Conceptos Y Generalidades DEL Proyecto PDF

Title Conceptos Y Generalidades DEL Proyecto
Author edith zurita
Course Proyectos
Institution Universidad Politécnica Salesiana
Pages 8
File Size 528.5 KB
File Type PDF
Total Downloads 98
Total Views 163

Summary

Download Conceptos Y Generalidades DEL Proyecto PDF


Description

CONCEPTOS Y GENERALIDADES DEL PROYECTO ¿Qué es un proyecto? Una primera acepción hacia el término es la que se observa desde el Diccionario de la Real Academia Española, refiriéndose a este como “el conjunto de escritos, cálculos y dibujos que se hacen para dar idea de cómo ha de ser y lo que ha de constar una obra de arquitectura o ingeniería” (Real Academia Española, 2018). Perspectiva que queda sucinta a una realidad específicamente sesgada hacia el ámbito de las ciencias formales cuando, su acontecer, más bien es de un carácter amplio. Y, por ello, resulta beneficioso destacar la representación de Baca, quien lo concibe como una “solución inteligente al planteamiento de un problema, la cual tiende a resolver una necesidad humana” (2013, p. 2), dejándose de esta manera, una alternativa aproximada a un horizonte de razonamiento holístico y conveniente para quien emprende dicho propósito. Ahora bien, en la intención de desarrollar un proyecto, hacia cualquier alcance o dimensión que éste sea propuesto, Parodi (2001) reconoce el hecho de que su planificación debe responder a la sistematización de actividades entendidas desde una interrelación y que, sobre el objetivo a alcanzarse, estén debidamente coordinadas. Pero, además, implícitamente conforme lo examina Lira (2013), supondrá proveer o crear un valor a quienes recibirán el beneficio que otorgue el producto –resultado– que ha de concebirse tras su finalización. Las concepciones anteriormente admitidas, pueden adicionalmente ser complementadas con los aportes delineados por los grupos internacionales dedicados a establecer estándares para la gestión de proyectos. Así, conviene entonces, reconocer la contribución del Project Management Institute (PMI) en tanto que define al proyecto como un esfuerzo de carácter temporal –con principio y fin- ideado para elaborar un entregable, entendido como un producto, un servicio o un resultado, pero de carácter único (PMI, 2013). Por lo tanto, bajo dicho entender, quedará claro que cada intención por ejecutar un proyecto, aunque se pretenda proveer un entregable similar como por ejemplo un producto textil, cada iteración reconocerá circunstancias diferentes asociadas al espacio temporal, sus propios intervinientes (clientes, empresarios), el marco legal y normativo, los escenarios del mercado (competencia, productos similares), las condiciones sociales y económicas, la influencia tecnología u otros factores que, obligatoriamente fijarán una realidad propia y exclusiva para el entregable. Y, por su parte la Internacional Project Management Association (IPMA), más bien entiende que un proyecto es “una operación en la cual los recursos humanos, financieros y materiales se organizan de forma novedosa, para realizar un conjunto de tareas, según una especificaciones definidas, con restricciones de coste y plazo, siguiendo un ciclo de vida estándar” (AEIPRO, 2016), también orientadas a la consecución de cambios significativos especificados en los objetivos para los cuales dicha intención se hayan definido. Mostrándose desde esta visión, que un proyecto es algo más complejo que entiende de factores y componentes concretos que buscan garantizar un entregable de calidad y verdaderamente beneficioso. Entonces, desde las fundamentaciones anteriores, se ha de vislumbrar que por ejemplo son proyectos esfuerzos como: a) la construcción de un edificio, b) la implementación de un programa de marketing en un territorio nuevo, c) el desarrollo de un sistema geo referencial, o d) la ejecución de una campaña de vacunación. Concebidos así porque demandan la movilización de recursos, otorgan en entregable único y están delimitados además del tiempo, en costo y alcance principalmente. Sobre el tema de la temporalidad, no significa necesariamente que la duración del proyecto haya de ser corta. Se refiere más bien, a sus compromisos y longevidad. Y, es más, esta condición no se aplica al producto, servicio o resultado creado por el proyecto, puesto que la mayor parte de los ellos se emprenden para crear un resultado duradero que espera también otorgar un impacto social, económico o ambiental susceptible a durar más que su proyecto. Por ejemplo, un proyecto para construir una obra civil creará un resultado durará varios años. Así, es claro por lo tanto diferenciar que un proyecto es una intención que se constituye con el afán de construir el objeto producto tangible o intangible como, por ejemplo:  Un producto, que se constituye como elemento de otro desde la perspectiva de innovación.  Un servicio para la mejora de un proceso empresarial u organizativo (p. ej., una nueva instancia en un sistema de producción, la operatividad de un nuevo departamento);  Un documento (p.ej., un proyecto de investigación que desarrolla conocimientos que se pueden emplear para determinar si existe una tendencia o si un nuevo proceso beneficiará a la sociedad);  Una obra civil (p.je., un puente para comunicar dos regiones o comunidades);  La protección ambiental de un entorno como la restauración o reproducción a través de la optimización de recursos,  Una planta ensambladora en una nueva plaza de mercado, en el ámbito automotriz.  Una metodología (p.ej., la inclusión de actividades lúcidas en el proceso de enseñanza aprendizaje que busque desarrollar actividades para personas con déficit, de atención). De tal forma que, en escenarios normales, una vez que se ha alcanzado dicha finalidad, es el entregable lo que pertenece y el proyecto el que se extingue tal como se ilustra en la figura 1. Mientras que, en otros escenarios no exitosos, el proyecto podrá concluir por: a) decisión del cliente o interesado, b) falta de cumplimiento de objetivos, c) errores de planificación que demanden nuevas inversiones, d) cambio en el alcance del proyecto, e) cuando la necesidad que demandaba el proyecto ha finalizado. Figura 1. Temporalidad del proyecto

