Trastornos DE LA Inteligencia - Monografía - Grupo 06 7 PDF

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Universidad Autónoma del Perú FACULTAD DE HUMANIDADES ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE PSICOLOGÍA

ESTUDIANTES:

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Bruno Conza, Brunela.

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Berrocal Villegas, Piero.

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Salvatierra Villanera Omar

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Marchan Sanabria Kiamara

DOCENTE: Caller Luna, Juan Bautista

CURSO: Psicología Clínica

TEMA: Trastornos de la Inteligencia

CICLO: IV

SECCIÓN: “A”

LIMA SUR – PERÚ 2020

ÍNDICE Página CARÁTULA

I

INTRODUCCIÓN

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CAPÍTULO I: DEFINICIÓN

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1.1.- BASES TEÓRICAS

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CAPÍTULO II: FACTORES DE LA INTELIGENCIA 2.1. FACTOR BIOLÓGICO 2.2. FACTOR SOCIOLÓGICO 2.3. FACTOR PSICOLÓGICO 2.3.1. Estimulación Temprana CAPÍTULO III: TRASTORNOS DE LA INTELIGENCIA 3.1. RETRASO MENTAL 3.1.1. Coeficiente Intelectual (CI) 3.2. DEMENCIA 3.3. ALZHEIMER 3.3.1. Síntomas del Alzheimer 3.3.2. Factores de Riesgo 3.3.2.1. Edad 3.3.2.2. Antecedentes Familiares 3.3.3. Etapas Clínicas del Alzheimer 3.3.3.1. Temprana (Leve) 3.3.3.2. Moderada (Intermedia) 3.3.3.3. Avanzada (Severa) 3.3.4. Tratamiento 3.4. OLIGOFRENIAS O DISCAPACIDAD INTELECTUAL CONCLUSIONES REFERENCIAS

INTRODUCCIÓN La presente investigación hace énfasis al estudio de los trastornos de la inteligencia, sus características y clasificación. A lo largo del tiempo, el término “inteligencia” ha ido teniendo una serie de propuestas por diferentes autores con la finalidad de establecer ciertas definiciones.

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CAPÍTULO I: DEFINICIÓN

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I. DEFINICIÓN Si nos ponemos a indagar acerca de la inteligencia, encontraremos amplia información que nos explique de manera amplia y detallada, pues hasta el momento hay muchos autores e investigadores que han realizado múltiples aportaciones referentes a la definición de la inteligencia, muchas de ellas se basan en las habilidades y capacidades que el ser humano pueda poseer. Ardila (2011) afirma: Inteligencia es un conjunto de habilidades cognitivas y conductuales que permite la adaptación eficiente al ambiente físico y social. Incluye la capacidad de resolver problemas, planear, pensar de manera abstracta, comprender ideas complejas, aprender de la experiencia. No se identifica con conocimientos específicos ni con habilidades específicas, sino que se trata de habilidad cognitiva general, de la cual forman parte las capacidades específicas. En tal sentido, la inteligencia implica mucho el conocimiento general que tengamos pues a partir de ello podemos relacionar nuevas ideas e información de tal manera que adquirimos nuevos conocimientos para relacionar con los previos. Asimismo, Trull y Jerry (2005), definen la inteligencia como una capacidad mental muy general, que a su vez incluye la habilidad de solucionar problemas, plantear una idea, pensar de manera abstracta, entender ideas complicadas y aprender de la experiencia. 1.1. BASES TEÓRICAS

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CAPÍTULO II: FACTORES DE LA INTELIGENCIA

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II. FACTORES DE LA INTELIGENCIA 2.1. FACTOR BIOLÓGICO 2.2. FACTOR SOCIOLÓGICO

