Intensidad: alta o baja LAS ACTITUDES SE PUEDEN REFERIR A OBJETOS Y A SITUACIONES:  Los objetos son: personas o grupos de personas, instituciones, organizaciones, minorías o mayorías políticas, raciales, religiosas y a problemas de discusión.  Las situaciones son: comportamientos específicos de los referidos objetos. Ejemplificación: Una cosa es la actitud hacia una religión y otra cosa sería la actitud hacia tener una iglesia como vecina. ¿QUÉ ES UNA CREENCIA? En términos operativos es la acción de creer en un objeto o situación que se supone verosímil o que tiene para el individuo algo digno de ser creído. Todas las actitudes implican creencias, pero no todas las creencias implican actitudes. Cuando determinadas actitudes específicas se organizan en una estructura jerárquica, constituyen sistemas de valores.

Un enunciado que expresa la creencia puede manifestarse en la siguiente forma: “Yo creo (o pienso) que tal y tal cosa” COMPONENTES DE UNA CREENCIA  Componente cognitivo o de conocimientos  Componente afectivo que se expresa en términos de simpatía – antipatía y corresponde al hecho que la creencia es capaz de activar afectos.  Componente de acción o de comportamiento que contiene una disposición a responder de determinada manera (Aigneren, 2012)

El talento humano no puede ser considerado como propiedad de la organización, a diferencia de los otros recursos. Ya que los conocimientos, la experiencia, las habilidades, etcétera, son particularidades del patrimonio personal, individual, del ser humano e implican una disposición voluntaria de la persona. Esto nos indica que el desempeño de las personas debe ser de carácter voluntario y con su pleno consentimiento es más, a nadie podrá impedírsele que se dedique a la profesión, industria, comercio o clase de trabajo que se acomode a su capacidad. (IBÁÑEZ, 2011) ESTRUCTURA DE LAS ACTITUDES Uno de los modelos más utilizados a la hora de entender cómo se organiza mentalmente una actitud es el modelo tripartito en el cual las actitudes están formadas por tres componentes:  El Cognitivo: Hace referencia a las cogniciones o pensamientos asociados con las actitudes; que han sido denominados tradicionalmente creencias, entendidas como la asociación que la gente establece entre un objeto de actitud y varios atributos o características  El afectivo: Se refiere fundamentalmente a los sentimientos, estados de humor, emociones y respuesta del sistema nervioso autónomo, como pueden ser la regulación de la presión arterial o la frecuencia cardiaca. La distinción entre el componente afectivo y cognitivo resulta especialmente útil a la hora de comprender algunos fenómenos relacionados con las actitudes.  El conductual: Se refiere a las acciones que lleva a cabo una persona hacia el objeto de actitud como a la intención de conducta. Es decir, no es necesario mostrar un comportamiento determinado para expresar una actitud, sino que con la intención de hacerlo es suficiente. El principal problema del modelo tripartito es que predice una coherencia entre los tres componentes de la actitud, pero esto no siempre sucede. Pude que alguien (un empresario, por ejemplo) piense negativamente sobre las personas con discapacidad (Cognitivo) y sienta rechazo hacia ellas (afectivo) y sin embargo contrate a uno en su empresa (conductual), no siendo coherente con sus ideas y sus afectos. (Rosenberg, 1960)

Las acciones se basan en las actitudes individuales, por lo que una teoría de la acción consiste esencialmente en una descripción de las actitudes. La información que permite la formación de las mismas es de tipo cognitivo, afectivo y conductual. La información cognitiva se refiere a las creencias y al conocimiento que poseemos acerca de un objeto. En forma similar, la información referida a las demás personas se basa en dichos componentes y es una causa importante de la formación de nuestra respuesta afectiva. La información conductual también influye en las actitudes, ya que evaluamos nuestras propias actitudes en forma similar a cómo lo hacemos con las de los demás. (Ajzen, 1975)

Autores La actitud es la reacción ocasionada a algo o alguien, generalmente provocada por un estímulo. Se distingue tres componentes de las actitudes: Cognitivo, Afectivo, Conductual.   

Componente cognitivo: Va estar reflejado por los pensamientos, creencias y percepciones que tiene el individuo de la vida y de su existencia. Componente afectivo: Generado por los sentimientos, emociones y lo que motiva al individuo un objeto social. Componente conductual: Resultado de las acciones realizadas por el individuo hacia los objetos ACTITUD C. COGNITIVO C. AFECTIVO C. CONDUCTUAL LO QUE PIENSA LO QUE SIENTE LO QUE MANIFIESTA SU ACCION Ilustración 2 COMPONENTES DE UNA ACTITUD

