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Tema 1: La educación. Cuestiones y conceptos generales

Fundamentos Pedagógicos de la Educación (Universidad de Huelva)

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Tema 1: La educación. Cuestiones y conceptos generales.

1. El concepto de educación: un marco de referencia para el educador/a profesional. Acometemos el concepto de “educación” haciendo parad en tres estaciones: 1.1 Concepción vulgar de Educación. El término “educación” aparece prolíficamente adjetivado y adjetivando a personas con ciertas cualidades. Así, un ciudadano es considerado educado cuando pone en práctica normas de urbanidad, cortesía y buenos modales, cuando tiene un gradiente destacable o suficiente de conocimientos, información y “cultura”, o cuando se desenvuelve con autosuficiencia y responsabilidad denotando cierta madurez. 1.2 Aproximación etimológica al concepto de educación. Dos son los vocablos latinos –educare y educere-, que hacen de la etimología la palabra educación una cuestión dilemática entre pedagogos y estudiosos dadas sus diferencias semánticas. Educare significa criar, amamantar, nutrir, guiar, teniendo como correlato en la concepción educativa una acción que conduce y proporciona dese fuera al pasivo educando lo necesario, siendo hegemónica la figura del maestro, del profesor, del educador social que genera un proceso comunicativo unidireccional. Educare derivaría, el modelo educativo directivo o la escuela tradicional. Educere, significa extraer desde dentro hacia fuera, sacar, hacer salir. La educación es concebida desde esta originaria semántica como estimulación, activación y desarrollo de las potencialidades inherentes al educando, cobrando aquí preeminencia el educando, el alumno, como un proceso comunicativo diversificado, en distintas direcciones y sentidos. 1.3 Concepción científica de Educación. A la concepción de la educación más científica, pretendemos llegar asomándonos al amplio balcón de los rasgos definitorios y de las notas caracterizadoras que de educación han advertido y señalado reconocidos científicos el ámbito pedagógico.

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Recurrimos a dos fuentes: - Notas definitorias procedentes de Fernández-Sarramona y García Aretio del concepto de educación: . Perfeccionamiento. La educación entendida como tránsito de una situación a otra más óptima, de lo que “se es” a lo que “se debe ser“, de un estado a otro de mayor perfección y dignidad. . Teleología. La educación se orienta y tiene como referencia un fin, una meta. El fin es un bien que incita a obrar, la educación como perfección es un sentido concreto que depende de las concepciones antropológicas, filosóficas, teológicas… . Intencionalidad. La educación es un hecho consciente y deliberado, que diría Dewey la educación se presenta como algo querido por el hombre, como algo que desea “voluntariamente”. . Sistematicidad. La educación es un hecho pensado, planificado, diseñado, programado, metódico, racionalizado, pautado, procesal. . Carácter humano. La educación acontece, se da , única y exclusivamente en el ser humano. . Integridad. La educación es una labor que abarca todas las dimensiones de la personalidad. La educación ha de formar al educando en todas sus dimensiones, ha de conferir integridad al ser humano, debe tender a hacer hombres íntegros. . Influencia, ayuda y auxilio. La educación exige el influjo de unos hombres sobre otros, la cooperación voluntaria sin coacción ni imposición. . Individualización, autorrealización. La educación es un medio individual de desarrollo y realización. . Socialización. La educación es un medio de adaptación y de incorporación activa y crítica del hombre al medio, al entorno social. -

Por su parte los profesores A. Colom y L. Núñez señalan unas características como propias de la acción educativa. Además de la “integridad” y la “intencionalidad” : . Acción. La educación es fundamentalmente un hacer, no un pensar. Lo cual no quiere decir que no haya que pensar. Es más, hay que pensar antes, durante y después de hacer, de la acción.

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. Comunicación. El proceso educativo es siempre y de manera consustancial un fenómeno comunicativo entre el educador/a y el educando. La educación requiere de información para la formación. . Inteligencia. Es necesaria para que se dé educación tanto en el educador/a como en el educando. El primero debe tener la capacidad para elegir el “camino” a seguir entre los posibles, y el segundo la capacidad de recibir y comprender los procesos comunicativos que le lleguen. . Aprendizaje. Es un aspecto determinante y necesario para que se pueda hablar de educación. Educarse significa aprender. No se da educación si no hay aprendizaje. . Moralización. Orientación a valores. El aprendizaje referido debe servir para que el sujeto se oriente en el mundo de los valores, de las creencias o de las ideologías. . Crítica y Libertad. La educación debe conseguir la capacidad crítica en los educandos. La educación no es inculcación ni adiestramiento ideológico. Por otra parte, hay que desarrollar la capacidad de decisión, de opción, de elección libre. . Innovación. Educar debe suponer innovar. La última pretensión de la educación no será la adaptación del hombre a su ambiente, a su cultura a su sociedad, debe generarle las competencias necesarias para cambiar, transformar la situación con carácter perfectivo. . Pragmática. La educación debe ayudar al educando a vivir. Debe desarrollarle la capacidad de hacer frente a las contradicciones en la vida y de ir superando las dificultades que el oficio de vivir le depare. Por último, aportamos una definición más elaborada y conceptista que abarca la totalidad de los elementos consustanciales a la idea de educación. Luis Llerena Baizán: “La educación es un proceso perfectivo e intencional, generalizado en el espacio y en el tiempo, basado en el potencial de educabilidad del educando y en el contexto comunicativo de la relación interpersonal (directa o indirecta), mediante el que se enseñan y aprenden conocimientos, procedimientos y estimaciones de la realidad, orientados al conjunto de dimensiones de la persona, con la finalidad de propiciar su desarrollo personal como síntesis superadora de las vertientes individual y social del proceso y adaptarla al medio a través de