Este tipo de trastorno se debe por la falta de estimulación, podría presentar una falla en la capacidad intelectual, Al inicio del desarrollo esta falta de estimulación puede corregirse, si se deja pasar puede traer resultados irreversibles. La falta de afectividad y de estimulación puede disminuir la capacidad de inteligencia. Según Gottfredson (2005) La personas con inteligencia límite constituyen una franja de población relativamente amplia, que se ve obligada a afrontar numerosos obstáculos a lo largo del ciclo vital, incrementando el riesgo de dificultades a nivel educativo, social y en términos de salud mental. Los trastornos del desarrollo intelectual (TDI) son una serie de alteraciones caracterizadas por un bajo nivel de inteligencia y limitaciones en el comportamiento adaptativo. Los métodos utilizados para estimarla, Los TDI se definen como un grupo de trastornos del desarrollo caracterizados por una notable limitación de las funciones cognitivas, del aprendizaje y de las habilidades y conductas adaptativas. 2.2.1 Investigación y atención de los TDI en América Latina Según UNICEF (2019) en vista de los datos, es imprescindible reducir la carga a la salud y la carga económica de los trastornos mentales, y se aconseja a los países y regiones prestar mayor atención a nuevos modelos de aprendizaje y medidas preventivas. En general, las personas con TDI tienen dificultades con la comprensión verbal, el razonamiento perceptivo, la memoria de trabajo y la rapidez de procesamiento. Las personas con TDI frecuentemente tienen dificultades para manejar su comportamiento, emociones y relaciones interpersonales y para mantener la motivación en el proceso de aprendizaje. Los TDI están ausentes de las agendas legislativa, judicial, educativa, de salud y social.

2.3. FACTOR PSICOLÓGICO Además del factor biológico y sociológico que influye en la inteligencia del individuo, esta capacidad tan importante también destaca el factor psicológico, pues este va a resaltar la estimulación temprana y hacer énfasis en que todos los seres humanos 8

nacemos con un potencial intelectual determinado principalmente por las características genéticas.

2.3.1. ESTIMULACIÓN TEMPRANA En los primeros años de vida, los estímulos y la influencia externa que recibe el bebé, ejercen un papel importante sobre su desarrollo, pues están actuando sobre contexturas que están en pleno proceso de maduración y crecimiento. La estimulación temprana, atención temprana o también llamada estimulación precoz, son un grupo de técnicas que se aplican en niños entre el nacimiento y aproximadamente los 6 o 7 años de edad. Sirve para optimizar el desarrollo del niño y mejorar al máximo sus capacidades y habilidades. Además, sirve para prevenir la aparición de enfermedades o alteraciones del sistema nervioso. El objetivo que tiene la estimulación temprana es aportar beneficiosamente al desarrollo físico, cognitivo, social y emocional del infante, de modo que potencie sus capacidades y fortalezca la formación de su autoestima. Respecto a su origen, la estimulación temprana surgió como un cambio que se posicionó como una intervención que influye mucho en distintos ámbitos. Por su parte, Barreno & Macías (2015) refieren que la estimulación temprana se sitúa en los años 60, cuando se dan varios cambios generales, gubernamentales, científicos y en los procesos de formación. Se inicia la implementación de este tipo de intervención, a la que se denominó en sus inicios Estimulación Precoz. En tal sentido, la estimulación temprana, antiguamente, conocida con otro nombre, realiza un papel importante en el desarrollo del infante que se encuentra en plena formación motora y cognitiva. Por otro lado, antes que se iniciara esta implementación, la sociedad adoptaba actividades que beneficien a la estimulación de sus hijos y que potencie el desarrollo de su inteligencia. Muchos estudios describen acerca del promedio de edad adecuado en el que se debe aplicar la estimulación temprana en el infante. Por su parte Papalia & 9

Duskin (2005) afirman que, “el cerebro recibe estimulación a través de los sentidos, movimientos y solo se puede llegar a su máximo potencial a través de otorgarle las oportunidades de aprendizaje en los 6 primeros años de vida que es en donde se desarrolla neurológicamente la inteligencia emocional y cognitiva” (p.112). En este sentido, las intervenciones tempranas darían un resultado óptimo si se empieza a aplicar de forma prematura y más aún si estas continúan su proceso efectivo a través de la etapa preescolar. Por supuesto que todo lo mencionado, tendrá que ir acompañado de la supervisión de los padres o cuidadores del menor para obtener resultados eficaces en beneficio del infante.

