TRABAJO: Historia moderna. Las preciosas ridículas, El avaro y Tartufo de Moliere. PDF

Title TRABAJO: Historia moderna. Las preciosas ridículas, El avaro y Tartufo de Moliere.
Course Història Moderna
Institution Universitat de Barcelona
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Summary

Trabajo sobre las obras de Moliere: Las preciosas ridículas, El avaro y Tartufo.
El índice del trabajo es el siguiente:
1. INTRODUCCIÓN Y RESUMEN
2. MARCO HISTÓRICO
3. GEOGRAFÍA
4. GRUPOS SOCIALES Y SOCIEDAD DE LA ÉPOCA
5. VISIÓN DEL MUNDO, CREENCIAS Y VALOR...


Description

Molière. Trabajo sobre Las preciosas ridículas, El avaro y Tartufo.

I. INTRODUCCIÓN Y RESUMEN. Jean-Baptiste Poquelin, más conocido por el sobrenombre de Molière, fue un actor y dramaturgo francés de mediados del siglo XVII. Con más de veinte obras escritas entre 1645 y 1673 es considerado uno de los más grandes dramaturgos franceses del siglo XVII, las obras que en este trabajo analizaré serán “Las preciosas ridículas”, “Tartufo” y “El Avaro” , tres de sus obras más importantes ya sea bien por su trascendencia dentro de la carrera del propio autor o por las polémicas que despertaron en la sociedad de la época, como es el caso de Tartufo que fue incluso prohibida por el rey durante cinco años. “Las preciosas ridículas” fue escrita por Molière en 1659, se trata de la primera de sus grandes comedias y gracias a ella Molière consiguió un gran éxito y se ganó el favor del rey. Esta comedia de un solo acto tiene como protagonistas a dos hombres, La Grange y Du Croisy, que salen de casa de dos jóvenes, Madelón y Cathos, a las que acaban de visitar para hablar sobre un posible futuro matrimonio entre ellos pues el padre y tío respectivamente de ellas, Gorgibus, tiene intención de casarlas pronto y cuanto antes. Sin embargo, La Grange y Du Croisy salen molestos de la casa pues las dos mujeres apenas han hablado o les han prestado atención. Madelón y Cathos acaban de llegar a la ciudad de París y tienen una visión muy idealizada de la galantería y de cómo debería ser un hombre o comportarse con una mujer, por ello las formas de los dos hombres que se presentan en su casa y, sin más preámbulos, les hablan de matrimonio les disgustan y no muestran siquiera interés o prestan atención. Así, La Grange y Du Croisy deciden darles un escarmiento a las dos jóvenes al sentirse tremendamente ofendidos por lo que envían a dos de sus criados a verlas, haciéndose pasar por hombres distinguidos y nobles de la alta sociedad parisina, ellos son el Marqués de Mascarilla y el Vizconde de Jodelet. Las dos mujeres quedan embelesadas por las formas y palabras de Mascarilla que, al parecer, sabe de poesía, de retórica, de música, de teatro... En fin, que conoce todas las artes y todos los saberes. Más tarde aparece Jodelet como si se tratase de un buen y viejo amigo de Mascarilla que había conocido en la guerra, así las primas no se pelearán por un hombre, y cuando ya están prácticamente conquistadas por ellos y han comenzado a bailar con los jóvenes aparecen La Grange y Du Croisy, que pegan a sus criados y los reprenden por haberles robado las ropas y pretender ser de una clase que no es la suya. Antes de marcharse, hacen que sus criados se quiten sus ropas para que Madelón y Cathos vean como son realmente sin ropas caras ni nada y descubriendo por fin la mentira. A la salida se encuentran con Gorgibus a quien le cuentan lo ocurrido, este reprende a su hija y a su sobrina pues tendría que cargar con la afrenta sin poder hacer nada ya que La Grange y Du Croisy solo habían actuado porque se habían sentido ofendidos por el trato que habían recibido de parte de las dos mujeres no porque tuvieran ningún otro conflicto con la familia.

