Comentario de texto del libro \"Tristan E Isolda\" PDF

Title Comentario de texto del libro \"Tristan E Isolda\"
Course Literatura
Institution Universitat de Barcelona
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Comentario de texto del libro "Tristan e Isolda" en la asignatura de Literatura Universal cursada en Bachillerato de Ciencias Sociales y Humanisticas...


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COMENTARIO DE TEXTO DEL LIBRO “TRISTÁN E ISOLDA” El fragmento del libro “Tristán e Isolda” que pasamos a comentar fue escrito por el romanista Joseph Bédier en el año 1900. Se trata de una pieza de género narrativa caballeresca perteneciente a la materia de Bretaña, tal y como podemos comprobar con la presencia del rey Arturo como personaje secundario y el lugar donde se desarrolla la acción, en Tintagel, reino irlandés. En el siglo XII, se empezó a transmitir esta historia en forma oral y se extendió a lo largo de la Edad Media, de Irlanda a Francia, y siglos más tarde, Joseph Bédier hizo su propia versión de esta trama amorosa a partir de otras cuarto versiones sobre dicha leyenda celta. La trama de la novela gira entorno a unos conflictos caballerescos iniciados con un amor cortés que terminará en tragedia, tal y como se nos prevé al inicio de dicha obra: “¿os gustaría oír una bella historia de amor y muerte? Es de Tristán y de la reina Isolda. Escuchad cómo con gran alegría y dolor se amaron y luego murieron en un mismo día”. En el fragmento seleccionado, el autor anticipa el final de la trama que se inicia en el momento en que Kaherdín, fiel compañero de Tristán, va al castillo de Tintagel para comunicar a la reina Isolda la Rubia que Tristán se está muriendo: “señora, Tristán fue herido por una lanza envenenada y va a morir” y le muestra el anillo de jaspe verde, un anillo que Isolda la Rubia había regalado a Tristán, como símbolo de reconocimiento mutuo. Ante esta noticia, Isolda la Rubia decide seguirle para encontrarse de nuevo con su amado: “Amigo, os seguiré. Tened el barco listo para zarpar mañana por la mañana”. Los dos amantes ansían estar juntos de nuevo, dado que durante el viaje hacia Cornualles para casarse ella con el rey Marcos, Isolda la Rubia y Tristán bebieron un filtro mágico y no pudieron resistir enamorarse entre ellos. Durante toda la obra, los amantes se encuentran con dificultades y obstáculos para satisfacer su amor, como el personaje Andret, caballero del rey Marcos, que junto a otros tres traidores más, conocidos con los nombres de Gondoine, Donalén y Ganelón intentarán, des del inicio, destruir esta relación amorosa, sin salirse con la suya porque todos, tarde o temprano, morirán. Mientras tanto, en la ciudad de Carhaix, Tristán yace débil y moribundo a causa del veneno, procedente de una batalla, que se extiende por su cuerpo mientras espera la llegada de Kaherdín acompañado de su amada y “Nada le daba consuelo”. Todo ello a

pesar del cuidado que le ofrece su esposa de conveniencia, Isolda la de las Blancas Manos, recompensa que obtuvo en el pasado tras matar el enemigo del duque Hoel, padre de Kaherdix. Por otro lado, la situación en alta mar se complica con una tormenta que rompe “obenques y bolinas”, y parece una premonición, anunciando el final trágico que iban a vivir los amantes. Isolda la Rubia, se muestra preocupada y nerviosa por no poder llegar con celeridad a tierra firme: “¡Ay de mí, infeliz! Dios no quiere que viva lo suficiente para ver a Tristán, mi amigo, una vez más, una sola vez”. Pero pasan tres días de tormenta y mala mar hasta que el tiempo se despeje y apacigüe, cuando aparece otra señal en el sueño de Isolda la Rubia, como un suceso fatídico: tenia una cabeza de jabalí ensangrentada en su regazo. Isolda de las Blancas Manos, astuta y vengadora por el hecho de estar casada con un hombre que ama a otra mujer, escucha una conversación entre Tristán y Kaherdín en la que acuerdan, izar en el mástil una vela blanca si Kaherdín consigue llevar a Isolda la Rubia a Tristán o, en caso contrario, una vela negra. La princesa de Carhaix, apoderada por un gran odio en su interior, le dice a su esposo el color de la vela que había visto en Penmarch, lugar donde está Tristán para descansar, al lado de la orilla: “La he visto, la han abierto y la han izado muy alta, pues tiene poco viento. Sabed que es toda negra” escena que hizo entregar su alma y posteriormente Isolda la Rubia, al tener conocimiento de los hechos, murió junto al cadáver de su amante. El gran amor pasional que ambos amantes sentían, a pesar de intentar separarse físicamente varias veces, ha sido en todo momento mayor a causa del poder sobrenatural del filtro que les ha conducido a una muerte trágica, dejando de lado, durante toda la obra, la fidelidad que Tristán e Isolda debían tener con el rey Marcos, un rey de gran bondad y débil, sentimentalmente cegado por el gran amor que él siente por los dos jóvenes. Así, tras conocer la noticia de sus muertes, el rey Marcos manda construir dos ataúdes en medio de un altar, pero una vez más, se muestra este amor sobrenatural al crecer de ambos ataúdes zarzas entrelazadas “De la tumba de Tristán surgió una zarza verde y frondosa, de fuertes ramas y flores olorosas, que, elevándose por encima del altar, se hundió en la tumba de Isolda”. En cuanto a los personajes que aparecen en esta escena, uno de los protagonistas principales es Tristán, hijo de Blancaflor y Rivalén, pero que en su infancia fue criado por Rohalt y por Gorvenal que actuó como su maestro y ayo para enseñarle todo lo que ahora sabe. Tristán es un caballero de origen noble, muy valiente en el campo de