Principales características de los proyectos Todos los proyectos, conforme coinciden los autores, vienen a caracterizarse porque:  Cuentan con un propósito  Se resumen en objetivos y metas  Se han de ajustar a un plazo de tiempo limitado  Cuentan con, el menos, una fase de planificación, una de ejecución y una de entrega  Se orientan a la consecución de un resultado  Involucran a personas, que actúan en base a distintos roles y responsabilidades  Se ven afectados por la incertidumbre  Han de sujetarse a un seguimiento y monitorización para garantizar que el resultado es el esperado  Cada uno es diferente, incluso de los de similares características Relaciones entre Portafolios, Programas y Proyectos En función al ámbito al que se desee proponer soluciones de mejora, es posible que éstos se dimensionen por el espacio temporal extenso o que su definición de alcance también resulte compleja de vista hacia la consecución del objetivo final. Por lo tanto, el nivel de decisión y su planificación puede trascender de la extensión de un proyecto y, más bien, conviene atenderlo desde horizontes más amplios como las políticas, los portafolios (planes) o los programas (Gómez & Gómez, 2007). De acuerdo al PMbok (2013), la relación entre éstos se representa en que un portafolio agrupa un grupo de programas definidos para el cumplimiento de objetivos estratégicos; los programas a su vez concentran un grupo de proyectos más bien definidos para el cumplimiento de objetivos específicos desagregados de los estratégicos. De este orden, los portafolios se ejecutan en función a delinear acciones estratégicas (Gómez & Gómez, 2007), los programas se agrupan en un portafolio y comprenden subprogramas, proyectos o cualesquiera otros trabajos que se gestionan de manera coordinada para contribuir al portafolio, pero su particularidad es que están concebidos porque atienden la consecución de varios objetivos (Gonzáles, Alba & Ordieres, 2014). Los proyectos individuales, estén o no incluidos en el ámbito de un programa, siempre se consideran parte de un portafolio. Aunque los proyectos o programas del portafolio no son necesariamente interdependientes ni están necesariamente relacionados de manera directa, están vinculados al plan estratégico de la organización mediante el portafolio de la misma. Como se ilustra en la figura 2, las estrategias y prioridades de la organización se vinculan, y se establecen relaciones entre portafolios y programas, y entre programas y proyectos individuales. La planificación de la organización ejerce un impacto en los proyectos a través del establecimiento de prioridades entre los mismo teniendo en cuenta los riesgos, el financiamiento y otras consideraciones relativas al plan estratégico de la organización. La planificación de la organización puede guiar la gestión de los recursos y el apoyo a los proyectos que componen el portafolio basándose en categorías de riesgos, líneas de negocio especificas o tipos de proyectos generales, como infraestructura y mejora de los procesos. Figura 2: Interacciones entre la Dirección de Proyectos, la Dirección de Programas y la Dirección de Portafolios Fuente: PMI (2013)