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prácticas definidas por la cultura en ámbitos formales y no formales que se propongan a lo largo de toda la biografía del individuo, y que han de contribuir, a su vez, a una transformación social constante y positiva”.

2. Educación y su relación analógica. Relacionamos el concepto de educación frente a otros conceptos fines que con él concurren en el uso de las significaciones educativas, tales como instrucción, formación, adoctrinamiento, enseñanza y aprendizaje. 2.1.

Instrucción. Es el proceso –y producto de desarrollo intelectual o cognitivo del ser humano abordando básicamente contenidos conceptuales que e integran superficialmente sin que suponga cambio perfectivo en la personalidad. Este concepto no tiene un significado peyorativo como en los casos anteriores, aunque puede haber procesos de instrucción que se parezcan mucho a los procesos de adoctrinamiento. Los procesos de instrucción están en el camino de lo que sería un proceso de desarrollo positivo de los sujetos en el ámbito de los conocimientos, del saber. Arsenio Pacios diferencia entre “instrucción pura” e “instrucción formativa”. La primera sería aquella actividad que sólo se propone el aumento del saber y la segunda es aquella actividad que además de la adquisición del saber se propone el aumento de la perfección del entendimiento del alumno. Lo importante, el punto de mira de la instrucción es la materia que se imparte, los conocimientos, creencias, principios, saberes, destrezas que se distribuyen. Podemos destacar tres notas definitorias de instrucción, una referida a la dimensión humana que desarrolla, que sería fundamentalmente la intelectual, otra referida al elemento del proceso de transferencia sobre el que pivota su acción, que sería la información, el contenido, el mensaje, la materia, el objeto de conocimiento, y una tercera referida al grado de interiorización del contenido, que no sería profundo, recreado, integrado ni significativo. No se puede identificar, por tanto, educación con instrucción. La educación, más que al intelecto, apunta a la personalidad total del educando, abarca la formación del todo el sujeto. La educación considera todos los elementos intervinientes en el proceso comunicativo y pretende una integración constructiva de los

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contenidos. Instrucción puede entenderse como proceso y como producto. 2.2.

Formación. “Formación” no es otra cosa que dar forma a lo informe o una nueva forma a lo ya formado. Educar es propiamente formar. Ricardo Nassif sostiene que la formación del ser humano es el fin de la educación. Formación que se produce por medio de una influencia exterior consciente o inconsciente o por un estímulo que, si bien proviene de algo que no es el individuo mismo, suscita en él una voluntad de desarrollo autónomo (autoeducación). El término “formación” ha sido empleado en tres sentidos. 1. La formación como tarea de la educación. 2. La formación como cultura transmitida y en cuanto transmitida. Y 3. La formación como conjunto de ejercicios y prácticas que un sujeto realiza a fin de lograr habilidades o destrezas ejecutadas de la manera más perfecta posible. Podríamos definir formación como “el proceso –y producto- de desarrollo de distintas dimensiones del ser humano abordando contenidos conceptuales, procedimentales y actitudinales que se integran en profundidad suponiendo un cambio perfectivo en la personalidad”. Se puede diferenciar entre formación e instrucción. La formación comparte ciertamente con la instrucción el ofrecimiento de un contenido, pero excede a la simple adquisición de conocimientos o de destreza, en el sentido que convierte la materia transmitida en un elemento libremente disponible y fecundo. La instrucción permanece en un nivel intelectual, la formación se inserta en la personalidad y se manifiesta con actuaciones. Al igual, se puede diferenciar entre formación y educación. El término “formación” viene a coincidir básicamente con el de “educación” ya que van unidos tanto en el uso cotidiano como en los tratados científicos. En la literatura pedagógica se ha empleado indistintamente dichos términos para referirse a una superación del campo exclusivamente intelectual. Pero lo diferenciamos en: primero es que la formación no llegaría a todas las facetas de la personalidad, mientras que la educación sí. Y segundo es que la formación permite hablar de resultados concretos, mientras que la educación presupone un proceso que es inacabado y permanente.

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2.3.