Molière escribió “Tartufo” en 1664 y se convirtió en una obra realmente polémica en la que Molière denuncia la hipocresía religiosa. Se trata de una comedia en cinco actos que cuenta la historia de una familia en la cual la abuela, Madame Pernelle, y el padre, Orgon, están bajo el influjo de un falso beato al que Orgon ha acogido en su casa, Tartufo. El resto de la familia es consciente de que Tartufo es un hipócrita que solo busca beneficiarse de la buena fe de Orgon y de su dinero, que se aprovecha de sus bienes y de él y que Orgon está demasiado ciego como para verlo, tanto es así que aunque había consentido el matrimonio entre su hija Mariana y su amante Valerio llega a retractarse porque pretende desposar a su hija con Tartufo para que este pase a ser parte de la familia y además hacerle entrega así de una gran cantidad de bienes. Tartufo se encuentra en ese momento en el punto de mira de toda la familia, que intenta hacerle ver a Orgon que está equivocado con respecto a él, y comete un error al declararle su amor y su pasión a Elmira, la mujer de Orgon. Damis, el hijo de Orgon, escucha la declaración y pese a que su madrastra le dice que no se lo cuente a su padre para no encolerizarlo, Damis, que no puede soportar más la situación delata Tartufo ante su padre, que se niega a creer lo que dice su hijo y lo expulsa de su casa, creyendo antes al devoto Tartufo que a su propio hijo. El cuñado de Orgon, Cleanto, intenta que Tartufo hable con Orgon para que de permiso a su hijo para volver a casa pero Tartufo se niega a hacerlo utilizando como excusa la religión, diciéndole que el cielo no le permite hacer tal cosa, Cleanto insiste y apela a su honradez pero Tartufo lo ignora y se marcha. Al final y viendo que Orgon no cede, su esposa decide probarle realmente cómo es Tartufo y hace que se esconda bajo una mesa mientras ella habla con Tartufo, mintiéndole para que crea que ella también lo ama para que se delate y es ahí cuando por fin Orgon se da cuenta de la verdad, que Tartufo no era más que un falso beato y un hipócrita devoto y permite que su hijo vuelva a casa. Sin embargo, Tartufo, con una carta de donación de todos los bienes de Orgon firmada por él mismo se marcha dejando claro que va a vengarse y llevándose además un cofre en el que Orgon guarda por un amigo suyo y que puede servir para que lo encarcelen. Al final, avisan a Orgon de que tiene un día para vaciar su casa y salir de ella y más tarde aparece Tartufo con un oficial dispuesto a detener a Orgon aunque el final de la historia, esta toma un giro inesperado, pues al que detienen finalmente es a Tartufo ya que el rey, en su sabiduría, no se había fiado de él en un principio y ya sabía que era un mentiroso por lo que quería ver hasta donde llevaba sus mentiras antes de detenerlo. Como final feliz, el rey anula los papeles en los que Orgon le cede todos sus bienes a Tartufo y lo perdona recordando los antiguos servicios que Orgon le prestó. Orgon, realmente feliz, vuelve a consentir el matrimonio de su hija con Valerio pues el joven lo había avisado de que las