Tipos de proyecto Cuando se habla de proyecto siempre es necesario especificar algo más que permita encuadrar el área o sector donde sus competencias se desarrollarán. Y según Baca (2013) existen muchos tipos de proyectos que pudieran esquematizar así:  Según el grado de dificultad que entraña su consecución: o Proyectos simples o Proyectos complejos  Según la procedencia del capital: o Proyectos o Proyectos o Proyectos mixtos públicos privados  Según el grado de experimentación del proyecto y sus objetivos: o Proyectos experimentales o Proyectos normalizados  Según el sector: o Proyectos de construcción o Proyectos de medio ambiente o Proyectos de energía o Proyectos industriales o Proyectos de minería o Proyectos de servicios o Proyectos de transformación  Según el ámbito o Proyectos de ingeniería o Proyectos matemáticos o Proyectos económicos o Proyectos artísticos o Proyectos fiscales o Proyectos literarios o Proyectos legales o Proyectos tecnológicos o Proyectos médicos o Proyectos informáticos  Según su orientación o Proyectos productivos o Proyectos comunitarios o Proyectos educativos o Proyectos de investigación o Proyectos sociales o

Según su área de influencia: o Proyectos supranacionales. o Proyectos internacionales. o Proyectos nacionales. Ciclo de Vida del Proyecto 

o o

Proyectos regionales. Proyectos locales.

La dimensión temporal del proyecto constituye otro de los principios universalmente aceptados dentro del cuerpo de doctrina del área de proyectos. Entonces, en este espacio temporal, puede asumirse que el proyecto parte desde la concepción misma de la necesidad y ha de concluir cuando ésta haya sido transformada conforme el alcance y definición de unos objetivos. Para ello y, con el afán de organizar la gestión pretendiendo apegarse en mayor medida a la planificación, se integra el proyecto en una sucesión de fases, actividades y actividades, normalmente organiza en función a poder asignar y distribuir los recursos. Los proyectos tienen un principio que corresponde a la generación de una idea; un crecimiento y desarrollo, relacionado con la formulación del mismo; una madurez, en las fases de ejecución y operación y, por último, un ocaso, coincidente con su obsolescencia y desaparición (Trueba, 1985). El Ciclo de Vida del proyecto como la secuencia de fases por las que pasará un proyecto para alcanzar sus objetivos, desde el lanzamiento hasta el cierre (IPMA, 2001). En el Ciclo del proyecto los hitos aparecen como eventos significativos en el proyecto que a menudo indican un cambio de fases, la decisión de retomarla o bien la de abordar otras fases precedentes (Orieres, 2001). Aunque dependiendo del tipo de proyecto se pueden aplicar diferentes fases, en el ciclo del proyecto es habitual diferenciar cuatro grandes fases:  Pre-inversión,  Ejecución del proyecto y  Inversión  Fase de análisis de resultados. La figura 3, muestra estas cuatro grandes fases y sus correspondientes hitos o eventos significativos que marcan la toma de decisiones entre ellas. Figura 3: Ciclo del Proyecto y sus principales decisiones