Es así como las actitudes, no se determinan solamente por el comportamiento humano sino también es el resultado de la combinación con sentimientos y pensamientos desarrollados por el individuo acerca de un objeto. 3.2 ¿El comportamiento siempre concuerda con las actitudes? Una de las razones por las que las actitudes son importantes es por la influencia que tienen sobre el comportamiento. El grado de influencia de las actitudes sobre el comportamiento ha llegado a ser uno de los tópicos más estudiados dentro del campo de las actitudes. Hay muchos factores relacionados con la propia actitud que afectan a su capacidad para influir en la conducta, como su fuerza, accesibilidad, estabilidad o importancia. Al hablar de estos factores que influyen en la relación entre actitud y conducta, se hace referencia a cuándo se da o no esa influencia de la actitud sobre la conducta. Sin embargo, no se ha mencionado cómo se produce dicha influencia. Los trabajos realizados en esta línea apuntan

a la conclusión de que hay dos mecanismos básicos, que se describe en el modelo de la acción razona de Fishbin y Ajzen, y en el modelo procesual de Fazio. 3.2.1)

· · · · · 3.2.2)

· ·

3.2.3)

Factores que afectan a la influencia de la actitud sobre la actitud: Como se ha dicho, hay factores contextuales que estarían influyendo en la relación actitud– conducta y que pueden resumirse en: Las normas sociales La presión temporal La elección misma de las situaciones Especificidad Autoobservacion La teoría de la acción razonada: Con el propósito de comprender la influencia de las actitudes sobre el comportamiento, se debería distinguir entre dos tipos de actitudes. Por un lado estarían las actitudes generales hacia objetos. El segundo tipo de actitudes son las referidas a la realización de una conducta en relación con un objeto de actitud. A este último tipo de actitudes se les conoce como actitudes hacia el comportamiento, y son el objetivo último de la teoría de la acción razonada. La teoría de la acción razonada estudia los procesos psicológicos que intervienen entre la activación de la actitud y la respuesta conductual llevada a cabo hacia dicho objeto. Según esta teoría, la conducta se concibe como el resultado final de un proceso pensado, elaborado, racional y lógico, y la intención de la conducta es el principal antecedente. A su vez, la intención de conducta depende de dos factores: Las actitudes personales acerca del comportamiento La norma subjetiva

El modelo MODE A veces las actitudes hacia determinados comportamientos pueden producir respuestas conductuales que no están medidas por la intención de conducta, influyendo en el comportamiento d un modo más directo y automático. En estas situaciones las actitudes parecen influir en el comportamiento de un modo más directo y automático. ¿Qué ocurriría en estas situaciones lo mismo que lo que tiene lugar cuando se desarrollan conductas que son el resultado de un proceso deliberativo que conlleva el pensamiento acerca de las consecuencias del comportamiento, o acerca de las características del objeto de actitud?. Fazio y sus colegas dieron respuesta a estas preguntas planteando el modelo MODE, según el cual las actitudes ejercen su influencia sobre la conducta de dos maneras diferentes: la primera se basa en un procesamiento espontáneo, y tiene lugar cuando se produce la activación automática de la actitud. Otra forma de ejercer su influencia sobre la conducta es mediante un análisis de la información disponible. Este modelo postula que el predominio del modo espontáneo sobre el deliberativo, o viceversa, depende de dos factores: la motivación y la oportunidad. (MARGARITA, 1991)

Este modelo propone una coherencia entre los distintos elementos que componen la actitud, si bien esto no siempre es así, como se ha comentado anteriormente. Por lo tanto las actitudes no siempre influyen sobre el comportamiento o que los componentes afectivos y cognitivos no siempre estén en estrecha concordancia.  Factores que afectan a la influencia de la actitud sobre la conducta.- Hay factores contextuales que estarían influyendo en la relación actitud-conducta y que pueden resumirse en las normas sociales y la presión temporal. Las normas sociales se refieren a las reglas que indican cómo las personas, supuestamente, han de comportarse en una situación dada. La presión temporal se refiere, como su propio nombre lo indica, a aquellas situaciones en las que no hay tiempo suficiente para elaborar la respuesta que se requiere.  La teoría de la acción razonada (1980) estudia los procesos psicológicos que intervienen entre la activación de una actitud y la respuesta conductual llevada a cabo hacia dicho objeto. AJZEN Y FISHBEIN propusieron que las actitudes no predicen comportamientos per se, sino más bien intenciones de conducta, según esta teoría la conducta se concibe como el resultado final de un proceso pensado, elaborado, racional y lógico. La teoría de acción razonada ha sido ampliamente utilizada y se ha demostrado empíricamente que funciona en relación con muchas y muy diferentes cuestiones.  El modelo MODE.- FAZIO (1989), las actitudes hacia determinados comportamientos pueden producir respuesta conductuales que no están mediadas por la intención de la conducta. Este modelo postula que el predominio del modo espontaneo sobre el deliberativo depende de dos factores: la motivación y la oportunidad. (Ajzen, 1975) La actitud y el comportamiento social, son dos conceptos muy recogidos en épocas anteriores, pero siempre las definiciones de ambos conceptos, guardaban relación con un objeto que pretende afectar psicológicamente a un sujeto. El concepto de actitud es probablemente el más distintivo e indispensable de la Psicología social y es así, ya que es el concepto más empleado por la 1 literatura teórica y experimental. Este término ha sido estudiado desde distintos ámbitos, tales como la psicología, la sociología, pero primordialmente, bajo la Psicología social. Es un término que no cuenta con una definición única, existiendo un desacuerdo conceptual entre los autores sobre lo que es realmente una actitud ya que es definido por muchos autores de formas diferentes pero, pese a ello, guardando muchas semejanzas entre ellas. “Un estado mental y neurológico de atención, organizado a través de la experiencia, y capaz de ejercer una influencia directiva o dinámica sobre la respuesta del individuo a todos los objetos y situaciones con las que está relacionado (ALLPORT, 1954) Hablar de la relación actitud-conducta trae a referencia un tema que ha sido de amplia discusión en el campo de la Psicología Social con implicación en el ámbito educativo. Resulta familiar la similitud entre la distinción tradicional de los objetivos educacionales (cognitivos, afectivos, conductuales) y la concepción estructural de las actitudes. Esta perspectiva ha