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CAPÍTULO III: TRASTORNOS DE LA INTELIGENCIA

III. TRASTORNOS DE LA INTELIGENCIA 3.1. RETRASO MENTAL 3.1.1. COEFICIENTE INTELECTUAL (CI) 3.2. DEMENCIA El Organismo Mundial de la Salud (OMS) sostiene que la demencia es un síndrome caracterizado por la pérdida progresiva de la función cognitiva, afecta a la memoria, pensamiento, orientación, comprensión, capacidad de aprendizaje, cálculo y el raciocinio. Tenemos también que la OMS reconoce a la demencia como una prioridad de salud pública. 11

Este tipo de síndrome puede afectar a personas de cualquier edad, Mayormente afecta a las personas de 60 años, la mayoría de demencia empeoran con el tiempo y la recuperación de la persona es irreversible, aquellas personas que con demencia con frecuencia necesitan ayuda para su cuidado personal, presentan dificultades al comunicarse y en las tareas diarias. 3.2.2 Síntomas o Características Etapa Temprana: Pasa desapercibida por las personas

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Síntomas: Perdida de la noción del tiempo, tendencia del olvido, desubicación espacial 

Etapa Intermedia: Los síntomas se vuelven evidentes, en esta etapa las personas tienden a olvidar acontecimientos, muestra perdida orientación, dificultad para comunicarse y presentan dificultad al asearse

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Etapa Tardía: Última etapa de la enfermedad, la dependencia e inactividad abarca casi la totalidad de la persona.

3.2.3 ¿Cómo se diagnostica la demencia? Actualmente no existe un examen médico que te muestre el resultado, lo que se hace es un reconocimiento médico completo, factores que influyen en la demencia son los medicamentos y derrames cerebrales que posee el paciente. El equipo conformado consta de médicos, neuropsicología, profesionales del habla y lenguaje, familia y personas cercanas del paciente. 3.2.4 Tipos de demencia 

Demencia con cuerpos de Lewy: Causa las alucinaciones, problemas con el movimiento, y una disminución de la habilidad cognitiva

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Demencia Frontal – Temporal: Afecta a la personalidad y el habla pero no afecta la memoria. Afecta dos partes del cerebro el temporal y el frontal

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La enfermedad del Alzheimer

El tipo de demencia más común y mejor estudiada, afecta hasta un 70% de las personas a las que se les diagnostica demencia Afecta a la memoria y después la enfermedad progresa a afectar a otras habilidades cognitivas

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Demencia Vascular

2do tipo de demencia más común Este tipo de demencia muchas veces es el resultado de un derrame cerebral, se da por la obstrucción de los vasos sanguíneos o lesiones que causan hemorragias en el cerebro 3.2.5 Causas La demencia ocurre debido a la disminución de funcionalidad del cerebro 3.2.6 Tratamiento A veces las medicaciones y las drogas pueden demorar la progresión de la demencia. Lo más común es aplicar técnicas de reeducación de comportamiento para ayudar a la persona a recordar información importante o a efectuar las actividades cotidianas. Terapia Cognoscitiva (modificar el entorno): reducir el desorden y el ruido Terapia del comportamiento: prevenir caídas, mejorar el comportamiento Fomentar el ejercicio físico, participación de actividades diversas 3.2.7 Prevención La mayoría de las enfermedades neurodegenerativas carecen de medidas preventivas, Los estudios señalan que la mejor estrategia para retrasar el desarrollo de una demencia degenerativa es actuar sobre los elementos modificables como la hipertensión arterial, diabetes, tabaquismo.