Fuente: Trueba, 2002 Tras esta fase de costes se pasa a la fase de explotación -operación y gestión del proyecto- en la que se genera una corriente de bienes y servicios futuros que tiene que ponerse a disposición y al alcance de la población afectada. Adicionalmente el proyecto, para una correcta comprensión de lo que es, debe considerarse inmerso en una serie de actuaciones que van desde que surge la necesidad de abordar una determinada obra, hasta que haya expirado la vida útil de esa obra ejecutada y, en consecuencia, se hace precisa la reforma, ampliación de la misma. Este conjunto de actividades se engloba en lo que se podría denominarse Ciclo del Proyecto (figura 4) desde una ilustración diferente a la anterior indicada. Figura 4: Fases del ciclo del proyecto

Fuente: Trueba, 2002 Por fin, hacia el final, de los resultados del proyecto, se destacan las lecciones aprendidas que consisten en un compendio de experiencias configuradas en un proceso dinámico que cumple los propósitos de: a) retroalimentar procesos del ciclo de vida, y/o b) asentar argumentos de mejora aplicables a proyectos posteriores. Idea del proyecto La iniciación de un proyecto ha de iniciar por la concepción misma de esa idea que, como ya se ha dicho, busca transformar una realidad incómoda o problemática. Desde aquí entonces, el esfuerzo que corresponde es analítico y demanda de creatividad para, en primer lugar, reconocer la problemática y posteriormente poder visualizar o imaginar una solución de mejora aprovechando las oportunidades y reconociendo la realidad de los contextos asociados. Es fundamental en esta etapa de identificación de la idea saber definir bien los objetivos que se pretenden con el proyecto, para lo cual es recomendable promover el dialogo y la creatividad dentro de un equipo interdisciplinar.