Adoctrinamiento. El adoctrinamiento es una presión ideológica ejercida sobre el educando sin que éste inicialmente la busque, o la necesite. Doctrina significa “enseñanza que se da para instrucción de alguien alguien o conjunto conjunto de ideas u opiniones opiniones religiosas, religiosas, filosóficas, políticas, etc. sustentadas por una persona o grupo.” Aunque en principio, estos términos no tienen ningún matiz sospechoso, hoy tiene un significado generalizadamente peyorativo en todos los círculos. Adoctrinamiento significa que el agente externo, intenta reproducir al sujeto que aprende sus convicciones ideológicas sin que el sujeto las pueda someter a crítica, a razonamiento. Para conseguir esto, el agente externo parcializa la realidad, o lo que es lo mismo, oculta todo lo que pueda perturbar perturbar sus convicciones, convicciones, dejando dejando a la vez, la parte que a él le interesa. Un proceso de adoctrinamiento produce aprendizaje, tiene eficacia, pero no será un proceso educativo al no cumplir los criterios de forma y de uso dados para la educación. José Antonio Ibáñez-Martín y Mellado define adoctrinamiento como el modo de influir sobre los demás, que, movido por un desprecio fáctico de la persona, se limita a buscar unos concretos rendimientos simplemente externos, sin intentar que los demás descubran el camino por el que se llega a la verdad ni que acepten un verdadero compromiso interiorizado de su vida moral.

2.4.

Enseñanza. Este término proviene del verbo latino insignare que significa dar a conocer por medio de un signo. Enseñanza supone mostrar algo a alguien. Renzo Titone afirma que enseñanza es el acto en virtud del cual el docente- en general, el educador/a pone de manifiesto los objetos de conocimientos al alumnado para que éste los comprenda. “Enseñar es dar información”, “enseñar es mostrar a alguien cómo hacer algo”, “enseñar es dar a conocer una cosa a alguien, transmitir conocimiento, sea teórico o bien práctico”. La definición de enseñanza como actividad intencional exige que se den, al menos, dos condiciones: la intención o voluntad explícita del

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educador/a, del maestro/a, porque otro aprenda, y la intención o voluntad de aprender por parte del educando, del alumno/a. La definición de enseñanza como conducta normativa recoge la idea de que la enseñanza requiere determinadas condiciones éticas, s decir, una enseñanza verdaderamente educativa siempre que el educador/a, el maestro/a, se comporte de forma ética. 2.5.

Aprendizaje. El aprendizaje es el proceso mediante el cual un sujeto adquiere destrezas o habilidades prácticas, incorpora contenidos informativos, o adopta nuevas estrategias de conocimiento y/o acción. Para poder afirmar que se ha producido un aprendizaje es necesario considerar que ha habido una modificación relativamente estable. El aprendizaje es un aspecto determinante y necesario para que se pueda hablar de educación. Educarse significa aprender. No se da educación si no hay aprendizaje. En sintonía con este razonamiento, siempre que hay enseñanza, al haber aprendizaje, podemos hablar también de educación.

3. Educación formal, no formal e informal. 3.2. La Educación formal. Coombs define la educación formal como un “sistema educativo altamente institucionalizado, cronológicamente graduado y jerárquicamente estructurado que se extiende desde la escuela primaria hasta la Universidad”. Debemos incluir como educación formal las denominadas en las leyes

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educativas como enseñanzas de régimen especial: música, idiomas, artes y oficios… Como características, señalamos que es una educación teleológica e intencional (voluntad formativa por parte del agente educador y del educando), sistemática y metódica, que se lleva a cabo en el marco de una institución (colegios, institutos, Universidades, Conservatorios de música), que está regulada por unas leyes emanadas de la Administración Educativa y de la que se obtienen títulos oficiales. 3.3. La educación no formal. La educación no formal fue concebida por P.H. Coombs como “toda actividad organizada, sistemática, educativa, realizada fuera del marco del sistema oficial, para facilitar determinadas clases de aprendizajes en subgrupos particulares de la población, tanto adultos como niños”. Entre las características a destacar de la educación no formal están el carácter intencional, teleológico y sistemático (coincidente con la educación formal), el constituir un engranaje de acción al margen del sistema educativo reglado, el poseer una variedad de destinatarios en virtud de diferentes criterios, el ofertar unos programas formativos que no tienen por qué estar relacionados ni ser propedéuticos, y el contar con una financiación que no depende exclusivamente de la administración dedicadas únicamente a tareas educativas. 3.4. Educación informal. El profesor Lorenzo García Aretio señala que “la educación informal es no institucionalizada, se produce de manera no intencionada, inconsciente, imprevista, sin planificación ni metodicidad y sin poseer objetivos educativos explícitos”. La ausencia de “intencionalidad” y de “sistemática” en la educación informal son los atributos básicos diferenciales con respecto a las otras modalidades educativas. Las características de la educación informal . Es una educación no institucionalizada, que tiene por agentes la familia, los medios de comunicación , los grupos de iguales y la sociedad en general. La eucación informal no es sistemática, es puntual, accidental, espontánea…, y en cuanto a la intencionalidad pueden darse los siguientes casos: - Que no exista intencionalidad ni de los agentes educadores ni de los educandos.

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-

Que exista intencionalidad sólo por parte de los agentes educadores. Que exista sólo intencionalidad por parte de los educandos (en ningún caso habrá intencionalidad conjunta de educadores y educandos).

Intencionalidad del agente Educación formal Educación no formal Educación informal

SÍ

Carácter metódico o sistemático del proceso SÍ (sistema educativo)

SÍ

SÍ

Mayoritariamente NO

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