3.3. ALZHEIMER La enfermedad de Alzhéimer o también llamado demencia senil de tipo Alzhéimer (DSTA), es una enfermedad progresiva que ataca mayormente a las personas de 65 años en adelante. Por lo general, cuando hablamos de esta enfermedad, las personas suelen asociar el daño solamente al deterioro de la memoria, sin embargo, los daños que ocasionan este

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mal, son muchos más amplios. Ariza (2020) afirma que “Esta enfermedad afecta las funciones mentales superiores, es decir la inteligencia, la memoria, el lenguaje y la capacidad de entender y aprender” (p.1). En tal sentido, el alzhéimer afecta las capacidades prioritarias del individuo, lo cual termina dificultando sus actividades diarias, pues estas se vuelven complicadas de realizar. 3.3.1. SÍNTOMAS DEL ALZHEIMER El síntoma más común y que se hace notar a simple vista es la falta de capacidad para recordar información que se adquirió un breve tiempo atrás, es decir, recientemente. Conforme el alzhéimer va avanzando, la mayor parte del cerebro se va dañando. Según la Alzheimer’s Association (2016) “La destrucción y la muerte de las células nerviosas provocan fallas en la memoria, cambios en la personalidad, problemas para llevar a cabo las actividades diarias y otros síntomas de la enfermedad de Alzheimer” (p.7). Es por ello que el cerebro y las funciones ejecutivas del individuo se ven deterioradas, además se refleja en él, una serie de dificultades y limitaciones en relación a su aprendizaje y por consiguiente al nivel de su coeficiente intelectual. Agregado a esto, la persona que padece de alzhéimer tiende a desorientarse con facilidad, experimenta cambios de humor debido a sus limitaciones y a algunas partes dañadas en el cerebro. Por otro lado, siente una profunda confusión en relación a ciertos eventos que tenga pues en muchas ocasiones no recuerda la hora, la fecho o el lugar. Cuando el paciente de alzhéimer se encuentra en un estado crítico y avanzado, este experimenta una serie de dificultades para hablar, caminar y siente una profunda sospecha inexplicable de parte de familiares y cuidadores. 3.3.2. FACTORES DE RIESGO Aunque las causas de esta enfermedad aún no son demostradas científicamente, existen ciertos factores de riesgo que magnifican la probabilidad de adquirir el mal de Alzheimer. 3.3.2.1. EDAD 14

La edad es uno de los factores de riesgo más conocidos por las personas, pues si bien es cierto, es una enfermedad popularmente conocido por atacar a las personas aproximadamente de 65 años a más. Según los estudios de la Alzheimer’s Association (2016) “Una de cada nueve personas de este grupo de edad tiene la enfermedad de Alzheimer. Casi un tercio de las personas de 85 años o más tiene la enfermedad de Alzheimer” (p.8). En efecto, se evidencia que los adultos mayores son más proclives a sufrir del mal de alzhéimer. 3.3.2.1. ANTECEDENTES FAMILIARES Muchos estudios han demostrado que las personas que tengan familiares cercanos que hayan padecido o sufran este mal, es probable que también pasen por ello a una cierta edad. La Alzheimer’s Association (2016) afirma que “El riesgo aumenta si más de un miembro de la familia padece la enfermedad” (p.8). En tal sentido, las personas que tienen o tuvieron este tipo de familiares se convierten en vulnerables o posibles personas que sufran este mal. 3.3.3. ETAPAS CLÍNICAS DEL ALZHEIMER En la evolución de la enfermedad de alzhéimer se evidencian tres etapas que la persona experimenta según el estado en el que se encuentre. 3.3.3.1. TEMPRANA (LEVE) En la primera etapa es posible que el individuo aún lleve una vida independiente, pues recién empezará a notar los primeros olvidos que probablemente las confunda con pequeñas lagunas en su memoria episódica, por ejemplo, puede olvidar un texto que acaba de leer, puede perder objetos de forma repetitiva u olvidar en dónde tenía que poner tal objeto. Generalmente los familiares y amistades cercanas al darse cuenta del pequeño problema que atraviesa el individuo, pueden optar por dos alternativas; burlarse o preocuparse, siendo la primera, la persona que