batalla, hasta que juega en el terreno del amor y sufre una transformación sobrenatural, con cambios psicológicos causados por el filtro, que a su vez le entregó la madre de Isolda la Rubia a su hija, con el que no podía resistirse a complacer su deseo de estar juntos: “Nuestro amor es tal que no puedes morir sin mí, ni yo sin ti”. Todo ello hasta llegar al punto de traicionar a su tío el rey Marcos y causar más de una muerte. En este fragmento se muestran los últimos días de su vida y sus últimas palabras que citó: “¡Isolda, amiga!” antes de morir de forma trágica por un amor pasional correspondido. También aparece Isolda la Rubia, hija del rey de Irlanda y casada con el rey Marcos, una dama culta de la corte que se siente triste por la situación actual de su amado y al ver que no se estaba cumpliendo su petición: “¡Ay, amigo mío, no se cumplió mi deseo, que era morir en tus brazos, ser enterrada en tu sepulcro!”, decide viajar con Kaherdín a hasta la ciudad de Carhaix. Al llegar a la ciudad, un anciano le da la mala noticia, “Señora, tenemos una gran pena. Tristán el noble, el valeroso, ha muerto” y sube a palacio para poder verle, pero a su lado se encuentra Isolda la de las Blancas Manos que “lanzaba grandes gritos sobre el cadáver”. Ante esta escena, la princesa de Irlanda no puede contener la ira y odio que siente: “Tengo más derecho que vos a llorar, podéis creerme. Yo lo amé más”. Este sentimiento intrínseco aparece en Isolda la Rubia des del momento en que se entera que se su amado se había casado por conveniencia y su amor pasional se vuelve más distante. Por otro lado, el rey Marcos en este fragmento se muestra aún más bueno y con una personalidad más transparente en cuanto “Conoció la muerte de los amantes, cruzó el mar y, una vez en Bretaña, mandó hacer dos ataúdes, uno de calcedonia, para Isolda, el otro de berilo, para Tristán”. Aunque siente dolor a causa de las traiciones recibidas por lo amantes, les deja descansar en la forma que ellos hubieran querido estar: juntos. En último lugar, se muestran personajes con un carácter antagonista como los cuatro traidores de los cuales, en esta última escena, el último que muere es Andret e Isolda la de las Blancas Manos, una mujer bondadosa, que tras ser traicionada por una parte, por su hermano Kaherdín, con pocas amistades pero muy fieles, y por otra parte, por su esposo cuyo amor de su vida es otra mujer. Por ello, decide vengarse al ver “la vela blanca” y aprovechar que su esposo yace tumbado y sin fuerzas para mentirle acerca del color de dicha vela.