servido de base para la aceptación, prácticamente generalizada, del claro influjo entre los componentes cognitivos y los componentes afectivos de las actitudes; sin embargo no puede decirse lo mismo de la relación entre las actitudes (resultado de sus medidas) y las evidencias de conducta externa manifestadas por una persona. (Morales, 1988) Autores La actitud está relacionada con el comportamiento ya que el individuo modifica sus acciones según la conceptualización de su palabra de manera que no se contradigan ocasionando la disonancia cognitiva. Esto significa que el ser humano busca reconciliar las actitudes divergentes y encaminarlas con su comportamiento de manera que se perciba racional y consistente. Los factores situacionales pueden afectar la relación entre comportamiento y actitud es decir, los individuos tienden a trabajar en situaciones que los permita mantener una constancia entre lo que dice y su accionar. 3.3 ¿Cuáles son las principales actitudes hacia el trabajo? Una persona tiene miles de actitudes, pero el CO reclama nuestra atención para un número muy limitado de aquellas que se relacionan con el trabajo, las cuales son evaluaciones positivas o negativas que los empleados tienen acerca de ciertos aspectos de su ambiente de trabajo. La mayor parte de investigaciones en el CO se han dedicado a tres actitudes: satisfacción en el trabajo, involucramiento en el trabajo y compromiso organizacional. Unas cuantas actitudes más reclaman la atención de los investigadores, inclusive el apoyo organizacional que perciben y la dedicación de los empleados; también se estudiarán éstas en forma breve. Satisfacción en el trabajo: El término satisfacción en el trabajo se define como una sensación positiva sobre el trabajo propio, que surge de la evaluación de sus características. Una persona con alta satisfacción en el trabajo tiene sentimientos positivos acerca de éste, en tanto que otra insatisfecha los tiene negativos. Cuando la gente habla de las actitudes de los empleados, es frecuente que se refieran a su satisfacción en el empleo. En realidad, los dos conceptos son intercambiables. Debido a la gran importancia que los investigadores del CO han dado a la satisfacción en el trabajo, esta actitud se revisará con detalle más adelante en este capítulo. Involucramiento en el trabajo: Aunque se ha estudiado mucho menos que la satisfacción en el trabajo, un concepto relacionado es el involucramiento en el trabajo. Éste mide el grado en que una persona se identifica psicológicamente con su empleo y considera el nivel de su desempeño percibido como benéfico para ella. Los empleados con un nivel alto de involucramiento en el trabajo se identifican con la clase de labor que realizan y realmente les importa. Un concepto que se relaciona de cerca con el anterior es el de otorgar facultad de decisión en forma psicológica, que consiste en la creencia de los empleados en el grado en que influyen en su ambiente de trabajo, competencia y significancia de su puesto, y la autonomía que perciben en su trabajo. Por ejemplo, un estudio de los gerentes de enfermería en Singapur descubrió que los mejores líderes dan facultad de decisión a sus empleados por medio de involucrarlos en las decisiones significativas, hacerlos sentir que su trabajo es importante y concederles discrecionalidad para que “hagan sus propias cosas”. Los altos

niveles de involucramiento en el trabajo y la facultad para la toma de decisiones en forma psicológica se relacionan de manera positiva con la responsabilidad social de la organización y el desempeño en el trabajo. Además, se ha descubierto que el involucramiento intenso en el trabajo se relaciona con menor ausentismo y tasas de renuncia. Compromiso organizacional: La tercera actitud que estudiaremos es el compromiso organizacional, que se define como el grado en que un empleado se identifica con una organización en particular y las metas de ésta, y desea mantener su relación con ella. Por tanto, involucramiento en el trabajo significa identificarse con un trabajo específico, en tanto que el compromiso organizacional es la identificación del individuo con la organización que lo emplea. El compromiso organizacional tiene tres componentes distintos: 1. Compromiso afectivo Carga emocional hacia la organización y la creencia en sus valores. Por ejemplo, un empleado de Petco* tal vez tenga un compromiso afectivo con la compañía debido a su involucramiento con los animales. 2. Compromiso pa...


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