Texto Argumentativo Hincar los codos Solucion PDF

Title Texto Argumentativo Hincar los codos Solucion
Author SEKIA BABO
Course Historia de España
Institution Instituto de Educación Secundaria Pedro Salinas
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Historia de España resúmenes, de mi mismo profesor que facilitan mucho poder sacar las ideas de cada epígrafe ya que los preguntas cortas tienen demasiado contenido...


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LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA COMENTARIO DE TEXTO

Hincar los codos Tengo la teoría de que los escritores nos dedicamos a escribir, entre otras cosas, porque no nos gusta hablar públicamente. He encontrado en muchos colegas ese pudor y esa incomodidad comunicativa, y yo desde luego soy así. Cuando presenté mi primera novela, 5

a los 28 años, hice un penoso papelón con mis balbuceos. Pero ya entonces comprendí que, si quería desarrollar una carrera profesional, tendría que aprender a hablar en público. El caso es que me puse a ello, a intentar dominar el terror parlante, echando mano de mi arma secreta: una tenacidad de estalactita. Claro que por entonces ni siquiera sabía que la perseverancia laboriosa era un arma tan buena. Por entonces aún creía en el valor supremo de la brillantez,

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de la genialidad que percibía en los otros, en algunos otros. Me llevó bastante tiempo darme cuenta de que la mayoría de los grandes talentos que había visto fulgurar a mi alrededor se habían ido perdiendo en el transcurso de la vida. Y así aprendí que, en la carrera de la obra (de cualquier obra, de cualquier vocación), son más importantes el tesón, el trabajo y el aprendizaje que el talento sin más.

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Mi método fue ponerme en riesgo mil veces participando en actos públicos. O, lo que es lo mismo, hice el ridículo durante muchos años farfullando frases precipitadas y temblorosas. Y llegué a la conclusión de que el quid de la buena oratoria es repetirte una y otra vez esta frase hasta creértela: lo que voy a contar les va a interesar. Aún hoy sigo repitiéndomelo como un mantra cada vez que doy una charla.

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Décadas después de la horrible presentación de mi primer libro puedo decir con asombro que he aprendido a hablar en público. Incluso parece que soy buena. Nunca leo, aunque siempre llevo mis notas: son la red de seguridad por si me bloqueo. El otro día, en la entrega de los Premios Nacionales de Cultura, se nos pidió que dijéramos algo en representación de los premiados. Yo debía soltar un pequeño discurso de cinco minutos, y

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tanto la brevedad (es difícil decir algo sensato en tan poco tiempo) como la envergadura del evento me tenían de los nervios. Llegó el momento, hablé y salió bien. Después del acto se acercó el estupendo Matías Prats, uno de los premiados, y alabó mi capacidad de improvisación. No supe qué responderle. Porque lo cierto es que había estado pensado en mis palabras durante una semana; luego, el día del premio, escribí el discursito, lo medí de

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tiempo, lo ajusté, lo ensayé mil veces para hacerlo carne y no tener que leerlo, para poder contarlo con emoción y genuina verdad, no repitiendo las palabras como un loro. En total

tal vez empleé seis horas de trabajo para esos cinco minutos. Todo lo contrario, en suma, a improvisar: sigo teniendo que vencerme en algo que no me gusta. Y ¿saben qué? No sólo me enorgullezco de que sea así, sino que además me parece profundamente alentador. Se lo digo 35

a los estudiantes cuando voy a los institutos: ¿tenéis algún sueño, queréis ser dibujantes de cómic o astronautas? Pues emplead toda vuestra voluntad y una infinidad de horas de trabajo. Hincad los codos. Si yo he conseguido aprender a hablar partiendo de la catástrofe que era, cualquiera puede aprender a hacer cualquier cosa. Rosa Montero: El País, 7 de abril de 2019

1.- Resumen A los escritores no les gusta hablar en público. La autora da fe de ello y de cómo se ha esforzado para superarse. Invita a la constancia y al esfuerzo para alcanzar lo que nos propongamos. Recordamos que el resumen ha de recoger las ideas más importantes del texto. No debe ocupar más de unas cuatro líneas.

2.- Tema Necesidad de la perseverancia para conseguir los sueños. Todo tema tiene forma y fondo. Forma: mediante nominalización (se expresa con un sustantivo abstracto + Complemento del nombre). Fondo: responde a la pregunta ¿para qué ha escrito el autor este texto? ¿Cuál es su finalidad? El tema no es algo general, que valga para cualquier texto. Se ajusta al fragmento que nos proponen. En los textos argumentativos puede coincidir con la tesis.

3.- Características lingüísticas y estilísticas más destacadas Dentro del plano pragmático, la función predominante es la apelativa ya que el texto tiene como finalidad de convencernos para superarnos y mejorar. Si tenemos en cuenta la situación comunicativa, se cumple con la propiedad de la adecuación: utiliza un registro estándar de la lengua para hacerse entender con corrección por un amplio abanico de lectores, como es propio de los textos periodísticos. Asimismo, cumple con la propiedad de la coherencia ya que todos sus enunciados giran en torno a un tema principal y cada uno de sus enunciados presenta una progresión temática y un orden lógico. Puede constatarse en su estructura: En la estructura externa, el texto presenta un título (lín. 1), un cuerpo dividido en tres párrafos (líns. 2-14, 15-19 y 20-38) y la fuente (lín. 39). En su estructura interna, el texto está dividido en las siguientes partes:

1.- Tesis (líns. 34b-38): Invitación al esfuerzo y a la constancia para conseguir los sueños. 2.- Cuerpo argumentativo (3b-33a): utiliza argumentos propios para convencernos. Así pues, como la tesis sigue al cuerpo argumentativo, el texto presenta una estructura inductiva. Esa coherencia se puede ver reflejada, asimismo, en los siguientes mecanismos de cohesión: entre los marcadores de continuidad temática, se puede observar la recurrencia léxica hablar públicamente (lín. 2) y hablar en público (lín. 6); o escritores y escribir (lín. 2); la sustitución por proforma los escritores (lín. 2) por nos (líneas 2 y 3) o Matías Prats (lín. 27) por uno (lín. 27); o la elipsis del pronombre personal yo (lín. 4a) en la oración 4b (“Cuando [yo] presenté…”). Entre los conectores, puede apreciarse la utilización del marcador de adicción y (lín. 13), que sirve para sumar ideas; el marcador de adicción y así (lín. 12b), que sirve para llevar al máximo la línea de lo afirmado anteriormente; el marcador de oposición pero (línea 5b), que sirve para afirmar dos enunciados de significado opuesto o el marcador de reformulación en total (lín. 30b), que sirve para condensar en un enunciado una información concreta procedente de varios enunciados anterior. Solo hay que señalar dos marcadores de continuidad temática distintos y dos conectores distintos. Y explicar brevemente en qué consisten. He puesto alguno más en la solución para que se vea la variedad. Se recuerda que los ejemplos, que aquí aparecen en cursiva, cuando se escribe a mano se deben subrayar.

Dentro de este plano, destaca la figura estilística de las interrogaciones retóricas que aparecen en la conclusión del texto (líns. 33b y 35-36a), que sirven para captar la atención del receptor.

Dentro de los textos argumentativos, son muy frecuentes la utilización de figuras retóricas. Hay que señalar dónde se encuentran, a qué plano pertenecen y explicar brevemente en qué consisten. No se espera que las señalemos todas, pero sí que seamos capaces de ver alguna y explicarla adecuadamente.

En cuanto al plano morfosintáctico, el autor busca la subjetividad a través de los siguientes recursos: a) abundancia de los verbos en primera persona: tanto del plural (dedicamos, lín. 2) como del singular (hice, lín. 16). La utilización del plural mayestático crea conciencia de

pertenencia a un grupo y sirve para integrar a una parte de los receptores con el pensamiento de la autora. La forma más abundante es la primera persona del singular. Destaca, también la 3ª persona del plural con equivalencia al tratamiento de cortesía (ustedes) en la línea 33b (“Y ¿saben qué?). Es una apelación de respeto dirigida al interlocutor. Una fórmula muy habitual en los textos argumentativos. También destaca el uso del imperativo (“hincad los codos”, lín. 37) con el que culmina el texto. Resulta curioso que repite la misma idea en el título, pero utiliza ahí el infinitivo (“hincar los codos” lín. 1). Se debe a que en la lín. 37 hay un sujeto concreto (vosotros). b) abundancia de adjetivos calificativo (“incomodidad comunicativa”, lín. 3 o “terror parlante”, lín. 7). c) No abundan los tecnicismos, ya que es un texto divulgativo, dirigido a las masas. Sí podemos encontrar algún sustantivo abstracto (brillantez, lín. 9; o tesón, lín. 13). d) El texto destaca por el uso de una sintaxis marcada por oraciones cortas, separadas por punto y seguido. Abundan las oraciones compuestas para aprovechar los máximos matices del razonamiento, como puede apreciarse en el párrafo primero. Dentro del plano léxico-semántico, destaca el campo asociativo de la “intervención pública”, que aparece en el párrafo segundo: actos públicos, farfullar frases, precipitadas, temblorosas, buena oratoria, charla, mantra. O el campo asociativo de los “Premios Nacionales”, en el párrafo tercero: discurso (lín. 24), decir algo (lín. 25), envergadura (lín. 25), evento (lín. 26), nervios (lín. 26), premiados (lín. 27), improvisación (lín. 28), alabó (lín. 27), ensayé (lín. 30)… Encontramos, asimismo, sinonimia en tenacidad (lín. 8), perseverancia (lín. 8) y tesón (lín. 13). Y antonimia en escribir (lín. 2) y hablar (lín. 3). Destaca la abundancia de figuras retóricas dentro de este plano: a) hipérbole (“ponerme en riesgo mil veces”, lín. 15; o “lo ensayé mil veces”, lín. 30). Se busca una exageración desmesurada. b) Símil (“no repitiendo las palabras como un loro”, lín. 31). La autora (término real) se compara con un loro (término imaginario). Tienen en común el hecho de repetir los sonidos sin pensar en lo que se dice. c) Metáforas (“echando mano de mi arma secreta: una tenacidad de estalactita”, líns. 78a). Para la primera metáfora echa mano del campo semántico de la guerra (se enfrenta a sus miedos, como se enfrenta a un enemigo en el campo de batalla). Vuelve a utilizar arma con el mismo sentido en la línea 9. En la segunda, su paciente constancia para conseguir sus propósitos se identifica con la de la

formación de estalactitas, famosas por crecer no más de 10 centímetros cada mil años. Por último, en el plano fonológico destacan las onomatopeyas presentes en balbuceo (lín. 5) y farfullando (lín. 16), que tratan de reproducir mediante un sustantivo el efecto sonoro que se produce al hablar así. Solo hablamos del plano fonológico, si hay alguna figura retórica que se inscribe en él.

4.- Tipo de texto que es Se trata de un texto argumentativo porque trata de convencernos para ser perseverantes en conseguir nuestros sueños, lo mismo que ella ha hecho para superarse....


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