Estudio de Pre- viabilidad o Pre- factibilidad Para evitar resultados no deseados y proyectos ejecutados que no cumplen los objetivos esperados, es conveniente realizar una serie de estudios previos, de pre- viabilidad o pre- factibilidad, que permitan obtener mayor información de la idea del proyecto de cara a disminuir riesgos (Trueba, 1995). Los estudios de Pre- viabilidad requieren por tanto de un planteamiento global que tenga en cuenta todos los aspectos determinantes de la viabilidad del proyecto. Al final de esta primera etapa, y en función de los resultados de estos estudios previos, el decisor podrá determinar si las ideas identificadas en la etapa anterior son viables, y si existe una alternativa estratégica que permita alcanzar los objetivos que se pretenden. Las conclusiones de la evaluación y critica del estudio desde los distintos puntos de vista, llevarán a tomar la decisión correspondiente de archivar, rechazar o pasar a la siguiente fase. Estudio de Viabilidad o Anteproyecto El estudio de viabilidad, comprende por su parte un análisis exhaustivo detallado sobre lo que anteriormente se ha realizado, se entiende una profundización en el tratado de los recursos, la incertidumbre y el costeo en función del tiempo o cronograma del proyecto (AEIPRO, IPMA, 2001). La finalidad del Anteproyecto es presentar un conjunto de soluciones al problema planteado, y clasificarlas de acuerdo con el grado de cumplimiento de los objetivos previamente fijados, con el fin de facilitar a la Propiedad la elección de la solución definida. Desde el punto de vista de la documentación el Anteproyecto constará de: 1. Una Memoria, en la que quedará plasmada la información requerida y los resultados de los estudios previos realizados, así como la descripción y justificación de las soluciones propuestas. 2. Los Planos, que definan, a grandes rasgos, las distintas alternativas. 3. Un Presupuesto aproximado de las mismas. Proyecto definido El proyecto definido constituye el máximo nivel de detalle en la llamada fase de pre- Inversión. Está constituido por un conjunto de documentos técnicos, financieros, socios- económicos, ambientales y de organización para asegurar que la propuesta de inversión se puede ejecutar con un máximo de garantías. Tanto si va precedido o no por los Estudios previos, la finalidad del Proyecto es la correcta definición de la solución adoptada de modo que ésta pueda construirse. Financiamiento del proyecto Una vez elaborado el proyecto definitivo hay que comprometer y materializar las ayudas financieras y los recursos públicos y privados necesarios para la ejecución del proyecto. La fase de Financiamiento del proyecto cubre principalmente el proceso de movilización de fondos por la vía más prudente y favorable. Las principales tareas que incluye esta fase son: movilización de fondos, análisis de las consecuencias contractuales de la financiación, asignación del presupuesto a los componentes del proyecto, cálculo de los flujos de caja, obtención de las autorizaciones de pago, validación y gestión presupuestaria (AEIPRO, IPMA, 2001). Ejecución del Proyecto La ejecución del proyecto es el momento en el que se movilizan los recursos para transformar la situación actual. En esta fase, en donde se materializan las inversiones, el proyecto alcanzan su madurez transformado las ideas en una realidad. La fase de ejecución de inversiones se inicia, en los Proyectos públicos con la licitación de las obras, correspondientes a todo o parte del proyecto, así como la selección de la dirección de ejecución (dirección de obra en los proyectos de arquitectura e ingeniería). En el caso de los proyectos públicos el procedimiento de adjudicación deberá llevarse a cabo conforme a los procedimientos y formas definidos en la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas. Operación y Gestión: Dirección del proyecto Durante la fase de operación y gestión se explota el proyecto y comprende desde la materialización de las inversiones hasta el final de vida útil del proyecto. Se requiere una auténtica tarea de dirección, que permita la gestión del proyecto, la coordinación de sus principales actores (cliente, suministrador, usuario, etc.) y la comunicación entre todos ellos (Trueba, Cazorla, 1995). La dirección de proyectos es la aplicación de conocimientos, aptitudes, herramientas y técnicas a las actividades del proyecto, encaminadas a satisfacer las necesidades y expectativas de los agentes del proyecto (Cano, 2001). Es así esta fase en donde con seguridad el comportamiento del recurso humano y su calidad están asociadas al cumplimiento de los objetivos, requiriéndose analizar temas de eficiencia y productividad, extrapolándose el interés inclusive a otros recursos como maquinarias, equipos, finanzas, economía y servicio. La dirección del proyecto en la fase de operación y gestión consiste en planificar, organizar, supervisar y controlar todos los aspectos del proyecto, así como la motivación de todos aquellos que están implicados en el proyecto, para alcanzar los objetivos de modo seguro y dentro de los criterios definidos de coste, retrasos y rendimientos (IPM, 2001). Evaluación Ex post Una vez finalizada la explotación del proyecto, la evaluación de los resultados tiene por objeto determinar si se han cumplido o no los objetivos del proyecto. Para ello es importante que estos puedan cuantificarse con unidades sencillas para que, una vez finalizada la actuación, sea posible su comparación con los resultados alcanzados.

El análisis de los resultados, es decir de las desviaciones entre lo realmente conseguido y lo programado, persigue el propósito fundamental de aprender y acumular experiencias vividas que constituyan una información esencial para formular y ejecutar nuevos proyectos futuros. Una de las diferencias entre el ciclo de proyectos públicos y privados radica en que estos últimos carecen de algunas fases; en concreto la fase de evaluación ex – post puede omitirse o realizarse esta fase supone un coste añadido que a veces no se justifica desde el punto de vista privado, aunque la recapitulación de la experiencia, juzgando al proyecto una vez finalizado, son de gran utilidad en todos los proyectos tanto públicos como privados. ¿Qué es la Dirección de Proyectos? En la intención de emprender un proyecto y con la perspectiva de obtener los resultados q...


Similar Free PDFs