autoridades iban a apresarlo por culpa de Tartufo y le había incluso llevado un carro para ayudarlo a huir si fuera necesario. Por último, “El avaro” es una comedia en cinco actos escrita por Molière en 1668. Esta comedia habla de un hombre muy tacaño llamado Harpagón para el que el dinero lo es todo y que no se fía ni de su sombra y siempre cree que todo el mundo ya sean criados, amigos o familia van a robarle todo su dinero. Sus hijos, Cleanto y Elisa, quieren casarse con sus amados, Mariana y Valerio respectivamente, pero no quieren decírselo a su padre por miedo a una negativa. El amante de Elisa, Valerio, para poder estar con ella comienza a trabajar para Harpagón, halagándolo y dándole la razón en todo para ganarse su favor mientras que la enamorada de Cleanto es una hermosa joven llamada Mariana que vive sola con su madre a la que cuida y quiere mucho y prácticamente por la que se desvive pero no pertenece a una familia demasiado acaudalada lo que podría suponer un problema a la hora de que Harpagón acepte el matrimonio de su hijo. Cuando por fin Cleanto va a comunicarle sus intenciones a su padre, este los sorprende a él y a su hermana con el anuncio de que pretende casarse y, además, con la enamorada de Cleanto lo que molesta al joven. Por otro lado Harpagón le anuncia a Elisa que ha encontrado un marido para ella, Anselmo, que aceptaría casarse con ella sin dote razón por la que prácticamente sin pensarlo Harpagón accede pues si puede ahorrarse el dinero de la dote y casar a su hija mucho mejor. Ella intenta oponerse a este enlace por todos los medios pero no consigue nada y junto a Valerio intentan tramar un plan para posponer la boda que sería esa misma noche y conseguir tiempo antes de poder estar finalmente juntos y casados. Frosina, una mujer que trata de beneficiarse de unir a Harpagón y a Mariana miente a este sobre el interés que tiene la mujer en él alabando todas sus virtudes y embelleciendo sus defectos para sacar provecho de él pero no consigue nada. Frosina consigue concertar una cena en casa de Harpagón a la que acudirá Mariana y es entonces cuando se entera de que Mariana y Cleanto están enamorados y decide ayudarlos pensando una estratagema para que Harpagón olvide a Mariana como es encontrar a alguien que se haga pasar por una mujer más mayor que Mariana y con mucho dinero para que Harpagón quiera casarse con ella, precisamente, por el dinero que realmente no tendrá aunque esto no llega a suceder ya que Harpagón descubre que Cleanto quiere casarse también con Mariana y pelean por ello. Buscan como juez al cocinero y a la vez cochero, Maese Santiago, que tras haberse llevado ya un castigo por decir la verdad a Harpagón decide mentir y les dice a cada uno lo que quiere oír, logrando que hagan las paces momentáneamente hasta que se dan cuenta de que el otro no ha cedido y ninguno ha conseguido su propósito. Harpagón termina por decirle a su hijo que lo abandona e incluso que lo deshereda si no cambia de parecer pero Cleanto no cede.

Después de la discusión, el sirviente de Cleanto, Flecha, roba el tesoro de Harpagón y los dos se marchan antes de que él los descubra. Harpagón llama a un comisario para que investigue el robo y hace llamar a Maese Santiago para preguntarle y este aprovecha la ocasión para vengarse de Valerio, a quien odia por adular a Harpagón y lo acusa de ser el ladrón. Cuando mandan llamar a Valerio este se declara culpable porque cree que de lo que lo acusan es de ser el amante de Elisa y cuando al final se lo dice a Harpagón este se niega a aceptar que se casen pues a sus ojos no es más que un sirviente y, además, un ladrón pues de lo primero que se preocupa siempre es de su dinero. Al final se desvela que Valerio viene de una familia noble de Nápoles y que todos habían muerto en un naufragio menos él. Anselmo, el prometido de Elisa, que había llegado allí poco antes confirma su historia porque resulta ser el padre de Valerio y de Mariana, que a su vez, resulta ser hermana de Valerio. Así, Anselmo consiente que sus hijos se casen con Elisa y Cleanto que en poder del dinero robado de Harpagón le hace elegir a su padre entre el dinero y Mariana. Hasta el final Harpagón hace gala de su excesiva tacañería pero al menos consiente que sus hijos se casen con Valerio y Mariana después de todo... Y consigue recuperar su dinero y, además, que Anselmo corra con todos los gastos de la boda.

II. MARCO HISTÓRICO. En las obras no se hace mención directa de nombres de personajes famosos o distinguidos de la época excepto en la obra de “Tartufo” en la cual hace que intervenga en la acción la figura del rey que, extrapolado a la realidad, se trata de Luis XIV defensor y amigo de Molière. Así, por lo que podemos ver en esta obra, Molière describe al rey como “príncipe enemigo del fraude (…) cuyos ojos leen en los corazones y a quien no engaña todo el arte de los impostores”, además alaba su capacidad de perdonar y sus ganas de ayudar y socorrer a sus súbditos. En otras palabras, Molière retrata al rey como defensor de los hombres buenos y justos y detractor de los mentirosos e hipócritas. Esta falta de nombres de personajes contemporáneos se entiende dentro del ámbito del teatro pues los dramaturgos escribían sus obras con la intención de que triunfaran y pudieran representarse en otras ciudades o incluso países donde podrían no entenderse ciertas referencias si se mencionaban nombres propios así, evitando los nombres propios, se puede incluso ir más allá del espacio y extrapolar las historias que cuenta Molière no solo a otras regiones, países o continentes sino también a otras épocas y por esto los dramaturgos suelen evitar poner muchos nombres propios pese a que en las figuras de reyes o nobles describen a sus propios monarcas o nobles de su ciudad. Sin embargo sí que aparecen numerosas menciones a personajes clásicos o literarios en las tres obras. Tanto en “Tartufo” como en “El Avaro” habla de los oráculos. Es en “Tartufo” donde