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atraviese esta enfermedad entrará en un cuadro de confusión, asimismo, experimentará emociones fuertes y se cuestionará en todo momento. 3.3.3.2. MODERADA (INTERMEDIA) Esta etapa es generalmente larga y puede durar varios años, el individuo experimenta una serie de confusión pues puede confundir palabras, y tiene dificultades para vestirse, por ello, tiende a enojarse con facilidad o sentirse frustrado por no poder realizar actividades rutinarias que antes lograba con facilidad. Además, son frecuentes los problemas para controlar la orina o deposición, asimismo, se encuentran en riesgo de perderse con facilidad si no caminan con alguna persona que la oriente pues ya no recuerdan su dirección exacta, número de teléfono o lugar donde llevaron a cabo sus estudios. Por otro lado, surgen síndromes y trastornos del lenguaje. Según Donoso (2003) se agregan afasias, apraxias y elementos del síndrome de Gerstmann. Para hablar de afasia nos guiamos por los defectos de la expresión, una anomia evidente y especialmente parafasias (fonémicas o semánticas); la comprensión puede fallar desde la primera etapa por defectos de atención o memoria. En efecto, la segunda etapa trae problemas más agravados, los cuales se deben tomar con seriedad pues se trata de la salud y falta de capacidades del individuo. La familia debe ser el principal apoyo emocional que el paciente pueda tener pues, en estos casos, el individuo tiende a caer en depresión y manifestar conductas evitativas. 3.3.3.3. AVANZADA (SEVERA) En esta etapa final, el paciente tiende a perder la capacidad para reconocer su entorno, cabe destacar que olvida completamente a familiares, amistades y las vivencias que tuvo con ellas. Es lamentable para la familia del paciente pues el individuo deja de responder a muchos estímulos, a pesar que digan algunas palabras o frases, son incapaces de mantener una conversación 16

fluida, el cerebro se ve afectado de forma severa, tal es así que sus destrezas cognitivas y sociales se van reduciendo progresivamente. Así como también se vuelve vulnerable a otras enfermedades como la neumonía. Es fundamental recalcar el rol tan importante que el cuidador o la familia del individuo debe tener, pues se necesita de mucha responsabilidad para atender a una persona que tiene el mal de alzhéimer. Por lo tanto, el cuidador debe estar acompañando el proceso y entender que este tipo de personas requieren un cuidado rutinario y de 24 horas, por ello deben apoyar las necesidades que el paciente pueda tener.

3.3.4. TRATAMIENTO Actualmente no hay una cura para el mal de Alzheimer, sin embargo, existe un tratamiento estricto que consiste en potenciar al paciente de forma cognitiva, todo ello acompañado de fármacos que reducen la presión arterial y mejoran la función mental con la finalidad de estabilizar el estado de ánimo del paciente. Asimismo, se destaca el tratamiento que no incluye fármacos, el cual vendría a ser de cuidado personal que se basa más que todo en el ejercicio físico cuidadoso que tiene como finalidad mejorar la salud cardiovascular del paciente. 3.4. OLIGOFRENIAS O DISCAPACIDAD INTELECTUAL

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CONCLUSIONES 

La estimulación temprana es vital para fortalecer el desarrollo de infante ya que ayuda a mejorar al máximo su capacidades y habilidades para que pueda desarrollar su inteligencia.

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La enfermedad de alzhéimer ataca en su mayoría a los adultos mayores, además se ve acompañada de perdida de capacidades prioritarias que le arrebata al individuo que padece de este mal. Por ello es importante el rol que tiene la familia o el cuidador, pues estos deben ser responsables y tomar en cuenta la seriedad del caso, además deben acompañar el proceso de la enfermedad y aportar con el apoyo emocional.

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REFERENCIAS: 

Alzheimer’s Association. (2016). Información básica sobre la enfermedad de.

alzhéimer. Recuperado de https://www.alz.org/national/documents/sp_brochure_basicsofalz.pdf

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Ardila, R. (2011, enero-marzo). Inteligencia. ¿Qué sabemos y qué nos falta por investigar?. Revista de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales. Recuperado de http://www.scielo.org.co/scielo.php? script=sci_arttext&pid=S0370-39082011000100009

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Barreno, Z., Macías, J. (2015, septiembre). Estimulación temprana para potenciar la inteligencia psicomotriz: importancia y relación. Ciencia UNEMI. Recuperado de

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