Los elementos fantásticos juegan un papel muy importante en el libro, tales como, por una parte el filtro utilizado para justificar los actos de los personajes, por otra parte, el hierro que coge Isolda la Rubia y delante de todo el pueblo, hace un juramento por el que, si dice una mentira acerca de la fidelidad a su esposo, se quemaría con el mismo hierro. También tenemos otro elemento fantástico que es la naturaleza que actúa como un poder sobrenatural a favor de los protagonistas, pero también en contra cuando se dice que “De repente se levantó un viento de tormenta (…) el viento se enfureció, las olas profundas se conmovían, el aire se hizo espeso como las tinieblas, el mar se volvió negro, la lluvia caía a ráfagas” y también, al final de la obra tenemos a la zarzamora que “Por tres veces quisieron destruirla, pero fue en vano”. En cuanto a la estructura de esta obra, ésta es lineal, es decir, la pieza se representa cronológicamente con una duración prolongada en el tiempo. Dentro de esta cronología, aparecen premoniciones que desvelan el final trágico de la trama, por ejemplo, Isolda la Rubia tiene un sueño sangriento en el que “Supo por ello que no volvería a ver vivo a su amigo”. Estas premoniciones también se cuentan al inicio de la trama por el propio narrador de la obra, que se presenta como un juglar de la época. Por ello, se puede considerar también que la obra tiene una estructura circular, con el inicio y el final conectados. Las obras consideradas novelas caballerescas incorporan un héroe, proveniente de una tierra lejana, como personaje principal, que tras luchar en batallas bélicas es recompensado con una bella dama con la que mantiene una relación amorosa. Además, este personaje también es dotado de cualidades especiales para convertirlo en un héroe único, especial e irremplazable. El texto de la novela se divide internamente en diferentes capítulos, por ejemplo, en el libro de “Tristán e Isolda” incluye una presentación hecha por Gaston Paris seguida de 19 capítulos, para dividir la trama y se concluye con una nota sobre el texto de Joseph Bédier. El fragmento del texto analizado pertenece al último capítulo titulado “La Muerte” y podemos observar una primera escena en la que únicamente aparecen Kaherdín, la reina Isolda y Andret, mientras se hace un paralelismo junto a otra escena en la aparecen Tristán e Isolda la de las Blancas Manos que se unirán posteriormente para interactuar y llevar la obra al desenlace con la aparición del rey Marcos.

En cuanto al estilo literario, la obra de “Tristán e Isolda” está escrita en prosa y el autor recopila varias leyendas tradicionales transmitidas oralmente. Está escrita originalmente en francés, aunque posteriormente fue traducida a varios idiomas. Si analizamos el lenguaje, podemos comprobar que es culto al ser los personajes procedentes de la alta realeza, por ejemplo, se puede observar cuando Tristán le pregunta a Isolda la Rubia acerca del barco: “Bella amiga, ¿estás segura de que es su nave? Dime, pues, cómo es la vela”. Por otro lado, el narrador omnisciente, se muestra externo a la obra y describe lo que los personajes ven, oyen, piensan y sienten, utiliza verbos en la segunda forma del plural para interpelar al lector “Oíd ahora, señores, una aventura dolorosa, lamentable para todos aquellos que aman” y sentir que forma parte de la misma obra. Acompañados de onomatopeyas para representar de forma más real los sentimientos de los personajes, por ejemplo, Isolda la Rubia al pensar que no volverá a ver a su amado exclamó: “¡Ay de mí, infeliz!” o en cuanto siente envidia por la otra Isolda: “¡Ah, quizá después de mí amarás a otra mujer, amarás a Isolda la de las Blancas Manos”. Dicho personaje sufre una alteración en su carácter, puesto que ahora se muestra a la reina de Irlanda como una mujer nerviosa y con miedo al llegar a uno de los muchos puntos culminantes creados por el autor con la utilización de recursos estilísticos y acciones para crear expectación momentánea y mantener la atención del lector y la intriga. Frecuentemente, en las obras antiguas se hacían referencias a personajes divinos para justificar algún comportamiento o situación, como por ejemplo, cuando Isolda la Rubia pretende decirle a Tristán: “Amigo, si no voy hasta ti es porque Dios no lo quiere, y es éste mi peor dolor. Mi muerte no es nada, pues Dios la quiere y yo la acepto”. Esta obra tuvo un gran impacto en la población, de tal forma que durante muchos años, otros escritores hacían diferentes versiones de la misma historia. El impacto también se ha hecho notar en otros campos artísticos, como el cine, pintura, ópera y teatro, de tan forma que la historia de amor imposible entre Tristán e Isolda ha llegado hasta nuestros días. Por ello, la complejidad de la obra (estructura, lenguaje, diversidad de personajes, estilo de escritura, etc) la han hechos merecedora de ser considerada una referencia incuestionable de la Literatura Universal.

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