además menciona a un personaje histórico, en este caso, Catón. Para burlarse de su cuñado, Orgon dice que es “un oráculo y Catón de nuestro siglo” haciendo referencia al político e historiador romano. En “El Avaro” es Harpagón quien dice del joven Valerio que “Eso es hablar como un oráculo. ¡Dichoso aquel que puede tener un criado de este género!”. Es también en “Tartufo” donde Molière, en actitud de sátira, hace que el personaje de Madame Pernelle compare las asambleas populares, la famosas reuniones de artistas parisinos y los bailes con la torre de Babel haciendo una referencia bíblica y queriendo decir que eran lugares y reuniones llenas de perversiones y que no estaban

bien

vistas

por

una

parte

muy

religiosa

y

estricta

de

la

sociedad.

Siguiendo con las referencias a la antigüedad clásica, cabe destacar que estas aparecen sobre todo en “Las preciosas ridículas” y en “El Avaro”. En la primera son sobretodo Madelón y Cathos las que más mencionan esta época con su extraño lenguaje que ni su propia sirvienta entiende (“Ya veo que es realmente un Amílcar”) mientras que en “El Avaro” es Frosina quien nombra a una serie de personajes mitológicos grecorromanos (“Tiene en su cuarto algunos cuadros y estampas; mas ¿qué creéis que son: Adonis, Céfalo, Paris y Apolo? No. Bellos retratos de Saturno, del rey Príamo, del anciano Néstor y del buen padre Anquises, a hombros de su hijo.”). Es también en “Las preciosas ridículas” donde en lugar de pedirle un espejo a su sirvienta piden “el consejo de las Gracias”, haciendo referencia a las diosas del encanto, la belleza, la naturaleza, la creatividad humana y la fertilidad en la mitología griega. Como última referencia destacable a la antigüedad clásica es la que realiza la sirvienta de Madelón y Cathos, Marotte, quien enfadada con sus amas les dice “¡Diantre! No entiendo latín y no he aprendido como vos la filosofía en el Gran Ciro.”, esto hace referencia a la “Ciropedia” escrita por Jenofonte en la cual se usa al personaje de Ciro para dar marco a reflexiones morales y filosóficas y se presenta a Ciro II el Grande como monarca ideal. Siguiendo en el ámbito de referencias literarias cabe destacar también la que hace Molière en El avaro a Panurgo, un personaje sacado de las novelas de François Rebelais, “Gargantúa y Pentagruel”. Es el siervo de Cleanto, Flecha, quien le dice a su señor “Os veo, señor, aunque ello os desagrade, tomar el mismo camino que seguía Panurgo para arruinarse, tomando dinero anticipado, comprando caro, vendiendo barato y dilapidando su hacienda por adelantado.”, comparando a su señor con el amigo de Pentagruel que aparece en el libro tercer de las novelas de Rebelais, autor francés del siglo XVI. Dejando a un lado a los personajes históricos o incluso mitológicos que Molière menciona en sus obras, además, refleja en estas parte del marco histórico de la época haciendo alusión a ciertos conflictos que se dieron a lo largo de los siglos XVI y XVII en Europa. Un ejemplo claro de esto es cuando en “El Avaro”, Frosina dice que “...y creo que, si se me metiera en la cabeza, casaría al Gran Turco con la República de Venecia.”, esta frase se refiere a la Gran Guerra Turca que azotó Europa en el siglo XVII y que duró desde 1645 a enero de 1699 por lo que cuando Molière escribió

su obra esta guerra estaba aún en su primera fase en la cual el imperio otomano, con ayuda de sus aliados y estados vasallos, atacaba a los estados cristianos por separado entre ellos el sacro imperio romano germánico y, como menciona Molière en su obra, la república de Venecia. Molière trata dos conflictos más como son la revolución de Nápoles de 1647-1648 y el sitio de Malta de 1565 por el imperio otomano, este último no es algo que tenga seguro al cien por cien pero investigando y buscando relación con la frase que aparece en “Las preciosas ridículas” me ha parecido que hacía alusión a este suceso cuando Jodelet decía “Nuestra amistad se forjó en la guerra, y la primera vez que nos vimos mandaba él un regimiento de caballería en las galeras de Malta.” aunque quizá puede ser una mentira que crean los personajes de Mascarilla y Jodelet para hacerse una fama y encandilar así más y mejor a las dos jóvenes pero sí que es cierto que los turcos llevaron un número enorme de galeras para sitiar Malta y por eso me ha parecido encontrar relación entre la frase y el suceso histórico. Por otro lado la mención a la revuelta de Nápoles del siglo XVII es clara ya que no cabe duda que se refiere a la revuelta popular instigada por Masaniello y Giulio Genoino contra el régimen español en la cual numerosas familias acaudaladas huyeron para no verse inmersos en los incidentes que esto provocó así que cuando Anselmo, en “El Avaro”, dice “el hombre de quien nos habláis pereció en el mar con sus hijos y su esposa al querer salvar sus vidas de las persecuciones que acompañaron las revueltas de Nápoles y que hicieron expatriarse a varias nobles familias.”, se refiere claramente a este hecho.

III. GEOGRAFÍA. Las tres obras se desarrollan en Francia, en la ciudad de París en particular y reflejan la sociedad parisina del siglo XVII. El escenario de cada una de las obras es la propia casa de los protagonistas, es decir, en el caso de “Las preciosas ridículas” la casa de Gorgibus, en “Tartufo” la de Orgon y por último en “El Avaro” la casa de Harpagón. Sin embargo, dentro de la propia ciudad de París, Molière menciona ciertos lugares como el Louvre, donde se encuentra el antiguo palacio real de época medieval que ha ido evolucionando desde el siglo XVI hasta cómo podemos encontrarlo hoy en día si visitamos París. Molière hace alusión en “Las preciosas ridículas” a la práctica que tenían algunas personas de asistir, en la época, a la entrada del rey en el lecho (“Id y volved a recogerme dentro de un rato para ir al Louvre y asistir a la entrada del rey en el lecho.”). Otro de los lugares de París que menciona es una feria, en “El Avaro”, este tipo de ferias se realizaban en Europa desde la época medieval y eran muy famosas pues en ellas artesanos y comerciantes de muchísimos lugares acudían a publicitar y vender sus productos y comprar en ellas era algo prácticamente reservado a la gente más acaudalada pues a este tipo de ferias llevaban productos difíciles de obtener o propios de

sus lugares de procedencia, es decir, no tenían productos típicos que se podían encontrar en el mercado de la ciudad cada semana. Por último, pero no menos importante, cabe destacar la mención casi constante en “Tartufo” a la iglesia. Por la temática y la intencionalidad de la obra este hecho es normal y, junto con todas sus alusiones a la religión, refleja la importancia de la religión en la época. Por otro lado, el autor hace referencias indirectas a otros lugares en sus obras. En “Tartufo”, en la escena cuarta del último acto, aparece un personaje natural de Normandía, el alguacil de justicia llamado Leal. Mientras que en “El Avaro” hay varios personajes procedentes de la ciudad italiana de Nápoles (Valerio, Anselmo, Mariana y su madre), también menciona un navío español que fue quien salvó a Valerio de morir ahogado tras el naufragio de su barco y de la ciudad, también italiana, de Génova, donde Mariana y su madre acudieron para recoger los restos de una herencia antes de llegar, finalmente, a París. Sin embargo, “Las preciosas ridículas” tan solo cuenta con personajes franceses, que no parisinos, pues Cathos y Madelón son de fuera de la ciudad y acaban de llegar a ella.

IV. GRUPOS SOCIALES Y SOCIEDAD DE LA ÉPOCA. En las obras de Molière se ven reflejados siempre dos grupos sociales principales que se encuentran muy bien definidos: Los amos y los siervos. Estos son los dos grupos integrantes de la acción prácticamente en su totalidad pese a que, en algunas obras, puedan aparecer otros grupos como agentes de la ley por ejemplo. Dentro de estos dos grupos sociales hay diferencias claras que explicaré a continuación.

Me centraré ...


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